Como la luna y el sol

Dudas.

El día en que su mejor amigo se presentaba en Bellas Artes finalmente había llegado, por suerte, ya que perdió la cuenta de la cantidad de veces que Alberto la llamó completamente nervioso y con mil dudas en su cabeza, dudas que Ana se encargó de borrarle durante toda la noche anterior. Ella también estaba emocionada, ahora se sabía la lista completa de invitados gracias a que también se la repitió varias veces, le emocionaba ver a Rocío luego de mucho tiempo, Daniela también estaría ahí, aunque sobre todo le emocionaba ver a Verónica, también se encontraba en esa lista de invitados, y si, la había visto hace apenas una semana o poco más, pero no podía evitar que su mente viajara e imaginara que algo como lo de la última vez sucediera.

Cuando llegó al lugar estaba repleto de gente y periodistas, por su cabeza pasó que aquello sería algo histórico, apenas llegó a donde se encontraban los asientos vio que ya estaban la mayoría de invitados personales de Alberto, incluyendo a Verónica quien aún estaba parada platicando con Rocío, realmente se veía increíble en un bonito vestido negro, largo de falta y mangas, ceñido a su figura, simple de terciopelo, pero en ella lucía como lo mejor que había visto.

—Buenas noches, señoritas. — saludó a ambas mujeres apenas llegó junto a ellas.

—¡Ana, que bueno verte! — dijo Rocío a la vez que la recibía con un abrazo y dos besos.

—Igualmente, Rocío. — dijo y le dedicó una sonrisa.

—Te nos pierdes mucho, tanto trabajo. — señaló ahora la actriz.

Ana asintió.

—Por suerte, hay mucho trabajo. — aseguró.

Después de eso Verónica le dio un abrazo, lento e incluso se sintió íntimo.

—Hoy en día es mejor mantenerse ocupada. — aseguró la pelirroja.

—¡Anita! — la voz emocionada de Daniela interrumpió lo que sea que fuese a decir y lo siguiente fue un gran abrazo de su parte. —Te extrañé demasiado.

Ana rio por lo efusiva que estaba la cantante quien continuaba abrazándola.

—Yo también, Dani, yo también. — aseguró antes de que la mujer finalmente se separara de ella.

—Tenemos que irnos a celebrar con Alberto y Chío después del show. — señaló.

—Excelente idea. — apoyó rápidamente la mencionada. —Están las tres invitadas.

—¿Invitadas a dónde? — repentinamente Alberto apareció desde el escenario y se acercó a ellas.

Las personas aún no podían entrar así que el ambiente continuaba tranquilo y privado.

—A festejar con nosotros, cariño. — explicó.

—Tienen que venir. — advirtió antes de alejarse.

Después les pidió a sus invitados que se sentaran y les dio un enorme agradecimiento por estar ahí esa noche, dijo unas palabras más y volvió a retirarse tras bambalinas con aplausos de los de las primeras filas. Poco después las personas comenzaron a entrar y en poco tiempo eso estaba a reventar, el ambiente era de festejo y felicidad total.

Mientras que las cosas con Verónica iban...extrañas, vio como se le borró casi por completo la sonrisa apenas apareció Daniela y podía jurar que la vio rodar los ojos cuando vio que se sentó a su lado, ahora se encontraba sentada en medio de ambas, por un lado tenía a Daniela contándole sus ultimas aventuras y del otro tenía a la mujer de ojos verdes con quien tenía una tensión enorme y quería darle su completa atención, pero tampoco podía ignorar a su amiga a quien no veía hace demasiado tiempo.