El sucesor de Bonten

CHAPTER SIX.

Había pasado ya una semana desde que vivía con Mikey.

- Mhmm~

- Mikey~ el mencionado separó sus labios de los míos y volteo a verme.

- Que pasa nena~

- Mikey tenemos que hablar- la puerta fue tocada y detrás se escuchó la voz de Sanzu.

- Mierda acaso no puedo estar a solas con mi esposa! -

- Será mejor que vayas a ver para que te necesitan- hable y él se levantó de la cama no sin antes haberme besado.

- Que pasa Sanzu -

- Hay un tipo en el club de Akihabara que está causando problemas con nuestras chicas- ví como Mikey pateo un mueble y entro al cuarto molesto.

- Está todo bien -

- No, vístete vas a acompañarme- asentí y me puse el vestido que traía puesto, mala elección pues ya era de noche y hacia un poco de frío, pero era lo único que podía ponerse y quitarse bastante rápido. Mikey en cambio solo se puso su camisa y termino  de abrocharse su pantalón. Ambos salimos de la casa y logre ver cómo todos cambiaron sus rostros de enojo a uno de sorpresa.

- Piensas llevártela -

- Sólo entra al auto- nadie dijo nada y todos se metieron al auto, Mikey puso su saco sobre mis hombros y dejo un beso en mi cuello. Al llegar al club todos a excepción de Sanzu y yo se bajaron del coche.

- Espérame aquí- asentí y le di un beso en los labios.

- Lamento haber interrumpido la creación del pequeño Mikey -

- No estábamos haciendo nada -

- Claro y los pantalones desabrochados de Mikey fueron producto de mi imaginación -

- Sanzu te drogas seguido, claro que fueron proyecto de tu imaginación -

- Sí claro, sabes cuándo Mikey abrió la puerta tenía una gran erección -

- Quieres callarte -

- Y si no que -

- Pues- antes de que terminara de hablar, se escuchó como alguien pedía piedad y después la ventana del lado donde estaba sentada fue tocada con brusquedad haciendo que pegara un brinco en mi asiento.

- Abre la cajuela Sanzu- el mencionado asintió y abrió la cajuela del auto, donde metieron a un tipo, poco después todos entraron al coche, el último en entrar fue Mikey quien venía con las mangas de su camisa recogidas y manchas de sangre en ella.

- A la bodega- ordenó Mikey una vez dentro del coche, sin decir nada más Sanzu encendió el auto y emprendió rumbo a una bodega. Al llegar todos se bajaron del auto y sacaron al tipo de la cajuela. - Quédate aquí, no importa si escuchas algún ruido extraño tú quedate aquí, entendiste -

- Sí- le di un pequeño beso y ví como se adentro a aquella bodega. Rindou volteo a verme.

- Tranquila, sólo está haciendo su trabajo- asentí y ví como también él se marchó. Me quedé un rato parada al lado del coche, a pesar de que estaba alejada de la bodega se lograban escuchar los gritos y súplicas de aquella persona. No lo soporte más y me volví a meter al coche, intentaba pensar en otra cosa pero los gritos de aquella persona no me dejaban pensar. Salí del auto y camine hasta la entrada, sólo logré ver a Takeomi y a Kakucho fumando un cigarro.

- ¿Qué haces aquí Narumi? -

- Mikey- abrí la puerta y lo que ví me dejó en shock. No fue la escena, si no la persona. Justo en esa silla estaba sentado mi profesor de literatura, el mismo hombre que abuso de mi ahora estaba sentado frente a mi. 

- Ja, mira a quien tenemos aquí. Me extrañaste Narumi- Mikey volteo a verme esperando una respuesta. - Sabes después de aquella vez me quedé con más ganas de ti -

- Que le hiciste maldito bastardo!- le gritó Mikey lanzándose sobre él.

- La hice mujer- respondió sin descaro alguno y volteo a verme.

- Saquenla de aquí- nadie le hizo caso. - QUE LA SAQUEN PUTA MADRE!- Rindou me tomo de los hombros y me saco del cuarto.

- Se supone que tenían que cuidarla- yo aún seguía en shock pero aún así logré escuchar el disparo. Y después logré ver a Mikey, sin pensarlo dos veces corrí hasta él y lo abrace  comenzando a llorar.

- ¿Qué carajos paso ahí adentro? -

- Tengo miedo- susurré y sentí como sus manos comenzaron a tocar mi cabello.

- Tranquila nada malo te va a pasar otra vez, ahora me tienes a mi -