Capítulo 45

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Dos semanas después.

Liam no había pensado en lo mucho que extrañaba su cama hasta que se encontró recostandose en ella. Por fin. Descansó su espalda contra las cómodas almohadas y se relajó algunos minutos antes de abrir sus ojos y suspirar ante el silencio a su alrededor.

Anel y Karen habían insistido en quedarse una hora más a su lado, pero él sabía que ellas también estaban cansadas de todo el alboroto del hospital y quería que descansaran.

Zayn tuvo que ir a resolver algunas cosas a su trabajo y Louis hacía algo similar, así que tenía ese momento para él solo. Aún no podía regresar al trabajo, fue una de las condiciones para que el doctor le diera el alta definitiva y pudiera ir a casa.

Enloqueció en cuanto le dijeron que podía irse. Aunque tampoco hubiese mucho que pudiera hacer en casa, se sentía más cómodo y más seguro estando ahí.

Se encontró organizando un poco su ropa. Estar en el hospital lo había hecho perder algo de peso y decidió que en cuanto pudiera, donaría toda la ropa que ya no iba a poder usar e iría a comprar más. Tal vez alguien de sus amigos lo quisiera acompañar.

Tomó una ducha y luego de eso, ya no tenía nada que hacer.

Entró a su cuarto y miró las cosas de Zayn. Se sentía todavía cálido; lo que es estúpido, porque Zayn no estaba ahí, pero podía sentirlo.

Pensó en la expresión del pelinegro al contarle su decisión luego de que lo hizo con Louis. Él sonrió enormemente y solo asintió cuando se acercó a abrazarlo, fue tan lindo, que Liam se sentía tan afortunado de tenerlo en su vida.

Con Louis fue casi lo mismo, siempre comprensivo y sin cuestionar nada de lo que le había dicho. Pudo ver un poco de dolor en su mirada, pero no podía hacer mucho para borrar esa expresión. Al menos no sin volver a hacerle daño a alguien más.

Suspirando de nuevo, decidió tomar una ducha mientras que Zayn regresaba del trabajo. Sería lindo tener una charla con él antes de cenar.

🍄🍄🍄

— Liam — Zayn había llegado del trabajo y encontró a Liam profundamente dormido sobre las sábanas de su cama — Liam, despierta.

Sonrió cuando el castaño no mostró señales de querer moverse, siempre había tenido el sueño pesado, y luego de no haber dormido en su propia cama por meses, seguramente se sentía muy cómodo.

Lo dejaría dormir un poco más mientras tomaba una ducha rápida antes de calentar la cena.

Se desvistió lo más rápido que pudo y trató de no hacer mucho ruido para no despertar a Liam. Volvió a sonreír cuando lo vió aún dormido sobre la cama, solo que ahora, había una almohada cubriendo su rostro.

Esta vez, fue imposible no despertarlo y se acercó lentamente hasta llegar a su lado y sentarse en la cama.

— Li — tocó su brazo y lo apretó suavemente para moverlo — Liam.

El castaño se removió un poco pero solo sirvió para que en medio de su somnolencia, se volviera a acomodar.

— Liam — rió un poco — Vamos, voy a calentar la cena.

No esperó una respuesta esta vez, y salió del cuarto cuando vió que Liam se despertaba.

En la cocina, acercó los platos y utensilios que usarían, antes de comenzar a calentar todo y servirlo en sus respectivos lugares. Antes de que pudiera volver a subir y comprobar que Liam se hubiera despertado, lo vió entrar a la cocina.

Llamada perdidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora