Solo Soy La Esposa Sustituta

Capítulo 68

Ya en la oficina Naruto se acercó al escritorio y vio los papeles. -¿Por... qué? No me digas que...- salió rápidamente de la oficina.

-¿Señor Naruto?- preguntó Kurotsuchi al ver su expresión.

Abrió de golpe la puerta de la habitación de Hinata, gritando su nombre.

-S-Señor Naruto...- Kurotsuchi se acercó a la puerta de la habitación.

-Dijiste que estaba durmiendo...

-Y así era... ella...

-Te di la orden de que la vigilaras.

-Señor... nadie la vio salir, no sé cómo pudo pasar esto...

Naruto se acercó a ella, quien bajó la cabeza rápidamente.

-Ve con los guardias y diles que la busquen, diles que busquen a Hinata y la traigan de regreso.

Kurotsuchi lo miró fijamente por unos segundos.

-Muévete.- exigió Naruto.

-Sí.- tartamudeó y se fue rápidamente.

En otro lado estaba Sasuke con sus acompañantes, enseñándoles la casa a Hinata y a Shizune.

-Es aquí, sé que no es mucho...

-No... es perfecto, gracias...- le contestó Hinata.

-Nadie sabe de este departamento, así que estarán bien.

-Además yo estaré aquí por si necesitan algo.- aclaró Suigetsu.

-Sí... muchas gracias.- murmuró Hinata.

-Señorita... Hinata...- Shizune iba a hablarle, pero Sasuke la tomó del brazo, negando con la cabeza. Shizune miró a Hinata de reojo, pero Sasuke le habló antes.

-Hinata... te mostraré una habitación para que descanses.- ella lo siguió. -Aquí... puedes quedarte...- le dijo al llegar -Si necesitas algo estaremos afuera.- se dio la vuelta y se fue.

Hinata caminó y se sentó en la cama, en completo silencio, pero después se escucharon quejidos, ella estaba llorando.

Un poco lejos de ahí estaba Shizune preocupada.

-¿Estará bien que esté sola en ese estado...?

-Ella necesita desahogarse sola, así que dale tiempo.- contestó Sasuke.

Shizune solo volteó a ver a la puerta por unos segundos.

-¿Y qué haremos ahora...?- preguntó Suigetsu.

-Lo primero es que Hinata se sienta mejor, después pensaremos en qué hacer.

-Ah... bien...

Sasuke se puso su saco y caminó hacia la puerta principal.

-¿Se irá?- le preguntó Shizune.

-Sí, necesito terminar unos trabajos... volveré pronto.

Ella asintió con la cabeza.

Mientras tanto en la casa de Naruto, él seguía preguntando por Hinata.

-¿No la encontraron?

-No, señor... revisamos las zonas más cercanas y preguntamos a las personas de alrededor pero nada.

-*Eso significa que alguien la ayudó... y la única persona que la pudo haber ayudado es...* Revisa todas las residencias de Sasuke.

-Ah... señor, no puedo...

-Haz lo que te digo.

-Entiendo...

-¿Revisar mis residencias? Eso es muy descortés de tu parte.- Sasuke llegó sorprendiéndolos a ambos.

-Vaya, me ahorraste el ir a buscarte, Sasuke.- Naruto habló con sequedad.

-Bueno.- se sentó tranquilamente.

-¿Dónde está?- Naruto fue directo al grano.

-¿Quién...?

-Sasuke... no estoy jugando.

-Yo tampoco.

Ambos se miraron fijamente por un corto tiempo.

-¿Sabes? Escuché que Shion ha vuelto, ¿es verdad?

-Eso no importa ahora...

-¿No? Pero es algo que siempre has querido y al fin se hizo realidad.

-Sasuke...

-¿Qué?- le preguntó desinteresado.

-¿Dónde está Hinata?

-¿Por qué debería saberlo?

-Porque la única persona a la que recurriría es a ti.

-¿De verdad? Umm... no lo sé.

-No juegues con mi paciencia, Sasuke.- se levantó ligeramente.

-¿Y tú, Naruto? ¿A qué estás jugando? Ya tienes a Shion, ¿por qué te importa Hinata ahora?

-Eso no te incumbe.

-Bien, si es así me iré.

-Parece ser que estoy siendo demasiado amable.- se levantó para dirigirse a Sasuke y tomarlo por el cuello de su camisa -¿Dónde está Hinata?

-¿Por qué te lo diría?

Naruto cerró la mano con fuerza.

-¿Por qué te ayudaría cuando esto es una gran oportunidad para mí? Tú ya tuviste suficiente oportunidades y las desperdiciaste en una persona que ni siquiera estaba a tu lado, ahora no vengas a decir que quieres enmendar las cosas cuando ya no está ella.

Naruto lo soltó.

-Haz lo que quieras, revisa mis residencias pero no encontrarás nada.- se fue.

Varias horas después Hinata despertó.

-Ugh... mi cabeza...- se levantó de la cama -¿Qué hora es?- vio el reloj de la pared -11:00 p.m... dormí todo el día...

Se levantó y salió de la habitación.

-Despertaste...- Sasuke la recibió.

-Sasuke... ¿por qué...?

Shizune se les acercó -Señorita, ¿tiene hambre? ¿Quiere comer algo...?

-Ah...- Hinata asintió con la cabeza.

-Entonces ven y siéntate, te serviré en un momento.

-Sí... pero ¿por qué siguen despiertos a esta hora?

-Bueno, no podíamos dormir tranquilos debido a cómo estabas así que...

-Así que decidimos quedarnos despiertos, bueno, Sui fue el único que se durmió...- siguió Shizune.

Hinata miró la habitación y vio a Suigetsu que estaba en un sueño profundo. Sacó una sonrisa ligera. -No tenían que hacerlo...

-Señorita, usted nos importa, por eso lo hicimos.

-Gracias...

Shizune puso el plato con comida en la mesa en donde estaba Hinata. -Oh, es cierto, señorita... su teléfono estuvo soñando mientras dormía.- le entregó su teléfono.

-Gracias.- revisó su teléfono.

Lo primero que vio fue un mensaje del director de su empresa.

Hinata, ¿cómo estás? No he sabido nada de ti desde hace unos días, por ello te mando este mensaje y para recordarte mi propuesta del trabajo en el extranjero, ¿ya lo pensaste?