Era Miércoles cuando pudieron pasar a ver a Sofi, Louis dejó que la primera fuera su madre y después pasó él con Liam.
— Le acaban de poner una pequeña dosis para que pueda dormir al menos por una hora, así que no tardará en volver a dormir, mi vida.
— Está bien mamá, en un momento salimos.
— Si, ella muere de ganas por verte Liam.
Así que entraron, ya habían tenido la oportunidad de verla anteriormente, pero siempre dolía ver a alguien que quieres de esa forma. Realmente la presencia de Liam ahí, hacía que Louis fuera más fuerte.
Fueron agradables los pocos minutos que pudieron estar dentro, aunque no fue mucho tiempo, disfrutaron las bromas por parte de Sofía, porque aunque ella sabía perfectamente que su hermano estaba enamorado de Liam, siempre estaba coqueteando con él (aunque todo era una broma).
Cuando Sofi se quedó dormida, llamaron a una enfermera para que acomodara su cama y almohada, saliendo ellos para no estorbar.
Liam le dijo a Louis que tendrían una pequeña salida de amigos, como antes y que tenía que estar más calmado ahora que la salud de Sofi ya no corría ningún riesgo. Así que aunque se quiso hacer el difícil un rato, por dentro se moría de ganas por aceptar y lo hizo.
Cuando se conocieron, descubrieron una especie de casa del árbol en el bosque que está cerca de la antigua casa de Liam, ya estaba algo vieja e inestable para cuando la encontraron, pero aún soportaba para ellos. Y era obvio que con el paso de los años se deterioró más, así que mientras Liam y Louis se encontraban en el hospital aquellos días, Liam llamó a algunos de sus trabajadores que se encontraban cerca para que la arreglaran. Tenía que ser un trabajo rápido y eficaz, algo digno de la familia Payne.
Louis al ver hacía donde se dirigía el carro, supo de inmediato a donde iban, pero definitivamente no esperaba encontrar lo que encontró. Muchas veces pensaba en ese lugar, ahí fue en donde se forjó su amistad, se contaban sus secretos, hacían algunas tareas o proyectos, lloraban si estaban tristes, era increíble.
Bajaron del carro para poder subir a la casita, que ya no era casi nada a como la recordaba, pero era más que obvio, si querían estar dentro, muchas cosas se tenían que cambiar si no querían tener un accidente.
— Bueno Lou, sorpresa.
— Esto es increíble Liam, ¿cuándo planeaste todo esto?
— Desde el primer día en que llegué al hospital — se acercó a la cajuela para sacar algunas cosas — cuando iba de camino, pasé por aquí y simplemente recordé lo bien que la pasábamos y hablé con mamá y algunos chicos del trabajo para que vinieran y arreglaran el desastre.
— Pues si que trabajaron rápido Li, les debes una muy buena paga, se ve muy bien desde afuera, imagino que por dentro será mejor.
— Y lo es Lou.
— ¿Cómo lo sabes?
— Bueno, pues cuando acabaron y todo, me mandaron algunas fotos.
— Esto es fantástico Li, muchas gracias — dijo con algunas lágrimas a punto de salir — de verdad eres increíble y te quiero tanto.
— Hey, no más lágrimas, hoy debemos de estar bien y pasar un buen momento con palomitas y películas, ¿si?
— Si.
Así que solo se dedicaron a sacar las cosas del carro (que Louis no tiene no idea de en qué momento Liam compró todo eso, haciendo preguntas de vez en cuando mientras suben todo, y Liam contestando con un simple "Ya lo dijiste, son increíble" que terminaba con un Louis rodando los ojos, pero perdidamente más enamorado).
💙
Estuvieron viendo algunos programas en la pequeña televisión que tenían, de algunos juegos (celebrando cuando Liam acertó en una de las respuestas), vieron también un programa que los hizo llorar, un reality de citas (que la verdad no pusieron mucha atención), pero en conclusión, fue un muy buen momento.
❤️
Cuando ya se estaba haciendo tarde, Liam salió a comprar algo de comer, sabía que iba a tardar algo de tiempo en ir y venir, estaban en el bosque (no muy adentro, pero si), no era que la ciudad estuviera muy lejos de cualquier forma.
Liam se subió a su carro para ir lo más pronto posible a comprar lo necesario ya que no quería dejar solo a Louis por mucho tiempo y así regresar antes de que empezara a oscurecer, sabía que Louis era una persona muy miedosa y al primer ruido extraño que escuchara, tendría un ataque de miedo o algo así.
Llegó al pequeño establecimiento y pidió lo más rápido que pudo, pasó por algunas cervezas también y uno que otro dulce porque sabía lo que a Louis le gustaban. Regresó rápido, con toda la precaución, y para cuando llegó, las luces de la pequeña (pero lo suficientemente espaciosa para ambos) casa ya estaban prendidas. Eso para nada le sorprendía, mucho menos el que aún no estuviera anocheciendo, y que incluso aún entrara mucha claridad por las ventanas.
Abrió haciendo el suficiente ruido para que Louis se diera cuenta de que ya había llegado y así no asustarlo, y ahí estaba Louis, medio dormido en uno de los pequeños cojines que tenían. Se veía tan hermoso, claro que siempre se veía así, cualquier persona que tenga a Louis como pareja, se debería de sentir afortunado... y es por eso que él no lo merecía de esa forma, quizá ni como amigo, pero de cualquier manera disfrutaría su compañía por ahora.
— ¿En qué tanto piensas Liam?
— Nada, solo recordaba que olvidé pedir esto sin almendras.
— Oh Li que tonto eres, ahora me lo tendré que comer todo yo solo y quiero que sepas que es un gran esfuerzo el que haré.
— Por supuesto que lo harás Lou, ahora levántate y ayudame a servir la comida.
Louis se levantó a ayudarle a Liam y comieron viendo una película, su película favorita.
Para cuando acabó la película, ellos también habían acabado de comer y tomar las cervezas que Liam había comprado y Louis ya había acabado con todos los dulces también. Ahora estaban arreglando su desorden para cuando se fueran al día siguiente.
— Estaba pensando que podríamos ir a ese parque de diversiones Payno, hace años que no vamos.
— ¿Estás seguro? creí que querrías ir al hospital en cuanto saliéramos de aquí.
— Mamá ya está allá de cualquier forma Li, y en verdad quiero disfrutar estos días que estés aquí conmigo, antes de que nos distanciemos de nuevo.
— Entonces... está bien Lou, mañana iremos a ese parque.
— Genial, quizá aún tengan en la montaña rusa tu foto de cuando nos subimos la primera vez.
— Dios no Lou, si solo quieres ir a comprobar eso, ni de loco te dejo acercarte a ese juego.
— Tranquilo Li, no solo quiero ir por eso, también me quiero subir.
— Si, seguro. De cualquier forma, no entiendo porque los dueños de ese lugar toman esas fotos y las dejan ahí para exhibir a las personas que se suben, digo, es obvio que no vamos a salir de la mejor forma.
— Estamos hablando únicamente de ti, ¿no? porque yo salí más que genial — Liam rodó los ojos ante eso — además, tranquilo Li, esa foto que te tomaron fue hace años, seguro únicamente tienen las más recientes.
— Eso no lo hace mejor, ¿tienes una idea de cuántas personas vieron nuestra foto?
— Si Liam, muchas personas, pero eso ya es pasado, ni siquiera vives aquí ya, ya no te preocupes por eso y dime en donde dormiré que tengo mucho sueño.
— Detrás de la mesita de la tele, hay dos colchones inflables — antes de que Louis dijera algo — y también hay una bomba Louis, no tendrás que inflarlo con tu boca.
— Genial Li.
Acomodaron las cosas, y se quedaron dormidos hablando de cualquier cosa de su pasado, ambos queriendo que esos momentos juntos no acabaran nunca.
