Epílogo

20.5K 1.1K 147
                                    

Tamara.



1 mes después.


Todo pasó demasiado rápido, de un momento a otro los planes se colocaron sobre la mesa, Bastián tomó las llaves del auto y aquí estábamos otra vez.

Realmente no era consiente de cuantas veces pise el bar, pero después de un largo mes limitada en todo, gracias a la herida de mi hombro, puedo decir que se siente relajante salir del departamento. Aunque el ruido de la música sea demasiado alto.

Por supuesto que en medio de mi relajación y emoción contenida apareció la nostalgia y la tristeza acompañándola, venían dispuestas a robarme toda la paz que sentía. Recordar las locuras que viví a lado de Chloe siempre las tendría en la memoria y no esperaba que eso se convirtiera en una tortura, pero era imposible de olvidar, realmente me divertí a su lado.

Estaba en una mesa especial y con buena compañía y no me refería a los hermanos Russell, si no a Madison que estaba de visita y los motivos era la boda de Melissa, prima de todos ellos. Madison es una mujer muy linda y poco a poco fue siendo agradable para mí. Ella conocía muy bien a que se dedicaban los Russell y aprovechando su visita rogó por estar aquí.

—Estoy emocionada—expresó sonriente—. Nunca había estado en un lugar como este.

—¿En serio?

—Si, mis dos mejores amigas no son de estos ambientes. Una de ellas está en medio de una relación toxica y no se atreve a desafiar a su novio o mandarlo a la mierda, y la otra trabaja para mi madre y nunca tiene tiempo.

Tenerla a mi lado facilitaba la comunicación.

—¿Y tú? ¿A qué te dedicas?

—Soy chef repostera, pero por ahora ayudo a mi madre con el manejo de sus restaurantes. ¿Entonces?—pregunta con cierta pena—.Estás con los tres. Discúlpame no quiero ser imprudente, pero me siento curiosa.

—Si, estoy con los tres.

—¿Y la sociedad? Ya sabes. Aquellos que lo saben, ¿no te juzgan?

Hasta ahora no había escuchado malos comentarios, tampoco es como que lo estoy gritando cuando ando por las calles. Solo lo saben los más cercanos que son mi hermana, Joe y ella misma.

—No me importa mucho lo que diga la sociedad. Mis decisiones no se basan en lo que opine la gente. Soy feliz y es lo que importa.

—¿Y cómo llegaron a este punto?

—Pasaron muchas pero muchas cosas...—cuando estaba dispuesta a contarle parte de como comenzó todo esto, cambiaron la música y el show de los strippers dio inicio.

Como en aquella ocasión un montón de chicas estaban en la zona más cercana esperando un poco de contacto con ellos. También con dinero en mano. La euforia es increíble cuando ellos aparecen.

Me levanto y me acerco a la orilla de la zona vip, desde mi punto puedo apreciar mejor y desde arriba puedo ver como todas enloquecen.

—Vaya, los aman—se acerca Madison—. Este trabajo es muy extravagante. ¿No te molesta?

—No—sonrío. ¿Cómo iba a hacerlo? Si ellos bailan observándome de vez en cuando.

Todas la chicas pueden creer que el baile es para ellas y por su dinero, pero esta vez no. Ellos bailaban para mi

Eran míos, solo míos. Lo sabían y yo lo sé.

No solo ellos estaban en el escenario, había varios hombres más. Reconocí a Harry entre todos ellos. Se movía increíblemente bien, pero fue todo lo que pude observar de él, me sentía rara verlo mover la pelvis con insinuación.

Tamara Por Tres.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora