"Love Is a Battlefield" [Historia con Billy Hargrove]

Cap 12 - "La escapada - parte 3"

>>> Tn

Platicamos durante el trayecto a casa, trataba de hacer platica de cualquier cosa para evitar dormir. Billy y yo no habíamos dormido y el cansancio era evidente en ambos.

Llegamos a casa de Billy y efectivamente, no había nadie, así como había dicho. Al bajar del auto, lo hago con rapidez, cuidando de no ser vista por Steve, de lo contrario, estaría en problemas y aún quería disfrutar algunos momentos más en compañía de Billy.

—Si Maxime descubriera que estas aquí, se pondría histérica. No quiere que me acerque a ti— dijo Billy en cuanto entramos a su habitación. Tenía posters de bandas de rock y de algunas chicas en poca ropa, estaba algo desordenado, pero nada comparado con el desorden que había dejado en mi habitación, antes de salir con Billy la mañana del sábado.

—Lo sé, me dijo que tuviera cuidado y Steve también— confieso y me acomodo en la orilla de su cama. —creo que piensan que eres mala influencia para mí — suelto una carcajada

—Creo que si lo soy

—No lo eres anciano— Lo miro desafiante, el parece captar el mensaje, ya que sonríe

—Te lo mostraré, bebé — Billy se acercó a donde estaba, sus labios estaban a escasos centímetros de los míos y en segundos, volvimos a besarnos con desesperación. Había descubierto que retar a Billy, podía lograr que me besará. Me percate de que habíamos caído a la cama, sus manos explotaban mi cuerpo e hice lo propio, sin embargo, aún no estaba lista para entregarle a alguien por primera vez, si era virgen y quería que mi primera vez, fuera especial.

—Eso no demuestra nada, creo que la mala influencia, soy yo—digo con dificultad por la falta de oxígeno.

—El sueño te hace decir tonterías— Billy sonrió, acomodándose en la cama, me toma la mano para jalarme hacia él —Cierra la boca y duerme. Ven aquí.

Moría de sueño, así que no lo pienso dos pensé y acomodo mi cabeza sobre su pecho, abrazándolo por la cintura. Era tan agradable estar así con él, que no quería esto terminará. Sabía que estaba jugando con fuego, pero estaba dispuesta a quemarme.

Me quedó dormida en segundos, sin embargo, entre el sueño, escucho algunas voces que no logro identificar, hasta que Gritan el nombre de Billy una y otra vez, entonces despierto. Billy aún dormía y por mucho que deseaba dejarlo descansar, tuve que despertarlo.

—Billy, despierta, alguien está en casa—susurro cerca de su oído.

—Joder, ya llegaron—se despertó sobresaltado.

—¿Cómo saldré de aquí? — pregunto, poniéndole de pie —¿Qué hacemos?

—Métete en el armario y no salgas, escuchas lo que escuches, no salgas— pude ver el miedo en sus ojos, así que tomé mi bolso y camino hacía el armario. Tras prometerle que no saldría de ahí.

Tocan con desesperación la puerta de Billy y él la abre enseguida.

—¿Qué pasa? —pregunta Billy

—¿Dónde carajos estabas? — su padre le responde con otra pregunta y en su voz, puedo notar que está molesto.

—Con unos amigos—responde Billy

—Tú no tienes amigos, así que no mientas, desde aquí, percibo tu olor a prostituta barata—Grito Neil. Mi perfume no era nada barato, así que tuve que reprimir mis ganas de salir del armario y gritarle que se equivocaba y que no era una prostituta.

—¿Qué?, no dirás nada, piensas quedarte callado— presiona Neil.

—Carajo, te lo acabo de decir—replico Billy, elevando un poco el tono de voz. Enseguida, escucho como algo cae al suelo y un golpe en la puerta del armario.

—No me hables de esa manera, muchacho. Recuerda que soy yo quien paga tus caprichos— Escucho un golpe, seguido de otro, Billy jadea y en ese momento, odie con todas mis fuerzas a Neil Hargrove. Como se atrevía a hacerle eso a Billy. Nuevamente estuve tentada a salir, pero comprendí que, si lo hacía, metería en problemas a Billy.

—La próxima vez que intentes hacerte el valiente, piénsalo dos veces —Grito Neil —¿entendiste muchacho?

—Si, padre—respondió Billy. Neil no merecía que Billy le llamara padre, él era un monstruo. Tenía demasiado impotencia que no me percató que tenía las manos empuñadas.

—Bien dicho, ahora vete a ducharte que apestas a zorra— se escucha otro golpe en la puerta del armario, estaba segura que Neil había empujado a Billy, pero dentro de ese armario era imposible saber que había pasado.

>>> Billy

Odiaba a Neil, lo odiaba con cada fibra de mi ser. Desde la muerte de mi madre y al no tener la mayoría de Edad, tuve que regresar a vivir con mi padre y desde entonces, he vivido un infierno. Ya estaba acostumbrado a sus abusos, pero esta vez, era diferente, Tn lo había presenciado.

Neil abandono mi cuarto, junto con Susan, quien había presenciado todo, no sabía cómo es que ella lo toleraba. Era un cerdo. Tn salió del armario, no podía siquiera mirarla a la cara, no quería su lástima.

—Billy, ¿Estás bien? — Susurro, su voz sonaba preocupada.

<<No, no lo estoy>> pienso, pero lo único que sale de mi boca.

—Debes irte, ahora—es lo único que puedo decir, evado su mirada y doy un paso hacia atrás, evitando que ella se acerque.

—No, no voy a dejarte solo— replicó, me atrevo a mirarla y sus ojos están rojos, como si tratará de contener las lágrimas. —Habla conmigo, no es... —la interrumpo

—No necesito de tu lastima. Vete— le respondo con brusquedad, me estaba portando como un Imbécil, pero estaba enojado y lo único que quería es que ella me mirara de esa manera.

—No es lásti...— Vuelvo a interrumpirla, me acerco a ella, tomándola del brazo y la llevó hacía la ventana.

—¿Estás sorda?, te he dicho que te vayas, joder— no sé qué vio en mi mirada, que la hizo retroceder.

—Bien, adiós Billy— Dijo y en segundos ya estaba saliendo por la ventana.

—Joder— golpeo la puerta del armario con los puños, logrando lastimarme, pero eso no me importaba en lo absoluto. El rostro lloroso de Tn, era lo único que aparecía en mi mente.