The boy next door - SeungBin

SEIS

Llegaron poco después a casa de Hyunjin, Changbin se quedó atrás para admirar la casa de su posible cuñado, impresionado, aquello era un gran edificio con un enorme y bonito jardín con fuente incluida.

– Definitivamente voy a ser el tío pesado que no sale de casa de su hermano... – Susurró para sí, sin saber que Seungmin le había escuchado y había rodado los ojos.

Por suerte o desgracia del fotógrafo, Hyunjin y Minho también sabían de eso, sobre todo el alto, quién siempre quería fotografiar a todo el mundo.

– Voy a empezar con Hwang y me importa una mierda si alguien no está de acuerdo – Minho y Jeongin rieron, ellos estaban más acostumbrados al chico, y pudieron notar que simplemente estaba feliz de poder compartir opiniones algo más profesionales con alguien. Además Hyunjin hacía baile de manera profesional, tenía un buen control de su cuerpo, y eso le hacía las cosas mucho mas fáciles a la hora de decirle lo que quería que hiciera.

"No como el burro de Changbin" pensó él al levantar su cámara, buscando el encuadre perfecto.

Mientras le hacía fotos a Hyunjin, sintió que lo que sería una absoluta tortura, le estaba gustando mucho, nunca había hecho algo así como una sesión fotográfica, solo algunas cuantas fotos aleatorias y solo a su mejor amigo, pero Hyunjin proponía ideas, y le ayudaba a que aquello fuera dinámico y divertido por que sabía lo que hacía.

– ¡Yo también quiero Minnie! – Gritó emocionado si mejor amigo cuando creyó que las fotos del rubio eran más que suficientes, él no rechistó, Jeongin no sabía tanto como Hyunjin, pero hacía bromas y poses extrañas que había visto en las revistas de moda del dueño de la casa.

En un momento, probaron a hacer todos unas fotos con la cara llena de pegatinas "Como las pecas de Lix" había dicho Jeongin cuando propuso su idea, y gracias a Minho, Seungmin se unió también a modelar.

Pero le entró el pánico cuando le dijeron que le tocaba a Changbin, los recuerdos eran muy pesados en su mente, necesitaba un poco más de tiempo para mentalizarse, por que ni en broma haría el ridículo echándose atrás a esas alturas.

– Estoy cansado, voy a salir a tomar el aire un poco, se me van a caer los brazos como haga una foto más – Minho y Jeongin notaron una leve expresión extraña en Seungmin, quizás por que lo conocían demasiado bien, supieron rápido que algo no andaba bien, y cuando Jeongin iba a salir tras su mejor amigo, Minho lo paró

– Quizás esta es la oportunidad perfecta para que Changbin le demuestre que puede confiar en él, deja que vaya tu hermano – Minho vio como los ojos de su vecinito se iluminaban, y lo tomó como una afirmación silenciosa de que estaba de acuerdo con esa idea – ¡Hey Bin! ¿Por que no vas a acompañar a Seung, y a animarlo un poco? – Dijo él acercándose al chico

– ¿Yo? No es por ser malo, pero creo que soy la razón por la que necesita aire, por que no me soporta –

– Ya te lo he dicho antes, así se defiende, ahora, ve y se amable con mi hermanito, demuéstrale que puede confiar en ti – Changbin suspiró, su hermano lo miraba suplicándole con la mirada que lo hiciera, y fue, salió de la sala de baile de Hyunjin y subió las escaleras hasta la puerta principal, suponía que si Seungmin necesitaba paz mental, habría ido allí. Lo vio sentado bajo un árbol de tronco grueso, de espaldas a él, por lo que no sabía que era él quien se acercaba.

– Minho, estoy bien – El chico se sorprendió por lo rota que sonaba la voz del chico duro que lo había estado tratando como una mancha de tomate en su camiseta favorita.

– No pareces bien...–- Seungmin se sobresaltó al escuchar la voz de la última persona que quería ver, Changbin vio como sus músculos se tensaron, y estuvo a punto de disculparse y salir de allí, pero, guiado por el consejo del hermano mayor del chico, se sentó a su lado en silencio, dejando su bufanda sobre el regazo de Seungmin, diciembre estaba comenzando y ese estaba siendo un año especialmente frío, solo para hacerle compañía, dejando que sus hombros rozaran sutilmente, intentando ganarse su confianza. – No quería asustarte, solo quería ver que estuvieras bien y no murieras de frío. –

– Pues estoy bien, ya puedes irte –

– Min... – La voz de Changbin sonó tan suave y dulce que incluso él mismo se sorprendió, de verdad se estaba esforzando por él.

– Estaré bien, solo necesito unos minutos para recomponerme – Changbin, sin decir nada, empujó un poco la cabeza del chico para apoyarla en su hombro, un poco sorprendido por no encontrar resistencia, supuso que Minho tenía razón, tratarlo bien daba sus frutos.

– No tienes que hacerte el duro ¿Sabes? No te voy a juzgar por tener un momento de debilidad, todo el mundo los tiene –

– ¿Por qué me tratas bien? –

– Primero, no sé qué idea tienes de mi, pero no soy así, y segundo, uno de mis mejores amigos estudió psicología y el otro tiene ansiedad, uno aprende a no juzgar a otros por las cosas malas que hay en su cabeza – Sin quererlo, una risita se le escapó a Seungmin ante el tono divertido del otro, sin separarse de su hombro, en realidad, era bastante cómodo, no era como el hombro huesudo de su mejor amigo.

De alguna manera Seungmin se sintió un poco mal por tratar tan mal a Changbin desde el primer momento que lo vio, no parecía tan mala persona como había creído, no era ese chico despreciable que había visto el año pasado, no parecía lo que le habían dicho, quizás había cambiado, quizás nunca fue mala persona, aunque seguía cayéndole mal, había abandonado la categoría de "Odiado" dentro de su cabeza, y agradeció para sí mismo que Changbin hubiera decidido seguirlo hasta el jardín de Hyunjin.

– Min, cuando estés listo para volver ahí dentro, me avisas, pero no hay prisa, tómate tu tiempo – Y como cereza del pastel, era de esas personas que respetaban los tiempos de los demás, no lo estaba obligando a volver, ni menospreciándolo por el tiempo que necesitase, aquello acababa de darle bastantes puntos dentro de la consciencia de Seungmin.

– Dame cinco minutos hyung –

– Me has llamado hyung, voy a llorar de felicidad, nunca me habías llamado hyung, voy a enmarcar este día en el frigorífico –

– No seas idiota –