Miss Simpatía

Capítulo 41: La playlist de Cam

Regresar a California después de un par de años resultaba simplemente nostálgico, todas esas madrugadas grabando hasta tarde, los días dando largos paseos con mis amigos y las noches que había acompañado a Dexter a tocar parecían haber quedado en el olvido.

No había pisado la ciudad desde la boda de Charlie, pero me reconfortaba el hecho de que por fin podría conocer a su bebé, aunque el viaje no era precisamente familiar.

—Iré por un café, muero de sueño— dijo Sylvie señalando la cafetería del aeropuerto con la cabeza y yo asentí.

Ella se había convertido en una promesa de la industria de la moda y ahora viajaba por el mundo diseñando para celebridades y gente de la política.

Compré una revista para pasar el rato en lo que nos llamaban para abordar. En la portada aparecía una foto de Strange Permission y un titular gigante en el que rezaba "Del baúl: El éxito de SP que nunca vio la luz".

Abrí la revista en la página de dicho artículo, al parecer los chicos estaban por lanzar un nuevo álbum con canciones inéditas de sus inicios, incluso había una imagen promocional en donde se podía apreciar una caja de madera repleta de cartas, flores marchitas y fotografías viejas de la banda tocando en un sótano. En un costado pude vislumbrar un pedazo del periódico que tomó la foto en donde Dexter y yo aparecíamos hablando la noche que fuimos al planetario. Sonreí al ver lo jóvenes e ilusionados que estábamos en ese momento.

—¿Qué lees? —preguntó Sylvie tumbándose a mi lado y yo pasé de página.

Para mi mala suerte, era toda una plana de la exclusiva con la banda.

—Nada— musité cerrando la revista de golpe y ella me la arrebató para leerla— ¡Dame eso!

—Pensé que no era nada— dijo socarronamente mirando el artículo— Siempre tuve la esperanza de que ambos quedasen juntos al final.

—No sabía que te agradaba tanto.

—¿Bromeas? Adoro a Dee, hace poco diseñé un par de prendas para su gira— mencionó como si nada.

—Dijiste lo mismo de cada chico con el que salí en Chicago, ya no eres tan dura como antes.

Sylvie bufó.

—¿Cada chico? —preguntó divertida— Fueron como dos y no duraste más de una semana con alguno...

—No eran mi tipo.

—Claro, porque no son guitarristas altos, rubios y de ojos verdes ¿Cierto? —levantó y bajó las cejas rápidamente mientras me enseñaba una fotografía de Dexter en la revista— Vamos a leer un poco.

Negué estampando mi cara contra la almohada de viajes de mi amiga.

—Escucha esto... "Dee, "Camelia" es la primera canción del álbum y una de las más amadas por su hermosa letra y melodía, ¿Podrías contarnos de qué se trata?"

» Las camelias florecen en invierno mientras las demás flores se marchitan, son diferentes, van en contra de la corriente y sobreviven a la adversidad volviendo bello un paisaje tan oscuro...Cuando yo tenía veintidós me sentía demasiado perdido, creía estar en el fondo de un frío abismo hasta que conocí a alguien que, a pesar de todas las cosas malas que le pasaron, se superó e hizo de mi vida y de la de otros un lugar feliz dentro de tanta amargura...Ella era como una camelia, mi Camelia.

Le miré pasmada por un momento.

—Nunca había escuchado de esa canción— mencioné aturdida.

—Deberías escucharla, es realmente buena.