CINCUENTA

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Changbin juraría que no iba a llegar caminando hasta su edificio, se tropezaba con sus propios pies

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Changbin juraría que no iba a llegar caminando hasta su edificio, se tropezaba con sus propios pies.

Si duda alguna, ya no estaba tan en forma como antes, haber cambiado el gimnasio por trabajo, le había pasado factura, y ahora lo notaba, ya ni siquiera podía aguantar una pequeña pelea, lo bueno era que seguía lo suficiente bien como para haber dejado peor a los otros dos tipos, y le tranquilizaba saber que había hecho lo correcto y que no le habían hecho nada a Lía.

Había ido a beber con unos sunbaes de JYP, Jeongyeon y Yugyeom, ambos desaparecieron después de hablar con un par de chicas que iban en grupo, y que dejaron a Lía abandonada también. Le dio pena verla sola, así que se acercó, Changbin quiso dejarle claro que no tenía intención de coquetear con ella, y la vio agradecida por ello. Lía le invitó a una bebida y hablaron un largo rato, sobre la chica que le gustaba a ella y sobre Seungmin.

Sobre las dos y pico de la madrugada, aprovechando que él había ido al baño, un par de tipos se acercaron a Lía, tratando de forzarla a bailar con ellos. Changbin volvió cuando su nueva amiga trataba de forcejear sin mucho éxito, y no le quedó otra que meterse en una pelea cuando trató de alejarla de ellos.

Acabó con muchos golpes, el cuerpo adolorido, pero con la sensación de haberle ahorrado un mal rato a la chica.

En uno de sus traspiés, Changbin cayó al suelo, tapándose con los brazos para no romperse los dientes. Le dolía todo el cuerpo, eran las tres de la madrugada y no lograría llegar a casa.

Abrió el último chat, sin mirar el número, muy mareado como para enfocar la vista y mandó un audio, rezando por qué la última persona con la que hubiera hablado fuera Chan, a quien le había avisado que iría de fiesta poco antes de la medianoche.

Logró mandar su ubicación, veía borroso, no sabía si por el alcohol o los golpes. De repente el suelo se le hacía muy cómodo, blandito como un colchón y apoyó la cabeza sobre los brazos.

Después de un rato, no sabía decir si minutos u horas, sintió como alguien zarandeaba su cuerpo, despertándolo, pestañeó, tratando de enfocar la mirada, haciendo que la neblina se deshiciera, apareciendo su vecino ante él.

— Si es un sueño que no me despierten — Murmuró Changbin aturdido, pensando que aquello solo podía ser una visión, él había avisado a Chris.

— Qué sueño ni que leches ¡Changbin no te duermas! — Gritó Seungmin en respuesta, tratando de levantar el cuerpo de Changbin, quien no estaba ayudando en nada — Gnomo estúpido, no te voy a arrastrar así hasta tu casa ¡Despiértate!

— ¿Seungmin? — Changbin trató de ponerse de pie al darse cuenta de que no era ninguna alucinación por el alcohol, él realmente estaba allí tratando de levantarlo.

Seungmin iba en pijama y llevaba una chaqueta de plumas por encima. Recordó entonces que había olvidado su chaqueta en el bar y que estaban en pleno diciembre, y aunque no notase el frío, podría haber muerto de hipotermia.

The boy next door - SeungBin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora