Francesco.
Todo iba como lo habíamos pactado, engañar a la araña fue más fácil de lo que pensaba, Daniel también hizo lo suyo. Todos debíamos dar nuestra mejor actuación, mi hermano es el que está fingiendo estar en contra de este supuesto compromiso que tengo con Josefina. Cada quien debía jugar sus cartas, para que ella no dude en ningún momento que estábamos conspirando en su contra.
Es un trabajo fino, donde no podíamos dejar cabos sueltos y sobre todo dejarla pensar mucho. Me estaba comportando con ella como nunca lo había hecho en mis treinta y dos años. Llevarla a cenar, preparar un desayuno y miles de estupideces que ya comenzaban a fastidiarme.Engañar y tener encantada a Josefina es uno de las peores misiones que había tenido.
A esa mujer la odio, no al mismo nivel que a Pía. Mi odio por la madre se mí hija va más por otro nivel.
— ¿Qué demonios haces aquí? — la interceptó al verla entrar por la cocina como si nada.
— ¿Ya despertó? — consulta quitando mi café de mis manos.
— No, anoche le di una ración doble de sedantes, quería violarme a toda costa — reconozco frustrado.
— ¿Ahora no quieres follar? — se burla Pía.
— Siempre decidí con quien follar y esto de querer hacerlo con ella no me gusta para nada. Prefiero meter mi pene en ácido antes de meterlo dentro de la vagina de Josefina — sentencio con seguridad.
— ¿Y en la mía te gustaría meterlo? — inquiere mordiendo su labio de forma seductora.
¡Maldita mujer!
La atraigo a mi, la subo a la mesada y no dudo en juntar mis labios sobre los suyos. Jodida adicción que cada día se vuelve más incontrolable y no veo la hora de que toda esta mierda termine para darle la follada de su vida.
— Te haría de todo, Cairo. Me correría en cada parte de tu cuerpo que al otro día no podrías ni borrar mi olor de tí y en cada movimiento podrás sentirme — declaro bajando mis labios a su cuello donde hago una suave presión para marcarla.
— Muchas palabras y poca acción, Francesco — dice bajando su mano para darme una suave presión a mi pene.
Mi pene estaba duro y con ganas de follarla hasta que ninguno pueda más.
— ¡Fran! — escucho la voz de la araña provocando que gruña cabreado.
¿Cuándo va existir el momento en que nadie nos interrumpa?
Pía deja un suave beso en mis labios y se baja de la mesada para salir por donde había ingresado hace unos segundos. Justo el momento en que Josefina entraba por la cocina con una gran sonrisa en en rostro.
— ¡Que buena noche! — exclama al colgarse de mi cuello y corro mi cara para que no me bese en la boca sino en la mejilla.
Ella no tiene ni la puta idea que en el momento en que le quitaba la ropa ya había caído rendida antes los fármacos para dormir. Ni en mis putos sueños follaria con ella.
— ¿Qué te sucede? — pregunto al verla fruncir su ceño y pone su nariz en mi cuello oliendo.
— Ese perfume — murmura frunciendo su ceño.
— Es mismo perfume que uso siempre — acoto quitándola de encima mío.
— No, ese perfume es el que usaba Pía — comenta pensativa.
— Ideas de tu cabeza, tal vez la extrañas — digo bebiendo mi café.
— Sabes creo que el otro día sentí que la vi — me cuenta haciendo que la observe.
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Mafia italiana. (3.5 SAP)
Acak3.5 Saga Atracciones Peligrosas. Mafia italiana une tres historias completamente diferentes en una sola: * Dangerous * Atrapado a tí * Giovanni Cada Salvatore contará su historia desde su propio punto de vista. ¿Están listos para meternos en los lí...