𝐈𝐍𝐀𝐆𝐎𝐓𝐀𝐁𝐋𝐄 [𝐒𝐓𝐄𝐃𝐃𝐈𝐄]

𝐕𝐈𝐈𝐈

18 de junio 2020, Irak

Steve amarro fuertemente los cordones de sus botas antes de salir a hacer la ronda de la noche junto a su mejor amigo.
Luego de alejarse un poco del campamento militar, Billy iba a su espalda, cantando I Don't Want To Miss A Thing de Aerosmith. El castaño le sonrió con complicidad a su rubio amigo por lo cliché de la canción. Aquella noche un gélido frío se instalaba en aquellos escombros de lo que había sido una ciudad en algún momento, había luna llena y agradeció que el chaleco antibalas y el casco le dieran un poco de calor esa noche. A lo lejos quedó el campamento donde los demás soldados dormían.

- No quiero que nos alejemos mucho, pero creo que eh oído algo detrás de ese muro -

Billy apunto a lo que parecía haber sido una pared antes de haber sido destruida, ambos se miraron mientras cargaban sus armas. Steve por un segundo pensó en que debía hablar por la radio para pedir refuerzos pero su mejor amigo captando el mensaje negó con la cabeza y le hizo un gesto con el dedo para que guardara silencio, si es que había alguien ahí seguramente ya había notado la presencia de ambos soldados.

El sudor frío bajo por la nuca de Steve, había sido entrenado entre tantas cosas, para situaciónes así, pero el factor de la noche siempre lo ponía nervioso. Se intentó tranquilizar pensando que el ruido que provenía detrás del muro podría ser un perro perdido entre las ruinas o un niño pequeño buscando abrigo, no sería la primera vez que algo así sucedía frente a sus ojos.

Billy saltó primero y luego de dar un grito de atención, Steve pudo sentir como la respiración de su amigo se traquilizaba, al parecer no había nadie.
Él le siguió con el salto y se unió a Hargrove en el otro lado.

El soldado apretó su arma contra el pecho inspeccionando el lugar a espaldas de Billy, el ruido había desaparecido así que bajo su arma.

Lo que siguió fue una emboscada, Steve vió como dos hombres salían por el lado contrario disparando contra ellos, antes de que pudiera reaccionar uno de ellos había herido a Hargrove cerca del cuello con varios disparos.
Sus manos respondieron disparando contra el hombre que estaba más cerca de el, haciendo que el tirador cayera abatido contra el piso, cuando en milésimas de segundos apuntó contra el otro hombre sintió por la espalda que alguien le disparaba, los primeros impactos le hicieron caer al suelo, todos habían dado en su costado izquierdo y el dolor le hizo perder el conocimiento durante varios segundos.

Cuando volvió a recuperar el sentido, tuvo el peor dolor de su vida, el chaleco había detenido cuatro balas, pero otras tres se habían insertado profundamente en su cuerpo, la sangre salía a borbotones, pero con desesperación busco la radio que tenía para poder comunicarse. Observo a su alrededor, percatandose que aquellos hombres ya se habían ido.

- PN88.... Nos atacaron... Harrington y Hargrove, cambio... -Grito, intentando mantener la calma mientras se revolcaba en el suelo.

- Harrington, Hargrove vamos en camino, hemos escuchado los disparos -
Sus ojos buscaron con miedo a Billy que yacia tendido en el suelo a unos metros de el, se arrastró por el piso hasta llegar a dónde se encontraba su amigo. El tiempo se detuvo cuando vio el pálido rostro del soldado, su cuello estaba bañando en sangre y el no estaba respirando.

- ¡Billy! - Grito mientras sacudía el cuerpo del soldado.

Las lágrimas caían sobre el rostro de su mejor amigo el cual no se movió mientras, el se posicionaba para realizarle reanimación cardiovascular.

Estuvo así casi cinco minutos hasta que su propio cansancio y dolor le hicieron dejarse caer sobre el cuerpo de su amigo. Se abrazo al soldado llorando fuertemente de tristeza y dolor.