CUARENTAYDOS

131 18 66
                                    

N.A: Vuelvo por qué es mi cumpleaños y publicar me da la dopamina que pierdo estudiando, pero comienzo los finales y estaré desaparecida de nuevo.

Manifiesto los seis aprobados que necesito 🕯️🕯️🕯️

- ¡Acabamos de volver y ya tengo ganas de dejar la carrera! - Gritó Jeongin mientras Changbin le abrochaba el casco, por lo visto los miércoles y los viernes comenzarían las clases a la misma hora y podían ahorrar en viajes si viajaban juntos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

- ¡Acabamos de volver y ya tengo ganas de dejar la carrera! - Gritó Jeongin mientras Changbin le abrochaba el casco, por lo visto los miércoles y los viernes comenzarían las clases a la misma hora y podían ahorrar en viajes si viajaban juntos.

- Te juntas demasiado con Hyunjin, se te está pegando lo dramático Innie. - Dijo él dejando la conversación en el aire y a su hermano menor con expresión ofendida de pie a un lado de su moto.

- Te voy a perdonar esa ofensa solo por qué me llevas a la universidad, pero la próxima te las verás conmigo hyung - Refunfuñó Jeongin, ahora con el pelo teñido de blanco, según sus propias palabras el cambio de curso merecía un cambio de aspecto también.

Changbin terminó por negar en silencio con la cabeza y arrancar en dirección a su universidad, el día iba a ser duro, y no quería empezar con el pie izquierdo. Primero dejaría a su hermano en su facultad, y luego iría hasta el edificio de artes, donde atendería a dos clases, después de esas cuatro horas (De asignaturas que en realidad si le interesaban, lo cual le haría la vida mucho más fácil), comería rápidamente en el tiempo que le quedaba libre y volvería a arrancar su moto, esta vez él solo, en dirección al edificio de JYP, donde ese día comenzaría el mes de prácticas que lo separaba del veredicto final: Si servía o no para ser compositor en una gran empresa de entretenimiento.

Las clases pasaron rápido, Yeonjun había comenzado a trabajar oficialmente como bailarín en Hybe, y con un poco de suerte, en un mes sería de la competencia (Aún que se sentía muy orgulloso por su amigo por todo lo que había conseguido).

La comida sabía a cartón y el microondas de la cafetería había decidido que era un buen día para no calentar lo suficiente la comida, y a parte de acartonada, la lasaña precocinada, también estaba fría. Tuvo que engullirla ignorándolo, por que no le quedaba tiempo para comprar algo en la cafetería, o para buscar otro microondas que si funcionara, tenía que salir hacia la empresa, y se negaba a llegar tarde el primer día.

En la puerta de su nueva empresa, Jisung lo esperaba junto a Minho, los únicos de sus amigos que habían pasado la dichosa prueba, junto a una compañera de Jisung que solo conocía de vista.

- ¿Soy solo yo o también estáis muertos de miedo? - Se atrevió a comentar Jisung cuando los cuatro de la universidad de Seúl cruzaron la puerta de entrada.

- No, yo también, este sitio es... Enorme... y lujoso - Murmuró Changbin en respuesta, mirando hacia arriba, con la boca abierta ¿De verdad iba a trabajar en aquel lugar? En su vida pasada debió haber sido una persona maravillosa para merecer solo esa oportunidad.

- ¿Son ustedes los candidatos de música de la Universidad de Seúl? - Una chica jóven, poco más mayor que ellos, interrumpió su conversación sobre lo increíble que era aquel sitio por dentro, fue Minho quien tomó la iniciativa y asintió por todos.

The boy next door - SeungBin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora