G. E. W. W.: D. E. M. |1|

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En el salón principal, los funcionarios mantuvieron la cabeza baja sin atreverse a hacer un chillido, sintiendo un profundo temor de que una pelea entre estos dos Maestros de Longyuan traería problemas a los inocentes.

La cara de Mu Xingchou parecía que comía heces, sus ojos extremadamente feos y viciosos permanecieron inmóviles mientras miraba el rostro desvergonzado de Yun Luo. 

Si no fuera por el hecho de que no pudo ganarle a ese viejo en una pelea, ya se habría acercado y lo habría golpeado.

-Yun Luo, ¿no conoces la vergüenza? ¿Es toda tu familia tan desvergonzada? Tu nieta está completamente bien allí, a diferencia de mi nieto, que ahora está inconsciente. Dicho esto, Su Majestad sabe muy bien quién está realmente equivocado.

Yun Luo se rió burlonamente mientras se levantaba, sus ojos feroces y dominantes eran como espadas afiladas.

-Mi nieta está sana y salva ahora gracias a la protección capaz de nuestros guardias de la Familia Yun, ¡O de lo contrario me temo que podría haber perdido a mi único pariente! Sin embargo, aunque mi nieta pudo haber escapado de este asunto, estaba muy traumatizada. Hoy, si no me da una explicación, ¡ordenaré a mis hombres que pisoteen su mansión hasta el suelo!

Mu Xingchou estaba enojado hasta que su cuerpo tembló, respiró hondo para reprimir su ira de hace un momento; sin mirar más al viejo, volvió su línea de visión hacia Gao Tu, el emperador.

-Su Majestad, que Su Majestad deje en claro quién tiene razón o quién no.

Su propia hija era la amada consorte de Su Majestad; su nieta, Mu Wu Shang, y el Príncipe Heredero también se habían enamorado. 

Si no fuera por la interferencia de Yun Luofeng, Wu Shuang ya habría sido la consorte del Príncipe Heredero.

Sin embargo, ¡Wu Shuang se convertiría en la Princesa Consorte tarde o temprano! ¿Cómo podría Yun Luofeng, ese desperdicio, ser adecuada para las tres palabras "Madre del Mundo"?

-Esto... —las cejas de Gao Tu se fruncieron levemente mientras observaba a los dos oficiales señalándose el uno al otro. Al final, suspiró levemente— Primer Ministro, la Mansión Mu estaba realmente equivocada en este asunto, la Familia Yun actuó en defensa propia. Deja que Mu Shen vaya a la Familia Yun para disculparse.

No es que Gao Tu no quisiera favorecer al primer ministro Mu, es solo que este Yun Luo dejó su hogar durante diez años por el bien de Long Yuan, si seguía favoreciendo al primer ministro Mu en este momento, los corazones de la gente común definitivamente se enfriarían hacia él.

De todos modos, no importaba si se trataba de los padres de Yun Luofeng o del genio de la familia Yun, Yun Qing Ya, ¡el resultado final sucedió porque estaba predispuesto hacia la mansión Mu! Y esta Yun Luofeng era la única semilla de la Familia Yun, si algo realmente sucedió, tenía miedo de que el viejo se vuelva loco en ese mismo momento.

-¡Su Majestad!

-Bien. —al ver que Mu Xingchou quería abrir la boca, Gao Tu agitó la mano, deteniendo sus palabras. Inmediatamente, miró a Yun Luo con dignidad y dijo— Este asunto termina así, Mu Shen acosó a Yun Luofeng y al final recibió retribución; así que abandone este asunto de la compensación, ya que Yun Luofeng no recibió ningún daño. ¡En el futuro, nadie podrá mencionar este hecho!

Claramente era Mu Shen quien quería violar a Yun Luofeng, pero de la boca de Gao Tu simplemente se convirtió en una acción de acoso.

Hay una gran diferencia entre esos dos, que no tienen el mismo significado.

Los ojos de Yun Luo miraron hacia abajo, ocultando un toque de decepción. 

Suavemente dijo: 

-¡Dado que Su Majestad ya ha tomado una decisión, este tema se obedecerá! Es solo que este servidor ahora tiene una edad avanzada, por lo que este servidor no puede llevar a las tropas a la guerra en el futuro. Esta Ficha de Comando será devuelta a Su Majestad.

Después de decir esto, sacó la Ficha de Comando de sus mangas, se acercó lentamente al emperador y se la entregó al eunuco al costado.

El eunuco tomó la Ficha de Comando y fue al lado de Gao Tu, llevándosela respetuosamente.

Gao Tu estaba precisamente preocupado por cómo recuperaría el poder de cientos de miles de tropas, nunca pensó que este viejo tomaría la iniciativa de entregárselo. 

Su corazón inmediatamente estalló en éxtasis.