El sucesor de Bonten

CHAPTER SEVENTY NINE.

1 mes después.

El tiempo que nos había dando Mikey había pasado bastante rápido, en todo ese mes estuve aprendiendo a usar los distintos tipos de armas.

──Nosotros procuraremos alcanzarlos en Japón, como sea su vuelo ya está por salir y este será el hotel en el que se van a hospedar

──En caso de que no vayamos, esperamos que regresen con sus hijos y la tranquilidad que merecen

──Gracias── respondí dándoles un fuerte abrazo y después de despedirnos bajamos nuestras maletas y caminamos directo al aeropuerto.

──Había olvidado decirles algo

──¿Qué sucede?

──Contacte a un agente encubierto que los ayudara

──Simón te pedimos que no lo hicieras

──Se que me lo pidieron, pero no podía dejar que mi amigo se fuera a la guerra con solo su esposa y sin nadie más. Además le va a agradar a Narumi

──No, no quiero llorar más muertes

──Eso no va a pasar── dijo y se puso sus lentes de sol, para después ver cómo abordabamos el avión.

──No estoy de acuerdo en eso

──Tranquila, no lloraremos más muertes── respondió Daniel. Al momento de abordar el avión una sensación extraña me invadió, pero solo la ignore y subí al avión acomodandome junto a Daniel.

──Por fin estaremos juntos de nuevo

──Y ya nada no nadie podrá separarnos

[•••]

En cuanto llegamos a Japón y bajamos del avión fuimos directo a recoger nuestras maletas.

──Busquemos un taxi para que nos lleve a nuestro hotel

──Eso no será necesario── respondió una chica bajando de un auto.

──¿Disculpa te conocemos?

──Es una ofensa que ya me hayas olvidado, Narumi── dijo retirando las gafas de sol.

──¿Saori?

──Esa soy yo── respondió con una sonrisa y me dió un fuerte abrazo. ──Me enteré de lo de tus hijos. Daniel es bueno verte de nuevo

──Hola Sao

──¿Cómo fue que terminaste así?

──Es una larga historia, pero por ahora será mejor que los lleve a su hotel

──¿Y tú?

──Estoy en el mismo hotel que ustedes── después de saludarnos nos subimos a su coche y fuimos rumbo al hotel. Al llegar nos fuimos a nuestras respectivas habitaciones y a la hora de la comida nos reunimos en el comedor del hotel.

──¿Y bien? Cuéntame todo

──Bueno, después de que te fuiste con tus padres Waka se deprimió pero los chicos le ayudaron bastante. Y yo continúe en la pandilla, Baji me pidió ser su novia y acepte. Después de eso dejamos la pandilla y nos unimos a otra para eliminar al enemigo pero todo salió mal y

──Baji falleció

──Si

──Lo siento mucho amiga

──Eso ya no importa, logré salir adelante y ahora soy detective

──¿Atraparas a Mikey?

──No, mi caso ahora es ayudarte a encontrar a tus hijos y atrapar a los miembros de Bonten; de Mikey se encargará el equipo de tu esposo── respondió, a los pocos minutos nos trajeron nuestra comida y comenzamos a comer mientras hablábamos sobre varias cosas.

[•••]

Estaba saliendo de la ducha cuando el teléfono comenzó a sonar, así que me dirigí de inmediato al mueble y contesté la llamada.

──Me he enterado que ya estás aquí
──¿Cómo lo sabes?
──Tengo ojos en todos lados Narumi. Te enviaré la dirección donde nos veremos y la hora
──¿Vas a cambiar la dirección?
──No confío en ti, no después de que hayas dado la dirección de la casa donde se encontraba enterrado tu hijo y tu amiga

Dicho eso colgó la llamada dejándome con la palabra en la boca.

──¿Que paso?

──Manjiro va a cambiar el lugar de encuentro

──Tenemos que avisarles

──Está bien── respondí y espere a que Daniel hiciera la llamada, mientras esperaba termine de vestirme y en eso escuché la puerta siendo tocada. ──¿Quien es?

──Soy Sao

──¿Que haces aquí? Yo creí que ya estabas dormida

──No, aún no. No puedo dormir

──Pásate── le dije y me hice a un lado para que ella entrara al departamento.

──Ya les avisé

──¿Qué sucede?

──Mikey cambio el lugar en donde nos veríamos

──No puede ser

Akane
Ubicación 📍
✓
Nos vemos en ese sitio
a las tres de la tarde y no
quiero sorpresas
✓

En cuanto llego ese mensaje nos volteamos a ver entre todos y Saori se fue a su habitación para preparar sus cosas. Mañana por fin tendría de vuelta a mis hijos y nos iríamos a otro lado para estar más tranquilos.