𝐄𝐅Í𝐌𝐄𝐑𝐎 - 𝐍𝐇 𝐁𝐘 𝐍𝐀𝐓𝐇 🥀

42.

Capítulo 42.

Aria.

Al llegar, inmediatamente busco a Niall. Sé que no puede darme una explicación en modo verbal, pero tiene su móvil y con eso bastaría.
Dejo mis compras en el salón y subo las escaleras, toco a su puerta pero después de un minuto sin una respuesta, decido entrar.
Mierda, él no está aquí. Salgo y voy por mi segundo objetivo, toco la puerta de James y como creí, él sí está, ya que del otro lado me grita que puedo pasar.
Con cuidado abro la puerta y me lo encuentro semi desnudo sobre la cama, utilizando sólo un bóxer que no deja mucho a la imaginación.

—¿Puedes cubrirte por favor? —Pido desviando la vista.

Él se ríe.

—Tranquila, estamos en confianza.

—Maura no diría lo mismo. Está cerca, por favor cúbrete, James.

—Vale, ya que insistes.

Dejo la puerta abierta mientras él se levanta y de reojo lo observo caminar hacia su closet y sacar unas prendas que se pone tan rápido como puede.

—¿Sabes dónde está Niall? Necesito hablar con ambos, es importante.

—Ya puedes mirar, aunque insisto que esto no es necesario. Ya sabes, nos conocemos.

Se ha puesto un short que apenas cubre sus muslos y una camiseta de tirantes que resalta sus bíceps.

—¿Sabes dónde está?

—Él salió unos minutos después que tú te fuiste, creí que estaba contigo.

—No —Frunzo el ceño —No iba a juntarme con él, tampoco lo vi en Van Werven.

—Bueno, entonces no lo sé. Se llevó la camioneta y no ha regresado ¿Que es tan importante que deseas hablar con nosotros dos? —Él alza una ceja —¿Es una proposición indecorosa?

Me río golpeándolo en el brazo, luego nos sentamos en su cama, que está hecha un lío.

—Sabes, es bueno mantener un orden.

—Ese es Niall, no me pidas imposibles —Me sonríe —Y bien, estoy esperando una respuesta.

—No James, no es nada sucio.

—Oh, que lamentable. Tengo buenos recuerdos del pasado.

—Ya basta —Me río —Superalo ¿Sí?

—Un día estará más que superado, pero vayamos al grano ¿Qué ocurre?

—Bueno... —Me observo las manos —Me hubiera gustado hablarlo con ambos, pero como Niall no está lo hablaré solo contigo y después se lo mencionaré a él.

—Bien.

—¿Quién es Michael Brennan?

Su sonrisa juguetona desaparece, captando inmediatamente mi atención.

—¿Qué sabes tú de él?

—Yo pregunté primero.

—Aria —Se queja, llevándose sus manos al cabello.