Capítulo 37

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— ¡Suéltame!—logra gritar en medio del beso, pero Enid no se aparta sus labios van a su cuello y sigue mordisqueando, la morena puede sentir sus colmillos como rozan por la zona, aunque le gustaría no tiene la suficiente fuerza para detener a un lobo, pero su amigo si— ¡Tyler!—grita en dirección al closet mientras unas lagrimas amenazan con salir pero su orgullo no se lo permite.

Al notar como la morena grita y forcejea en sus brazos, coge con 

— ¡Esta cerrado!—escucha gritar al chico, quien lucha por derribar la puerta pero le es en vano, sin embargo recuerda que momentos antes la morena había entrado por una puerta y salido por otra, así que busca en seguida la otra salida, prácticamente tira todo a su alrededor hasta que descubre el pasaje entre el medio de las camisetas de la chica, la logra abrir viendo la escena, sus pies se detienen un momento, pero al conectar la mirada con su amiga quien lo mira con suplica corre hasta la licántropa, empujándola tan fuerte que la rubia choca contra una de las paredes de la habitación— ¿Estas bien?—pregunta a la morena preocupado, quien solo lo abraza y empieza a llorar, odiaba ver a Merlina así.

— Haz que se vaya.—susurra la morena en su cuello aun llorando.

— Ya escuchaste.—dice el chico en un tono duro mientras escucha sollozar a ambas chicas, pero a Enid ya no le cree, ¿Qué hubiera pasado si él no estaba en el closet? o que simplemente nunca hubiera podido abrir ¿La hubiera violado? vuelve la mirada a la rubia con tanto coraje que no puede controlarse— ¡Te he dicho que te largues!—grita el chico apretando mas a la morena sobre sus brazos.

— Yo...—Enid no entiende porqué había actuado así, de nuevo esa sensación de mareo que la invadía— Mer...

— ¿Qué es lo que pasa contigo?—pregunta la morena separándose un poco del pecho de Tyler, Enid al verla llorar se quiere abofetear pero no puede, trata de acercarse pero el chico le hace una señal para que detenga sus pasos.

— No lo sé.—dice sincera volviendo a llorar.

— Vete.—es lo último que dice la morena para alejarse completamente del chico y caminar hasta el baño— Por favor, haz que se vaya.—le dice a Tyler quien solo asiente y mira de regreso a la rubia.

— Te juro que yo no quería, Tyler, te lo juro.—dice la chica llorando desesperadamente— Yo jamás le haría daño...

— Estabas apunto de violarla, Enid.—interrumpe el chico mirando con confusión a la rubia— ¿Si yo no hubiera estado aquí?

— Yo, sentí el mareo, otra vez...

— ¿Y no has intentado averiguar a que se debe?—pregunta con molestia— Quizás es un problema de tu especie, quizás una enfermedad como la ninfomanía, pero no te has molestado en averiguarlo, ¿verdad? y aun así vienes aquí y pones en peligro a Mer.

— No le digas así.—espeta la rubia al darse cuenta el apodo que ha usado el chico en su novia, o bueno ex novia— No pensaba que me podía suceder algo así.—susurra mirando al baño donde se ha marchado la morena.

— Bueno, cuando averigües tu asunto, si es que Mer quiere te le vuelves a acercar.—dice tomando del brazo a la rubia para llevarla hasta la puerta— Ahora vete de aquí.

— No me voy a ir.—dice segura— Lo que tú quieres es acostarte con ella, eso es lo que quieres.

— Enid, es mi amiga.—dice el chico incrédulo por las palabras de la rubia— Ya no la veo de esa manera, tome mi distancia y luego la química que siempre tuvimos funciono como amistad, quizás deberías hacer lo mismo.

— Yo no quiero ser su amiga.

— Ahora ni siquiera eres eso.—el chico quería golpear a la rubia por si quiera pensar en lo que le pudo hacer a Merlina— Vete.

— Que no me voy a ir.—dice cruzándose de brazos frente a la puerta sin parar de ver la entrada al baño.

— Entonces, llamaré al Sr. Addams, creo que le alegrará que estés aquí.—dice el chico, seguro que eso hará que la rubia se marche, pero al parecer no es así, Enid parece mas segura que nunca al no querer irse— Lo digo en serio.

—  Ya te dije que no me iré.—Tyler no puede creer lo terca que es la loba— Lo que tu quieres es que yo me vaya para poder coger con ella.

— ¿Estas consiente en como estas hablando?—pregunta el chico confundido, nunca había visto a Enid comportarse de esa manera, ni hablar de esa manera.

— Pero, ¿sabes que?—la rubia ni siquiera podía medir sus palabras, éstas salían sin antes formularlas en su mente y sin permiso, pero ahora no sentía vergüenza, solo rabia al ver al chico en pijama en el cuarto de la que hace unas semanas aun era su novia— Yo me la follé primero.—espeta acercándose al chico— Yo fui su primera vez, y por mas que quieras no podrás cambiar eso.—dice prácticamente gritando.

Merlina esta recargada sobre la pared, escuchando todo lo que dice Enid y cada vez entendía menos, ¿Qué es lo que le había pasado a la chica? Por ratos estaba bien, era la chica de siempre, tierna y sensible pero luego cambiaba a una que era capaz de ponerle el cuerno y de alardear temas sexuales.

La morena siente como las lagrimas vuelven a resbalar por sus mejillas, ya no ésta escuchando, solo a su mente vienen recuerdos que ahora le resultan dolorosos de ellas dos juntas, ¿Por qué habían cambiado tantas las cosas? ¿Qué pasó? son preguntas que no tienen respuesta en la cabeza de la pelinegra, tapa con la mano su boca para evitar gritar del coraje y tristeza que sentía. 

Se seca rápidamente la cara mientras escucha a Enid, y se arma de valor para salir y las palabras salen de su boca sin poder detenerlas.

— Pero si cambió en que con él las cosas me gustaron.—dice tajante mirando a la rubia— Cambió en que con él disfrute tener sexo, lo haría mil veces mas, de hecho llevamos todas estas semanas en una fiesta de hormonas sin ti...—declara la morena, ignorando la cara de su amigo completamente confundido.

— Estas mintiendo.—dice segura Enid, la rubia mira al chico quien trata de mantener la cara lo mas neutral que pueda— Estas mintiendo, jamás te acostarías con él.—dice.

— ¿De verdad creíste que después de verte follar me quedaría tranquila?—la morena se acerca hasta donde esta la rubia con su amigo— ¿Qué te lloraría un año y te escribiría cartas que nunca mandaría?—se ríe con rabia.

— No.—dice la rubia bajando la mirada— Pensé que me querías lo suficiente.—Merlina la mira con una sonrisa en su rostro, no era para nada como se sentía, pero no podía permitirse que la viera mal otra vez.

— Pensaste mal.—dice la morena— Ahora lárgate de mi casa por donde viniste, y no vuelvas nunca mas.—dice en un tono tranquilo pero demandante.

La rubia se queda un momento en el mismo lugar, hasta que con lagrimas en los ojos corre hasta la puerta del closet para salir por un túnel que daba a las afueras de la mansión.

Mientras tanto a unos kilómetros estaban dos chicos, sentados sobre el césped recién podado y riendo mientras escuchaban en el celular, la conversación de las ex novias y el hyde,  por medio de una aplicación que Xavier se había encargado de instalarle antes de que le regalará el celular.

Ajax a su costado toma algo de café mientras sigue riendo, hace ademán de reír y vuelve a concentrarse en la charla atreves del teléfono y mira a su amigo.

— No puedo creer que hayas desarrollado tan bien tus habilidades para poder hacer algo así.—comenta Ajax impresionado de que Xavier pueda controlar de tal manera a la loba, y mas a tal distancia.

— Te dije que Merlina se iba a arrepentir de rechazarme.—dice el chico aun riendo— Así como Enid de humillarte frente a todos.

Ambos se quedan un rato mas en el césped, pero ya no escuchan mas, lo importante ya estaba hecho, del hyde se encargarían después.

Hola, nuevo cap, gracias por leer.

Este cap tiene algunas respuestas para aquellos que las están buscando, espero les guste.

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Luna - wenclairDonde viven las historias. Descúbrelo ahora