ERES MIA, ENTERATE. (+18) / 𝐂𝐨𝐦𝐩𝐥𝐞𝐭𝐚 / 𝗘𝗗𝗜𝗧𝗔𝗡𝗗𝗢***

Capítulo 54

Narra Destiny.

Estoy a punto de terminar una campaña, lo que significa que por fin tendré vacaciones.

No estoy cansada de mi trabajo, me encanta modelar. Pero el precio de que me elijan para todo es justamente ese: debo estar en todos lados, todo el tiempo, sesiones en exceso, que me maquillen y me vistan constantemente.

Soy su muñeca las veinticuatro horas del día. Es agotador. Quiero un día para mi sola, al menos uno. Donde no deba maquillarme con mil cosas ni peinarme con tantos productos.

Lisa sabe que recién estoy comenzando, y que quizás me han exprimido un poco últimamente, y prometió ayudarme a sobrellevarlo, y a pedir más espacio para mi.

¡Por fin!

~

Estaba pensando en Aria, hace demasiado que no la veo y la extraño. Si no estuviera de novio con Cole, seguramente ella sería mi representante, o algo así.

Pero hemos estado distanciadas, de vez en cuando nos enviamos algún que otro texto, pero nada más. 

No me fui definitivamente, pero casi no tengo tiempo ni de volver. 

A mi padre lo veo cada cierto tiempo, el viene a verme, ahora pasa más tiempo en la casa porque tiene novia y no lo deja trabajar tanto como antes porque es innecesario, pero igual sigue viajando en menor medida.

Por ellos espero con ansias mis vacaciones, quiero poder volver a estar con mi gente. 

~

No debe existir alguien más insoportable e insistente que Lisa, que vive constantemente queriendo llevarme de fiesta, con la excusa de que debo distraerme y relajarme. 

Cada día vive diciéndomelo, queriendo que la acompañe a donde ella sale. 

Y cada día le pongo excusas porque no me apetece.

<¿Esperen, donde quedó la Destiny fiestera, que amaba salir?>

No sé, por alguna razón eso ha dejado de interesarme.

No es depresión, no.

Sin embargo, hoy decidí acompañarla. No puedo vivir despreciando sus invitaciones.

Es el último día que estaremos en Las Vegas, asique ir a la ultima fiesta aquí no me parece mal.

~

Llegamos a una casa preciosa, que no sé de quién será, pero es realmente lujosa. Debería robarle ideas para mi futura casa.

Alguien nos recibe y nos lleva hasta un enorme jardín lleno de palmeras y con un césped bien verde. La gran cantidad de luces hace que todo resalte el triple, a los lados de la piscina hay hasta antorchas encendidas... 

El dueño de este lugar, y de la fiesta, es alguien un tanto excéntrico al parecer. Hay tantas cosas en este jardín que no sabes bien que mirar, pero al fin y al cabo todo es fabuloso.

Hay gente vestida de fiesta, otros más elegantes, otros en traje de baño. Hay de todo. Lo único que tienen en común todos es que están divirtiéndose, todos están disfrutando.

Nos entregan unas copas con una bebida turquesa, nos miramos con Lisa, no sabemos que es pero huele riquísimo. 

Juntamos nuestras copas haciendo un falso brindis entre nosotras, y sin pensarlo dos veces más bebemos aquello, que sabía tan dulce que parecía súper suave.

Lo bebimos muy rápido y quedamos con ganas de más. Asique mi buena amiga Lisa fue a conseguirnos más. 

Me quedé esperándola y mirándolo todo, todo era digno de ver en aquel lugar.