Capítulo 25.

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Vanni.

No servía que esté alterado, cuando debía estar tranquilo y meticuloso. Soy mucho más inteligente que la mafia china, en el momento que llegué a ellos voy a matar a su lider, no solo por secuestrar a mi esposa sino también para adueñarme de una de las mafias más legendarias del mundo, como castigo que no deben meterse con un italiano enamorado.
Lo bueno de todo esto es que la sortija de boda tenía un chip de rastreo, desde mi teléfono observaba como se movian sin detenerse en un punto determinado, parecia como si fueran inexpertos en el tema y tuve una pequeña deducción de quien podría estar detrás de esto.

Sheila, la esposa del lider de la mafia china.

Fue mi amante una temporada hasta que su marido se enteró y quiso matarme, solo que esa bala no fue certera, sino que en mi pierna. Después de ahi o mejor dicho luego de conocer a Malak, mi vida cambió porque solo tenía una cosa en la mente, que sea mía.

Ahora iré por ella y si tengo que quemar toda Italia para llegar a donde la tienen, sin dudas lo haré.

— Me altera tu tranquilidad — dice Daniel bufando.

— De que me sirve mandar a nuestros hombres sino tenemos punto fijo de ubicación — acoto mirando las pantallas.

Solo veíamos mover el auto como si no tuviera rumbo especifico y parecía que eran inexpertos en el tema.

— Nos muestra dos mujeres en la parte trasera de la camioneta, un hombre más y dos en la parte del asiento del piloto y copiloto — anuncia Francesco desde el monitor que estaba controlando.

Mis hermano no dudaron en llegar a Sicilia para ser mis aliados más leales para salvar a mi esposa.

Nadie se mete con uno de los nuestros y sale ileso para contarlo.

— Estoy estresado — murmura Brandon.

Se escucha un griterio, parece que suplican por su vida y los cuatro nos giramos para mirar a Pía que viene arrastrando de los pelos a una mujer. La tira a nuestros pies, con una cara de completamente cabreada.

— ¿Qué hiciste? — cuestiona Francesco a Pía.

Mi cuñada tira el cabello de la mujer y podemos observar su rostro. La reconozco, es la compañera de Malak, que buscaba a uno de nosotros para salvarse su vida, Karolina o Karina, no me acuerdo bien como se llama.

— Esta maldita arpia fue la que durmió a Malak para que la rata china esa se la lleve — me cuenta Pía.

Tenso mi mandibula.

— No es cierto, señor ...

— ¿Me llamas mentirosa? — masculla Pía tirando del cabello para que la mire a los ojos.

— No ...

— Mira esto — dice mi cuñada entregando su teléfono.

Miro con atención el video, si se ve a arpia hablando con Sheila, como la china le entrega un sobre y la otra lo guarda en su bata médica. Gruño viendo el segundo video cuando se la ve entregándole un café a Malak que con cierta desconfianza, pero lo toma. Diez minutos después cuando mi esposa se levanta, cae desplomada al piso, la maldita con su pie comprueba que la mierda que le dió hizo efecto y segundos después entra mi ex amante con tres hombres que cargan a mi mujer.

Malditas.

— Sin dudas no tienes idea quienes somos y lo que le hacemos a los traidores — siseo al mirarla con odio.

— Ella es la que quiso chuparme la polla — acota Brandon.

— Más te vale que no te hayas dejado tocar por esta arpía porque voy meterte una polla por el culo — le advierte Pía a mi hermano.

Mafia italiana. (3.5 SAP)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora