Advertencia: contenido sexual.
Aunque no es muy descriptivo lo dejo como advertencia por si hay alguien que no le gusta esa clase de narración, de igual manera está hasta el final del capítulo, el resto lo pueden leer sin problema.Las próximas semanas pasaron tan rápido que sentí que tenía que ponerle una pausa a la vida.
Luego de aquel suceso en la biblioteca, la seguridad del palacio se incrementó al doble, si antes había un guardia en cada esquina, ahora había uno cada tres metros, Victoria solía ser más precavida con las personas que dejaba entrar a su oficina, y todos eran revisados cada dos por tres, por cuestión de seguridad.
Pero, a pesar de que creí que su actitud conmigo volvería a ser distante, eso no sucedió.
Simplemente, continuamos con los planes que teníamos, habíamos visto ya dos películas de Harry Potter, y me venció incontables veces en el Monopoly que era su juego favorito, aunque habíamos intentado con otros, a ese le tenía un cariño especial.
Fue por aquello, que no me sorprendió para nada que durante todas las sesiones del consejo real me invitara a estar presente, si bien no me contaba todo lo que sucedía, había un gran cambio desde que nos conocimos, hasta este momento, en el que sentía que confiaba un poco más en mí.
Y aquello me asustaba y me gustaba de maneras iguales.
Así que ahí estábamos, en la junta semanal cuando un señor, si no estaba equivocado era un marqués, presentaba su jubilación. Victoria, al ser la reina, tenía el derecho de aprobarla, y fue lo que hizo sin siquiera pensarlo, sabía por lo que había observado que lo que ella buscaba era deshacerse de la mayoría de los miembros del consejo, porque buscaba un equipo que fuera confiable, y elegido por ella de preferencia. Hasta el momento sus únicos elegidos habían sido Ruder, y también su prima. Aún no tenía claro si la chica estaba ahí por la promesa de la hermana de Victoria o si realmente había algo detrás de ello, porque si bien hacía su trabajo como era debido, no es que Victoria le compartiera mucha información extra, ni que confiara en ella.
La reunión terminó una vez que todos los temas a discutir fueron resueltos, y cada uno de los presentes fue inspeccionado antes de salir de la sala y ser escoltados fuera del palacio, o en caso de los que vivían aquí, simplemente fuera del salón. Victoria se quedó ordenando algunos documentos, para decirle a Zaida después lo que tendría que anotar.
Las juntas de consejo eran extremadamente confidenciales, así que solo los representantes y yo, teníamos permitido estar presentes. Ni siquiera entraban guardias a menos que fueran necesarios, como sucedió en el juicio de Lavi. Y por supuesto, todas las asistentes políticas se quedaban fuera, incluida la de la reina.
—Joseph, antes de que te retires, quería pedirte algo.
Me devolví hacía mi esposa, esperando a ver que me tenía que decir, quizás esa noche no podríamos continuar con nuestra maratón como habíamos planeado.
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Cuando la corona se rompe
RomanceJoseph tiene cuatro empleos, hace malabares con las cuentas cada mes y cada día qué pasa se siente más y más atrapado. Victoria es la heredera de uno de los reinos más ricos del mundo, pero para poder acceder al trono necesita un esposo. La propue...