Capítulo 76

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-O tal vez no fue tan importante para ti...

-No, no es eso... es solo que... *No lo recuerdo.*

-Porque para mí fue muy importante y especial...- tomó la mano de Hinata y la puso sobre su mejilla. -Los momentos más importantes para mí fueron cuando te conocí y cuando te volví a encontrar...

-Sasuke... espera...

-Me gustas, Hinata... me gustas mucho.

-*Esto... no lo esperaba...*

-Hina...- murmuró con un notorio sonrojo.

-*Yo...*- pensó, mirándolo sonrojada igualmente. -*¡No puedo seguir escuchando!* ¡Toma tu medicina!- colocó la pastilla en su boca sin dejar que hablara.

-Ugh...

Hinata se dio la vuelta. -Si necesitas algo más pídeselo a Suigetsu.- se fue rápidamente.

Ya fuera de la habitación Hinata estaba muy nerviosa.

-*¿Qué haré ahora?*

-¿Señorita Hinata...?- Suigetsu se acercó a ella.

-Sasuke ya tomó su medicamento... así que debes vigilarlo.

-Oh, por supuesto, no se preocupe.

-Yo tengo cosas que hacer así que me iré.- caminó rápido hacia la puerta y se fue.

-Uh... ¿qué le sucede?- se preguntó Suigetsu al verla. -Ah, quien sabe...- caminó hacia la habitación. -Y ahora debo cuidar a Sasuke...- abrió la puerta -Ah... ¡Sasuke!- corrió rápidamente hacia él -¡¿Qué sucede contigo?! ¡¿Acaso no sabes qué las pastillas se deben tomar con agua?! -Sasuke se estaba ahogando con la pastilla.

Mientras Hinata se había ido de ahí, llegando a dónde estaba Shizune.

-Señorita, ¿está bien?- le preguntó ella.

-Sí, ¿por qué?

-Bueno, su cara...- señaló ligeramente su rostro, que estaba completamente roja.

-Ah... esto no es nada, solo que corrí cuando venía hacia acá, es por eso... no pienses que es por otra cosa.- habló rápido.

-Claro...

-Estaré en mi habitación...- se fue.

-¿Yo le gusto a Sasuke? ¿Cómo es eso posible...? ¿Qué debo hacer ahora...? No... ¡¿Cómo podré verle la cara mañana?! Espera... tal vez no lo recuerde... así que no debo de preocuparme... pero si lo recuerda... no, debo pensar positivo...- Hinata gritó internamente -¡No puedo!

Al día siguiente Shizune fue por ella como de costumbre, pero notó algo un poco diferente en ella.

-Ah, ¡señorita Hinata!

-Buenos días...- murmuró ella, que tenía unas enormes ojeras.

-¿Por... qué...?

Hinata rió ligeramente. -No es nada...

-Voy a preparar algo para reducir las ojeras, no se preocupe...

-Sí, gracias...

Sonó el timbre. -Espere un momento.- Shizune caminó hacia la puerta y la abrió -Suigetsu, Sasuke, están aquí- sonrió.

-¡Hola...!- saludó Suigetsu.

-Buenos días...- dijo Sasuke.

-Joven Sasuke, ¿se encuentra mejor?- preguntó Shizune.

-Sí, ya estoy mejor, no te preocupes...

-Eso es una gran noticia, ¿no lo cree, señorita Hinat...? ¿Señorita?- miró a su alrededor -¿Dónde...?

Solo Soy La Esposa SustitutaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora