Solo Soy La Esposa Sustituta

Capítulo 65

-Es un pequeño secreto... vayamos adentro.

-Sí.- siguió a Sasuke, pero al poco tiempo escucharon susurros, Hinata volteó rápidamente.

-¿Pasa algo?- le preguntó Sasuke.

-Creí haber escuchado algo, pero creo que fue mi imaginación... vamos.- entraron a la casa.

-Sí, claro...- Sasuke miró a su alrededor, pero llegó Kushina.

-¡Sasuke! ¿Dónde estabas? ¡Te estaba buscando!- le dijo ella.

-¿Sucedió algo...?

-Ah...- vio a Hinata que igualmente la miró confundida, pero Kushina la ignoró -Sí, necesito que me ayudes con algo, vamos.

Sasuke volteó a ver a Hinata, que asintió con la cabeza. -Está bien, ve...- Sasuke asintió igualmente y caminó hacia Kushina para irse.

Kushina miró a Hinata por un momento y después se fue. Ella miró a su alrededor. -*¿Qué debería hacer ahora? Lo mejor será que vuelva a mi habitación y baje más tarde.*- estaba a punto de irse pero la tomaron de la mano. -*¿Eh?... pero... ¿quién...?*- volteó ligeramente a ver hacia arriba.

Era Naruto, que la miraba en silencio.

-¿Naruto?

-Te... te estaba buscando...

-*¿Me estaba buscando? ¿A mí...?* ¿Por qué?- preguntó en voz baja.

-Hinata, ¿te sientes mal? Te veo un poco desanimada...

-Estoy bien...

-Ya veo... ¿dónde estabas hace un momento?

-Con Sasuke.- respondió rápido.

-Ustedes dos... son muy unidos...- dijo mirándola fijamente.

-Si lo somos...

-*¿Qué sucede con ella...?*- pensó sorprendido.

Hinata se apartó de él, haciendo que el le pregunte que si a dónde va. -A mi habitación, bajaré más tarde.- Hinata se fue mientras Naruto la veía.

Ya en la habitación, abrió un cajón, pensando -*¿Qué debería hacer con esto? ¿Debería dárselo o tirarlo?*- negó con la cabeza -*Sería una pérdida de dinero si lo tiro... ya que es un regalo de cumpleaños debería dárselo... Le diré a Shizune que se lo de por mí.*- se levantó y caminó hacia la puerta.

Cuando la abrió, lo primero que vio fue a Naruto, que estaba a punto de tocar la puerta.

-Naruto... ¿por qué tú...? ¿No deberías de estar con los invitados?

-Tú no parecías estar bien, por eso vine...

-¿Qué te hace pensar eso...?

-Bueno, tu rostro...

-*Ah... no estaba controlando mi expresión...*

-¿Tú acaso estás molesta conmigo...?

-¿Por qué lo estaría?- intentó sonreír.

-Bueno, eso es...- señaló ligeramente su expresión.

-Te equivocas, mi cara siempre está así.- pasó al lado de Naruto.

-¿Qué? Espera... ¿a dónde vas?

-Voy a buscar a Shizune, necesito que haga algo por mí.

-Ah, si es así tal vez yo pueda ayudarte...

-*¿Ayudarme a darte un regalo a ti mismo?*- negó con la cabeza -No, sólo iré a buscar a Shizune.

-Ya veo..

-*¿Qué sucede contigo hoy? ¿Por qué actúas así? Yo debería ser la que está triste, no tú... ¿por qué me haces esto? Solo ignóralo...*- se dio la vuelta para mirar a Naruto.

-¿Acaso ella te dijo algo?

-*¿Ella?*- pensó confundida. Vio la expresión de Naruto, notando que hablaba de Kushina. -*Umm... bueno, además de compararme con Shion no hay nada nuevo...*

-Si ella te dijo algo puedes decirme.

-¿Qué? *No te entiendo, ¿por qué finges que te importa ahora?* No me ha dicho nada, ahora si me disculpas.*- intentó irse, pero Naruto la detuvo.

-Mientes, sé que el día de la fiesta tú y Kushina tuvieron una discusión.

-*¿Qué? ¿Lo sabía? ¿Entonces por qué...?* ¿Entonces por qué tú...?

-Esperaba que tú me lo dijeras...- ella lo miró molesta -Hinata, yo no iba a intervenir en tus asuntos a menos que me lo pidieras.

-No ibas a intervenir al menos que yo te lo pidiera, ¿eso tiene lógica? ¡Sabías todo lo que me pasaba, lo que me decían, y no hiciste nada porque yo no te lo pedía! ¡Sabías el infierno que vivía y no hiciste nada! ¡Yo soy tu esposa...!

-Hinata...- se acercó ligeramente.

-Si fuera Shion la situación sería diferente, ¿verdad?

Naruto quedó paralizado. Hinata se quedó mirándolo fijamente, sin decir nada más.

-¿Por qué de repente...?

-Si lo sabes todo debes saber que siempre me comparan con ella; dime, Naruto, ¿tú también me comparas con ella?

Naruto se quedó sorprendido con esa pregunta, así que no contestó.

-*Lo sabía...*- sacó el collar de su bolsillo y lo tiró al suelo. Era un pequeño cuarzo azul. Naruto miró el collar por unos segundos. -Feliz cumpleaños.- se dio la vuelta y se fue.

Naruto suspiró. -Está bien... ya se le pasará.- levantó el collar del suelo.

En otro lado de la casa estaba Hinata, pensando en la discusión.

-*Si Shion volviera seguramente Naruto... la elegiría a ella sin dudarlo.*

-Señorita Hinata, la estaba buscando...- Shizune se acercó a ella.

-¿Sucedió algo...?

-Ah, bueno, la ceremonia está a punto de empezar.

-Entendido. Vamos...

-Sí, señorita...- ambas fueron al lugar indicado.

Ahí estaba Naruto con sus padres.

-Feliz cumpleaños, mi niño.- abrazaba fuertemente a Naruto.

-Sí, gracias...- él sólo miraba a Hinata, pero ella lo ignoraba.

Minato observaba con atención a las demás personas en la mesa y a su hijo.

-Bien, toda esta comida fue preparada especialmente para que la disfruten.

Hinata miró la comida por unos segundos. -¿Señorita?- preguntó Shizune.

-Ah... yo no tengo hambre... voy a volver a mi habitación, quiero descansar.- se levantó de su silla.

-¡Pero si hace eso...!- Shizune intentó detenerla, pero Hinata interrumpió.

-Está bien, seguramente nadie lo notará, puedes quedarte si quieres.

Shizune no supo que hacer, y Hinata quiso tranquilizarla.

-Está bien... hablaremos mañana.

-Sí, señorita, que descanse...- murmuró con algo de tristeza.

Al día siguiente una de las sirvientas abrió la puerta principal con brusquedad, gritando.

-¡Oigan! ¡Traigo noticias, escuchen!

Los trabajadores dejaron lo que estaban haciendo para escucharla. La noticia dejó a todos en shock.

-¡La señorita Shion ha vuelto!