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Estuvieron el resto del día comprando, fueron a comer y por último fueron a casa. Lena y su madre se despidieron de ellos, iban a casa a descansar.

Kara se compró un portátil de ese mundo, pero se dio cuenta que no podía navegar por internet. Así que sincronizó su reloj al portátil y entró en el ordenador de la Fortaleza, allí tenían conexión vía satélite. Cuando vio que tenía internet decidió investigar un poco sobre lo de buscar trabajo y qué hacer.

Un rato después, de conocer el currículo se lo contó a sus primos y ellos escribieron sus nombres, su dirección, su edad aunque Kara tuvo que mentir, la carrera que habían hecho y si habían trabajado en algo, como eso último no era posible, no lo añadieron.

—Creo que ya lo tenemos. —dijo Clark.

—Aquí dice que hay que poner una foto carnet en la hoja. —vio una plantilla y se lo enseñó a los otros.

—Bueno ya veremos cómo lo hacemos. —dijo Clark.

—Sí. —dijo Kara.

Al día siguiente, Lena apareció por el piso, llamó a la puerta y Kara que estaba más cerca miró a través de ella para saber quién era. Cuando supo que era la amazona sonrió y abrió.

—Buenos días Lena.

—Buenos días Kara. ¿Cómo habéis pasado la noche en la ciudad?

—A penas hemos dormido, demasiado ruido. —se quejó.

—Ya.

— ¿Qué haremos hoy? —preguntó Clark.

—Vamos a compraros un teléfono, no podéis usar siempre el comunicador, entre vosotros sí, pero el mundo no puede conocer esa tecnología.

—Oh vale. —dijo Kara.

Los tres limpiaron los utensilios que habían usado para hacerse el desayuno, cogieron sus cosas y siguieron a Lena.

Durante el trayecto, Clark le fue preguntando cosas a Lena sobre el currículo, ella le dijo que no sabía mucho tampoco, que había conseguido el trabajo por recomendación de un profesor de universidad.

— ¿Y yo entraría por ti? —preguntó Kara.

—Sí.

— ¿Y nosotros qué debemos hacer? —preguntó Clark.

— ¿Habéis buscado información?

—Sí, sabemos cómo hacerlos, pero ¿después que hay que hacer?

—Hacer varias copias impresas y después recorrer la ciudad y echando los currículos, o eso es lo que he oído por la oficina. —explicó Lena.

—Mmm, ¿hay algún periódico en la ciudad? —preguntó Clark.

—No, pero hay una revista, se llama Catco Worldmedia, la dueña es Cat Grant un lince con las entrevistas y la reina de los medios. Tendréis que tener cuidado con ella porque acabara descubriendo que coméis todos los días.

—De acuerdo, ¿Dónde está Catco? —preguntó Clark.

— ¿Aún quieres ir después de lo que te he dicho?

—Tendré más cuidado, pero si, necesito un trabajo y soy periodista.

—Entiendo, si quieres después de comprar los teléfonos, te llevo.

—Oh, bien.

Compraron los teléfonos y después Lena los llevó a Catco.

Compraron los teléfonos y después Lena los llevó a Catco

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Tres Supers en la TierraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora