CHAPTER ELEVEN.

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- Yo sí tendría un hijo con Mikey- sonreí al escuchar las palabras de Narumi y entre al comedor.

- Buenos días Nara -

- Buenos días Mikey, bueno yo voy a ver si ya despertaron los niños -

- ¿Qué tal te fue en tu reunión? -

- Muy bien- respondí llevando mis manos a su cintura y le di un beso. Poco después trajeron mi desayuno así que me senté a su lado y comenzamos a desayunar. Terminando subimos a nuestra habitación a darnos una ducha, aunque fuimos interrumpidos en las escaleras cuando los hijos de Rindou y Nara pasaron corriendo con sus trajes de baño.

- Lo siento, quieren ir a nadar -

- Espero y no te moleste Mikey -

- Para nada- en ese momento los demás comenzaron a bajar con sus toallas y sus trajes de baño.

- Que bien, por fin tendremos un día de descanso -

- ¿Ustedes van a venir?- pregunto Takeomi a lo que yo asentí.

- Si sólo iremos a cambiarnos- tome la mano de Narumi y subimos hasta la habitación donde nos pusimos nuestros trajes de baño y ella se quitó el anillo.

- ¿Por qué te lo quitas? -

- No lo quiero perder, menos debajo del agua -

- Está bien- respondí dejando un suave beso y tome nuestras toallas junto a su mano y los dos bajamos hasta el patio. Al llegar todos ya estaban dentro de la alberca y Ran, Rindou y Nara le echaban porras al pequeño Hikaru.

- Mi sobrino ya aprendió a nadar -

Nosotros nos metimos al agua y justo en ese momento Yuri se la llevó junto a su mamá. Yo me quedé con los chicos, Takeomi y Kanji estaban fumando y los demás sólo tenían una cerveza en su mano a excepción de Nara, Rindou y Koko.

- Te ves feliz Mikey -

- Lo estoy -

- Sólo esperemos que esto no termine como con Patricia y Nara -

- Ran eso no se va a repetir -

- Eso espero Mikey, por que el hijo que planeas tener con ella va a necesitar de su madre -

Hubo un tiempo en el que comencé a sentirme culpable por la muerte de Patricia, pero un día simplemente comprendí que así iba a ser nuestro mundo de ahora en adelante y también Ran pareció comprenderlo ya que nunca más volvió a mostrar interés en ninguna otra chica, y las que se acercaban a él cuando estábamos en los casinos sólo las ocupaba para tener sexo. Creo que jamás volverá a enamorarse.

Solté un suspiro y ví como Narumi se reía con Hikaru. Dos horas después todos nos salimos de la alberca y Takeomi junto a Kanji y Kokonoi se pusieron a hacer la comida. Narumi estaba sentada a mi lado cargando a Hikaru, quien ya se había dormido. Y Sanzu estaba acostado en el pasto, al verlo así supuse que ya estaba drogado y lo confirme cuando le hablo a Koko.

- Oye Koko -

- Que pasa -

- Sabías que si entierras un billete, te crecerá un árbol de billetes- Narumi contuvo una carcajada y Nara volteo a ver a Sanzu.

- Yo no creo esas estupideces -

- Pues olvidate de ser millonario- respondió levantándose del pasto y saco un billete de su cartera, camino hasta donde estaba el árbol con el columpio de los niños e hizo un hoyo. Kokonoi sólo lo veía expectante a qué enterrará aquel billete y eso sucedió, aunque claramente Sanzu tenía un plan entre manos él no es tan tonto como parece. Volvió a tapar el hoyo con tierra y después se sacudió las manos.

- Ya está lo comida, tengo mucha hambre -

- Aleja tus sucias manos de la carne Sanzu! -

- Huy pues perdón -

Sonreí y puse una mano sobre el muslo de Narumi, ella me sonrió y se acercó más a mi.

- Creo que iré a acostarlo -

- Estás segura, ya casi está la comida -

- El pequeño Haitani es muy especial con lo que come, no le gusta la carne asada -

- Ya veo- respondió y le entrego a su hijo, Rindou lo tomo y lo llevo hasta su habitación.

- No puedo esperar a que ustedes tengan hijos, serían muy bonitos -

- Gracias Nara- cuando la carne estuvo lista nos sentamos y comenzamos a comer, mientras nos reíamos por las cosas que nos contaba Takeomi de cuando aún estaba en los Black Dragons y mi hermano aún seguía con vida.

- Esos momentos fueron muy divertidos -

- Aún recuerdo cuando todos fuimos al parque y Shinichiro perdió de vista a Emma y Narumi -

- Ese día Wakasa casi lo mata por haber perdido a su hermana- respondió Sanzu y yo puse un brazo sobre los hombros de Narumi. Ella me sonrió y me dió un beso.

- ¿Cuando será la boda? -

- Dentro de dos meses- respondí y los demás asintieron.

El sucesor de Bonten Donde viven las historias. Descúbrelo ahora