Capítulo 46| 198 Días Antes

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Realmente no supe como deje pasar todo esto, de pronto tenía a todos ellos moviendo los muebles de mi casa para liberar el centro y colocar camas improvisadas.

-Oh genial, no ha pasado ni una semana desde que lave esas cobijas- pensé.

-Ven, Mikasa ya tenemos un espacio para ti.
-¿Cómo es que están tan frescos?
-¿De qué hablas?
-La profesora Hange dejó un resumen de 117 páginas.
-¿Eh?
-Para nada, dijo que de la 89 a 96.
-Y ni siquiera revisa, así que yo le copie a Annie y nada más cambie las primeras palabras de cada párrafo.
-¿Cómo que sólo dejó eso? ¿No era de la 89 a 206?
-No. ¿Quién te dijo eso?
-Yo... yo escuché.
-Ay, Mikasa ya no pienses en eso. Ven, ven... únete a la pijamada.
-Pero yo hice 117 páginas...

Estaba en shock.

-Pobre, dale un masaje en su manita.
-117 páginas...
-Bueno... ¿Y qué más se hace en una pijamada?
-Esa es una excelente pregunta.
-Ajá... ¿Y bien?
-¿Bien qué?
-Bertolt... Tú dijiste que querías la pijamada, nos enviaste un mensaje diciendo que vinieramos.
-117 páginas... Ay.
-Eliot dijo que habría una pijamada en casa de Mikasa cuando estábamos en el club.
-A mí no vean, yo estaba criticando al club.
-Eso significa que nadie sabe.
-Yo jamás he estado en una.
-A mí no me daban permiso.
-Yo sólo vine porque ustedes dijeron.
-117 páginas.
-Bueno... ¿Entonces nos vamos?
-Ya estamos aquí. Hay que animar a Mikasa... parece que su alma abandonó su cuerpo.
-117 páginas...
-Hagamos un juego.
-¿Qué juego?
-Saquen una ouija.
-Mi mamá dice que esas son cosas del diablo.
-No, gracias yo vi un video de eso y las cosas se movían.
-Sigo teniendo una duda... ¿Por qué el club de ocultismo es el club de ocultismo?
-Pura fachada. Así es más selectivo.
-No sé porque no lo pensé.

De repente la gente empezó a jugar "basta". Como yo no estaba en condiciones, detenían la letra cuando recordaba que hice 117 mugrosas páginas en vano.

-Ya dijo 117.
-Letra L.
-Uy... L de Levi.
-Ni con eso responde.
-Pobre, Levi... Ya fue.
-Mikasa... Levi... L de Levi...

(Levi estornudando a unos kilómetros de ahí).

-¡Terminé! - alzó su hoja- basta uno, basta dos, basta tres, basta cuatro...
-Esperen yo apenas voy en el apellido.
-¡Basta!
-Ay que no me presionen.
-117 páginas.
-¡Basta!
-Ya se acabo el tiempo. A ver que pusieron.
-Nombre... Levi.
-Levi igual
-También puse Levi.
-Yo igual, me copiaron.
-25 puntos cada quien.

(Levi siendo atacado por estornudos cada 2 segundos a unos kilómetros de ahí).

El juego de "basta" terminó después de un rato, el ganador fue Eliot, así que el tenía el derecho de elegir la siguiente actividad.

-Veamos... supongo que podríamos hacer llamadas falsas.
-Definitivamente es un matón.
-¿Qué?
-Bueno, llamemos a Levi a ver si eso anima a Mikasa.
-¡Sí!
-Traigan su teléfono.
-¿Con cuál dedo desbloquea?
-No sé, prueba todos.
-¿Cómo consiguió su número?
-Mikasa lleva peleando por ese hombre más tiempo del que uno pensaría.
-Jaja sería la yandere definitiva.
-No, ella no rompe ni un plato.
-Nos consta. En su anterior trabajo le dieron un premio por 200 días sin romper un plato.
-¿Eso es un logro?
-Parece que el dueño a menudo tenía que comprar vajillas por sus otros empleados.
-Ya encontré el número de Levi. Cállense... shh shhh.
-Mikasa te habla tu novio.
-117...
-Está sonando.
-¡Ya contestó!
-Shh shh.
-Ay le colgué, otra vez.
-Ya está sonando, cállense.
-¿Mikasa? ¿Pasa algo?
- 117.
-¿Qué?
-¿Eh?
-¿Estás bien? ¿Por qué me llamas a esta hora?
-Yo... yo... ¿Yo hice qué?

Mire a todos confundida. Los muy graciosos me acaban de meter en un lío.

-Tsk... ¿Qué clase de broma es esta?
-No es broma... Ah es que... ¿Cómo estás?

Dios... ¿Qué digo?

-Uhmm... bien, aunque parece que voy a resfriarme. ¿Y tú?
-Lo siento mucho. Yo estoy bien...
-Que bueno. ¿Necesitas algo más?
-No, yo...

-Dile que lo amas- murmuró Bertolt.
-Sí, dile.

Negué con la cabeza y al final colgué. Estaba tan avergonzada como para sostener la llamada.

-Genial... Si no me bloquea después de esto ya es ganancia.
-Era tu oportunidad, Mikasa.
-Ay no...
-Denle un respiro.
-Comamos algo.

Al final de la comida, todo se decidió por contar historias de terror. No sabía ninguna así que tan sólo me mantuve atenta a todas las que contaban.

Realmente no supe cuando nos quedamos dormidos, al despertar estaba en medio de todos mis amigos dormidos en el suelo de mi habitación.

-Así que esta fue mi primer pijamada...

No pude evitar sonreír, quiero seguir formando recuerdos con mis amigos.

Mire a Eliot y después a Hitch...

Fui egoísta por hacerme ideas negativas en lugar de darles una mano y entenderlos.

-Espero que sean felices, chicos.

Encendí mi teléfono para ver la hora. Era viernes así que debíamos alistarnos para la escuela.

-Que emoción... Iremos todos juntos- pensé.

Me quede perpleja al ver la pantalla de mi teléfono.

-¿Qué es esto?. No puede ser.

Levi había dejado varias llamadas, olvidé despedirme debidamente de él.

-Ay buenos días... fue una noche genial. ¿Eh? Se le salió el alma a Mikasa otra vez.

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