El Rey y su Medicina

Capitulo 42

Adriano de fabbri

Loco.

Así me dejo la doctora.

El vestido le queda como locos . Se adapta a ella a la perfección, dejando que  todos puedan notar su perfectas   curvas , su piel se ve suave y blanca.

Hay doctora me estas volviendo loco cada vez, que haré contigo.

Detallo su cuerpo con el vestido puesto, bajo su sonrisa, aún esta intentado regular su respiración, el beso fue uno de los mejores me di en mi vida, soy adicto q sus labios de ahora en adelante.

- Bueno reycito nos tenemos que ir, se nos hará tarde- deja un pequeño beso en mis labios. Pasa a mi lado , moviendo sus curvas de un lado a otro, su vestidos es largo haciendo que esté se arrastre por el suelo. Me quedo como un tonto viendo su caminar.

Los guardias le sostienen en vestido para que no se ensucie, yo solo me le quedo viendo su hermosa figura desde este angulo.

-Que ves reycito- sonrío por su tono de voz. Me pongo a su lado , extiendo mi brazo y ella lo acepta con gusto.

-No puedo mirarte cariño?- abro su puerta.

-Bueno, al fin es lo que se hace con las obras de arte, solo se miran pero no se tocan.- entra al coche.

-Ya veremos eso señorita De Santis- cierra su puerta y me subo al lado del conductor,llegaremos un poco tarde a la fiesta, pero nada me importa, sabiendo que cada minuto que paso con ella , es como un minuto en el propio paraíso.

La carretera nos deja paso,cada vez mas cerca de nuestro destino , donde todo empezará, donde ellos deberán de tratarle como lo dice la orden.

Como la dama de la mafia italiana.

Nadie saldrá vivo de allí si no cumplen las normas.

Llegamos a nuestra destinación , las luces son brillosas dejando ver la gran calidad del lugar, hay personas fueras, unos fuman, otras beben y otras se comen la boca.

Nos abren la puerta, nuestra gente se empieza a poner en posición ,a lo lejos ve a Max dando ordenes, le pedí que por un vez en su puta vida, descansará y se lo pasará bien aquí, estaríamos todos reunidos .

Mis padres son los primeros en acercarse, Dante y Claudia, están al tanto de la seguridad de su hijo , quien le cuenta cosas de niños a su madre. Todo esta en orden , tomo su mano y nos dirigimos a dentro del gran lugra.

Será una reunion de mafias, nada grave, solo darán una novedad sobre familias quien necesitan mi abrobacio y la presencia de la mafia Italiana.

Los tres cabrones no quisieron venir, quisieron quedarse buscano mas a fondo las informaciones sobre los alemanes, el mismo tema que saca mis tras demonios.

No quiro que ella se involucre en esto, nada de lo que pasará con ellos le debe de dañar, ella no sufrirá, y seré yo quien me encargue personalmente de eso.

Nos abren la puerta, llamando la atención de todo el mundo, los mismos quienes se ponen de pie por respeto, el principal se acerca y nos saluda mostrando su reseto, cundo menos lo veo venir, hacen lo mismo con la doctora, quien parece sorprendida por sus acciones.

Me giro a verla, esta seria, pero mi cara refleja una sonrisa al ver su sorpresa. Aun no entiendo el porque le molesta tanto que muestren su respeto a ella, tiene que acostumbrarse porque lo seguirán haciendo hasta el final de nuestros tiempo.

-Buenas tardes mis señores, si me lo permiten los llevaré a su lugar- lo seguimos después de un asintiendo de cabeza.

No me fijo mucho en la gente a nuestro alrededor, esta controlada por mi gente, así que nada me preocupa.