Fui arrastrada a ir a la escuela, después de lo que pasó quería encerrarme en casa hasta el día de la graduación.
-Ya, Mikasa eso sólo demuestra que Levi se preocupa por ti.
-Pero sigue siendo vergonzoso... Debe pensar que estoy loca.
-No creo... Ah mira ahí esta.
-Me voy, me voy...
-Sólo ve con él y disculpate. Toda la semana estuviste buscándolo, ahora ve y enfrentalo.
-No quiero. Es culpa de ustedes... Disculpense.
-Eliot propuso ese juego.
-Pero a Annie se le ocurrió marcarle a Levi.
-Bertolt propuso la pijamada.
-¿Quién vota que vaya Hitch?
-¿Yo qué?
-Te toca disculparte por todos.
-Bye bye.
-Y se fue...
Abandone el ruido de mis amigos y simplemente camine hacia él. Después de todo la responsabilidad era sólo mía.
Él me miro acercarme, su gesto no me decía nada. Seguía con sus actividades sin prestarme nada de atención.
Uff que hombre tan frío.
Estar en esta situación no es nada nuevo para mí pero a pesar del tiempo, siento la presión en mi cuerpo cuando estoy cerca de él aún si no me demuestra nada.
Tengo tantas cosas por decirte... pero sigo siendo una cobarde que no puede dar el siguiente paso.
Tomando en cuenta todo, mi avance más sobresaliente en esta relación ha sido el baile que tuvimos pero ¿Cuánto tiempo ha pasado ya?
Quisiera bailar con él una vez más, sin hablar, sin torpezas y sin el temor a ser rechazada. Sólo él y yo dentro de la ilusión que yo misma he creado.
-Levi - dije con la voz ronca y me avergonce.
-No es muy cortés llamar en medio de la noche a alguien.
-Lo sé, perdón. No quise molestar.
-Me quedé muy preocupado por ti. Al menos pudiste contestar un mensaje.
Reuní todo mi valor.
-¿Realmente estabas preocupado por mí? ¿Soy importante para ti?
-Sí. No juegues con eso.
Posó su palma sobre mi cabeza dejando un trapo encima que cubrió mis ojos. Y sin más siguió caminando a través de los pasillos, lo seguí.
-Pasame el trapo, debo limpiar esta sala antes de las nueve.
-¿Habrá reunión?
-Sí, es la temporada en que sus maestros se reúnen para organizar el regalo para su graduación.
-¿Eh?
-Sí. No le digas a nadie pero siempre optan por un viaje de excursión dos semanas antes de la graduación.
-Oh genial. ¿Y tú vienes?
-No, me quedó aquí. Sólo viajan los profesores del grado.
-Oh...
-¿Te has preparado para los exámenes finales?
-No realmente, aún quedan dos meses.
-¿Has elegido ya la universidad?
-Sí, iré a la misma que Hitch... tomaremos el examen el siguiente mes.
-Suerte.
-Gracias.
Tiene razón... este año me graduo y después de la ceremonia no veré más a Levi. Se quedará aquí y yo tendré que seguir lejos de él. No estará para verme crecer, para cuidar de mí y tal vez en algún punto fijarse en mí.
La rutina de verlo ocasionalmente se terminará, él va a olvidarme y todo a punta a que jamás podré decirle lo que siento desde que nos conocimos.
En este momento, en que no hay nadie... podría atreverme y probar suerte.
Él limpia el pizarrón, no notará si me acerco y lo sorprendo por la espalda.
Quiero abrazarlo... su ausencia estos días me vuelve loca. He pasado tiempo preocupada por otras cosas que me olvidé de mi lucha eterna.
Si le digo ahora como me siento... ¿Podrían cambiar para bien las cosas?
-Y bien... no has contestado mi pregunta. ¿Por qué llamaste anoche?
-Sólo quería saber como estabas, no te había visto desde el día que nosotros...
-Debes olvidar eso.
