Especial navideño

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— ¡Merlina!—una Enid furiosa caminaba de lado a lado por la casa envuelta en guirnaldas de diferentes colores, su rostro se enrojece cuando ve como la morena esta sentada en uno de los pisos de la habitación ayudando a su hijo menor a re decorar la casa— ¡Entonces tú lo estas ayudando con esto!—tanto Merlina como el niño se detienen y miran aterrados a la rubia.

Habían pasado diez años desde que la familia Addams y la Sinclair eran una sola, aunque llevaban desde mucho antes llevando una vida de convivencia ya casadas era un asunto totalmente diferentes, y eso Merlina lo pudo notar la primera noche en la que Enid menciono el tener cachorros, la morena casi se atragantó con el trago de ginebra que se había servido, la rubia desvío el tema hacia uno mas suave tratando de tranquilizar a la morena, pero luego de dos semanas lo volvió a mencionar, teniendo la misma reacción de parte de Merlina.

— ¡Enid, es totalmente loco!—grita Merlina exasperada y molesta por la insistencia de la rubia— No voy a pedirle a mi abuela algo así.

— ¿Entonces nunca tendremos una manada?—pregunta Enid con tristeza en su voz— ¿Criaremos a los cachorros abandonados de alguien mas?—Merlina reprocho con la mirada a Enid por su comentario y esta bajo la mirada— ¡Quiero que sean nuestros!

— Pues no podemos, no tengo un pene con el que embarazarte.—las palabras de la morena eran totalmente firmes— La alternativa de adoptar esta en tus manos, ahora déjame dormir.—la morena se dio la vuelta en la cama dejando a una Enid totalmente molesta y rabiosa.

Sin embargo el asunto no quedó ahí, Enid se quedo durante mucho tiempo pensando en que hacer, por ratos miraba a Merlina aun enojada con ella pero casi se le olvidaba su enojo cuando la morena depositaba un dulce beso en su frente antes de salir a trabajar, buscaba una oportunidad, una debilidad, ella se las conocía todas, pero debe haber una que aun no conoce muy bien, de repente se vio envuelta en la casa de sus suegros, en una fiesta familiar de los Addams, Enid miraba con recelo a la abuela de Merlina, quería un momento con ella a solas pero sabía que si Merlina se daba cuenta de lo que estaba tramando probablemente le pediría el divorcio, en un descuido se escabullo entre la gente, dejando a Merlina conversando con Tyler quien era también un invitado de la fiesta.

Hola.—saludo tímidamente a espaldas de la mujer de grandes canas, ésta volteó inmediatamente mirándola de arriba a abajo sin mucho disimulo— Quería hablar con usted, Merlina me pidió que fuera yo quien lo hiciese.—se apresura a decir antes de que Eudora cuestionara el porqué su nieta no hablaba directamente con ella.

— ¿De qué se trata?—pregunta con curiosidad empezando a caminar, Enid sabía muy bien a donde se dirigían así que la sigue con cautela, Eudora abre la gran puerta y ambas entran en medio de cosas viejas ya esparcidas por el suelo, la mayor de los Addams se dirige hacía un escritorio y se sienta esperando que Enid hablará.

— Queremos quedar embarazadas.—suelta sin mas.

— ¿Merlina embarazada?—pregunta Eudora y Enid asiente, en realidad siempre pensó que la embarazada sería ella pero ahora mismo no le pondría ningún pero a lo que la señora diga— Ya se estaban tardando, y en realidad pensé que ella vendría por esto algún día.

— ¿Por el que?—pregunta Enid curiosa mientras ve como la Addams rebusca entre uno de sus cajones hasta sacar un frasco con liquido cristalino— ¿Qué es eso?

— Un tónico, lo que estas buscando.—dice con seguridad, y luego vuelve hacia los cajones rebuscando algo mas— Y esto, es lo que debe tomar ella, quien quedará embarazada.—la mujer se acerco hasta ella y le entrego ambos frascos, Enid miro confundida aun sin entender muy bien como iba a funcionar eso.

Luna - wenclairDonde viven las historias. Descúbrelo ahora