Confusión {Beny Jr}

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• Leila •

Ya era por la mañana, me desperté y fui a hacerme un sandwich de jamón y queso junto a un Colacao. En lo que desayunaba llamé a Beny.

* Videollamada con Beny 🤍*

- Hola, mi amor, ¿cómo estás?

- Bien, anoche salí de fiesta.

- Si se nota.

- ¿No dormiste anoche?

- No, estuve haciendo cosas con los chicos, tú sabes a lo que me refiero.

- Bueno...

- Hola, Leila - me saludó Morad.

- Hola, mi vida

- ¿Mi vida? - se puso Beny en la cámara.

- Ay, bobo, es de cariño.

- A él le dices: "mi vida" y a mí: "bobo".

- Ay por Dios que niño más celoso.

- Son bromas, nena, estoy en casa de Morad que anoche vine para jugar a la play y me quedé dormido.

- Muy bien, oye.

- Dime

- Ayer Zayra conoció a un rollito de ella en la fiesta y me convenció para que se viniera con nosotras a quedarse que también va a estudiar lo de policía, o sea, ella tenía como una casa de alquiler pero era muy cara y a la retrasada de mi mejor amiga me convenció y ahora están durmiendo.

- Que bien, les salen a ustedes más baratos los gastos entonces.

- Ya, pero... no sé... que miedo.

- Ay, mi amor, no seas paranóica, eso es como una compañera de piso.

- Por eso mismo, y yo me vine aquí con Zayra para no tener compañero de piso.

- Por intentarlo no pierdes nada.

- Ya, ya, si nosotras ayer lo hablamos y llegamos a un acuerdo, era que si la tía esta era una carga la poníamos de patitas en la calle, pero si ayuda y se portaba bien se quedaba.

- Me parece bien.

- Ya, ya...

- ¿No sabes como se llama, verdad?

- Dalila, Daysi o algo así.

- Vas muy perdida.

- Ah, vale, es verdad - recordé su nombre - se llama Dayla y es rubia, de Ibiza, es montón de guapa.

- ¿Ya hiciste memoria, eh? - reí.

- Esa para Morad, díselo, que a él le gustan las rubias - reí.

- Pero si folló con Zayra, tiene que ser bollera.

- Ostia - pensé - es verdad, me siento como en mi casa, a la única que le gustan los hombres es a mí, porque mi hermana la Lissette es lesbiana también.

- Nada nuevo para tí entonces...

- Te voy a contar una cosa, pero no te enfades.

- Vale, dime.

- Anoche en la fiesta subí a las habitaciones con un tal Maikel, es cubano.

- ¿Para qué subiste?

- Porque mi móvil se estaba quedando sin batería y él me dijo que en la habitación había dejado sus cosas y ahí tenía cargador para iPhone.

- Vale, ¿qué pasó?

- Dile a Morad que se vaya.

- Koala, vete un momento, porfa, tío - se levantó y cerró la puerta - ahora sí, dime.

- Pues nada, entro a la habitación y escucho como cierra la puerta con llave en lo que yo estaba cargando el móvil, le digo: "¿qué haces? Déjame salir", y me dice - me interrumpió.

- Consigue su número o su Instagram y pásamelo. ¿Te violó? - me preguntó incrédulo.

- No, pero si me fue a obligar a chupársela, y yo lo que hice era decirle que cerrara los ojos, lo típico, que se tranquilizara, y cuando no sospechaba nada le pegué, cogí la llave, salí del cuarto y lo encerré, aún se lo tengo que contar a Zayra.

- ¿En serio? - me preguntó mi mejor amiga - Hola, Beny, guapetón - lo saludó.

- Hola, guapa, Zayra, tú sabes el Instagram de él, ¿o algo?

- No, pero le pregunto a mi amigo y que me lo pase.

- Si, porfa y pásamelo a mi WhatsApp.

- Vale - dijo mi amiga y se fue a hacerse su desayuno.

- ¿Qué le vas a hacer? - le pregunté.

- Nada

- No, Mohamed, dime la verdad, venga.

- Un toquito de atención se le dará, a ver si le parece bien hacerle eso a las mujeres, como si no tuviera madre el maricón ese.

- Mira, como yo me entere quien es el hijo de puta le vacio la tola en la cien - dijo Morad eufórico.

- ¿Pero este hombre no se había ido? - pregunté

- Me puse a escuchar por la puerta, ¿vale? - me dijo.

- Ah, está bien.

- Mi amor, a tí te importa dejarnos dormir un día a los chicos en tu casa, pregúntaselo a Zayra y a la otra chica, como si dormimos en el piso, estamos acostumbrados, solo una noche.

- Vale, yo cuando Dayla se despierte se lo pregunto.

- Vale, mi amor, avísame.

- Sí, pero que le van a hacer, ¿le van a pegar?

- Lo que lo quiero es matar, pero no, que luego tu padre me pone veinte cadenas perpetuas y me extraditan a Estados Unidos.

- Es verdad - reí - pues ustedes me dicen el día y se quedan. ¿Cuántos vendrían?

- No hemos hablado con ellos, pero los que se vienen si o si, son: Yo, Morad, PimPam, Ojos Claros, Papa, Gafia... - lo interrumpí.

- ¿Más? Seis está bien.

- Bueno... dime que te dicen las chicas y hablamos.

- Sí.

- Beny - lo llamó Zayra - ya te pasé su perfil por Instagram.

- Vale, muchas gracias, adiós, guapísimas.

* Colgó*