CHAPTER FIFTY THREE.

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8º mes.

──Esta vez no podré acompañarte ──

──¿Por qué? ──

──Tengo una nueva misión ──

──Pero── antes de que terminara Daniel comenzó a hablar.

──Yo no la pedí, los altos mandos se enteraron de mi regreso y le dijeron a Simón que tenía que darme una misión ──

──Por cuánto tiempo ──

──Indefinido ──

──Ya veo ──

──Te compre esto── extendió la caja de un teléfono frente a mi y yo lo tome. ──Ya tiene todo, también puse los contactos de Alejandro, Simón y el de Akane ──

──Gracias ──

──No hay nada que agradecer ──

──¿Cuando te vas? ──

──Mañana── respondió sereno y yo me acerque para darle un abrazo.

──Creo que te voy a extrañar ──

──Yo también los voy a extrañar ──

Habían pasado ya dos días desde que Daniel se había ido a esa misión.

──¿Y ya sabes el sexo del bebé?
──No aún no, le dije al doctor que no me dijera nada quiero que estés presente y que ambos sientamos esa emoción
──Está bien, no voy a durar más de dos semanas así que prometo que en cuanto termine estaré en casa lo antes posible
──Por favor ten mucho cuidado, no quiero que nada malo te pase
──Tranquila estaré bien, ya debo irme
──Cuídate
──Te amo
──Y yo a ti

Colgué la llamada y me senté en el sofá para continuar con el tejido.

──Muchas gracias por la oportunidad que le estás dando a mi hijo de formar su propia familia ──

──No hay nada que agradecer, lo hago con mucho gusto señora ──

──Dime Ana, o puedes llamarme mamá ──

──Daniel es muy afortunado de tenerla como madre── dicho eso ella me dió un abrazo y continuo explicándome varias cosas. En la noche decidí hacer una videollamada con Daniel.

──Oye me gustaría verte con el uniforme más seguido
──¿Por qué lo dices?
──Te hace ver más guapo y resalta tus músculos── hice una pequeña mueca haciendo que Daniel se preocupara.
──¿Qué pasa? ¿Está todo bien?
──Si tranquilo, es sólo que está más inquieto de lo habitual
──Bueno, por favor dile que espere hasta mi regreso
──Claro yo se lo diré

Nos la pasamos un rato más en la video llamada hasta que por fin termino y también decidí mandarle un vídeo que había grabado su mamá cuando me hicieron el ultrasonido.

[•••]

Hoy al fin regresaba Daniel, así que desde temprano ya estaba despierta y le ayude a su mamá a prepararle su comida favorita ya que quería sorprenderlo.

──Esto le va a encantar ──

──Eso espero ──

──Deberías de subir a arreglarte── asentí y subí hacia nuestra habitación, tome ropa limpia y me di una ducha para después ponerme un vestido largo floreado y decidí ponerme un poco de brillo en los labios e iluminador en mis mejillas y en el lagrimal. Una vez que termine cepille mi cabello y dejé que se secara para que se le formarán los caireles de siempre.

Una vez lista baje a la cocina y unos minutos después se escuchó el timbre de la entrada, el hermano de Daniel corrió a abrir la puerta y dejo ver a Simón, Alejandro y hasta el último estaba Daniel, una vez que lo ví camine los más rápido que pude y le di un fuerte abrazo.

──Si, como siempre nosotros hasta el último ──

──Cállate Alejandro, tú no vas a ser papá ──

──Hola chicos ──

──Hola, ¿Como están? ──

──Bien, sólo que se mueve mucho── respondí dejando que Simón tocará mi vientre.

──Sentiste eso ──

──Si ──

──¿Qué cosa? Yo también quiero sentir── Alejandro empujó a Simón y comenzó a tocar mi vientre pero no sentí nada. ──No siento nada ──

──Por qué no le agradas── le contesto Daniel causando que Alejandro se enojara y ambos comenzaron a pelear. Yo me quite de ahí y camine hacia una silla para sentarme y después llegó Simón.

──No puedo creer que no se comporte a pesar de que ya va a ser papá ──

Yo sólo me rei, después de eso todos salimos al patio y ahí nos quedamos para poder comer y preguntarles cómo les había ido en la misión. Esa tarde nos la pasamos llena de risas y con bastante alegría.

──No sabes lo mucho que te extrañaba ──

──Y yo a ti── Daniel se acercó para darme un beso en los labios y después hizo algo que jamás creí que haría. Se inclinó frente a mi vientre y coloco ambas manos sobre el para después dejar un suave beso y hablarle al bebé.

──Hola peque, sé que aún no naves pero quiero que sepas que eres alguien muy especial para mí y que ya te amo mucho, aún más de lo que amo a tu mamá y sé que también serás un gran hijo y siempre estaré orgulloso de ti ──

El sucesor de Bonten Donde viven las historias. Descúbrelo ahora