G. E. W. W.: D. E. M. |1|

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Después de dejar el Medical God Code, la conciencia de Yun Luofeng regresó a la habitación. Sintió una mano acariciando su mejilla, las yemas abrasadoras de los dedos la hicieron abrir los ojos al instante. Su mano repentinamente agarró la mano de la otra persona, y sus ojos entrecerrados brillaron con un rayo de peligro.

-Yun Xiao, ¿qué estás haciendo?

Si la persona no fuera Yun Xiao sino otro hombre, ¡probablemente ya habría echado a ese hombre!

-Quería mirarte.

Los ojos del hombre miraban directamente a Yun Luofeng. Su mirada clara fue como una ola de descarga eléctrica, golpeando ferozmente el corazón de Yun Luofeng.

Este tipo no sabía nada sobre las relaciones entre hombres y mujeres, entonces, ¿cómo podía soportar pensamientos tan lascivos?

Obviamente, estaba pensando demasiado.

-Yun Xiao. —la expresión de Yun Luofeng se recuperó gradualmente a la normalidad y sonrió lánguidamente— Entraste aquí a escondidas, en realidad pensé que querías calentar mi cama.

La mirada del hombre hacia Yun Luofeng fue sincera y firme.

-Si tienes miedo al frío, te calentaré la cama todos los días.

-...

La expresión de Yun Luofeng se congeló por un momento y suspiró impotente.

-Yun Xiao, ¿alguna vez has tocado a una mujer?

El hombre negó con la cabeza honestamente.

-¿Qué tal una sirvienta?

-No.

-Debes haber leído Chungong Tu [1], ¿verdad?

-¿Chungong Tu? ¿Qué es eso?

El hombre arrugó las cejas, claramente sin saber de qué estaba hablando Yun Luofeng.

Yun Luofeng se acarició la frente.

-Entonces, además de cultivar, ¿qué más haces típicamente?

-Matar gente.

La voz del hombre era tan casual, como si matar gente fuera tan simple como comer y fuera una parte integral de su vida diaria.

-...

Yun Luofeng se quedó absolutamente sin palabras. ¡Ella no pensó que en este continente, en realidad habría alguien que nunca había tocado a una mujer en toda su vida! ¿Dónde vivió estos últimos años?

Después de todo, este continente Long Xiao no era Huaxia [2]. En Huaxia, incluso si te quedaras en casa, aún podrías tener una comprensión del mundo entero.

-Yun Xiao. —Yun Luofeng levantó ligeramente la comisura de sus labios, su apariencia absolutamente hermosa mostraba una sonrisa cautivadora— Cuando una persona que no tiene ni idea de la relación entre un hombre y una mujer como tú camina afuera, ¿cómo es que tu cuerpo y corazón logran no sucumbir al engaño de las mujeres?

Hacia Yun Xiao, su corazón estaba lleno de curiosidad. Ella no sabía cómo llegó a ser él a través de todos estos años, lo que lo llevó a ser tan... ¿inocente?

El hombre frunció el ceño.

-¡Las mujeres que querían acercarse a mí, las maté a todas!

Detestaba el olor del cuerpo de otras mujeres. Cada vez que esas mujeres querían acercarse a él, las arrojaba a todas para alimentar a los lobos. Particularmente, la emoción en sus ojos cuando lo miran lo hizo sentir repugnante sin razón.

Solo Yun Luofeng...

¡A su lado, no solo no sentía asco, sino que también quería acercarse a ella!

-Señorita.

En este momento, Qingyan se apresuró a entrar desde el exterior de la casa, hablando mientras jadeaba:

-Su Alteza el Príncipe Heredero había enviado a alguien aquí, diciendo que quería ver a la señorita mayor.

¡Desde que Yun Luofeng se había establecido en la montaña trasera, solo Qingyan y Yun Xiao, esos dos, podían venir a la montaña trasera! Sin embargo, incluso si fueran ellos, todavía no expondría al Segundo Tío bajo sus ojos.

-¿Príncipe heredero? —Yun Luofeng se estiró perezosamente, bajándose de la cama— De hecho, me gustaría saber para qué vino a buscarme este príncipe heredero.

-Sí señorita.

Qingyan felizmente siguió a Yun Luofeng, saliendo por la puerta.

Después de que las dos figuras desaparecieron por completo, Yun Xiao frunció el ceño y llamó con frialdad:

-Lin Qiong.

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[1] Un libro sobre sexo

[2] Hace referencia al mundo de donde vino la protagonista.