Isabella.
Me quede helada cuando lo vi al lado de Arturo.
Se supone que el estaría buscando al capo. No que estaría sentado al lado de la persona a la que menos esperaba ver.
Controlando mi respiración me enfoco en mi misión.
Arturo está metido en su papel de "bandido" se supone que él tiene que buscar al objetivo.
Tendrá que llegar a él con tiempo, y comprando la mercancía que distribuye nuestro capo.
Veo como Arturo me guiña el ojo. Luego de eso desvío mi vista, y puedo ver como los ojos de una persona me examina.
No quiero decir su nombre, porque no quiero recordarlo.
Esta persona me ve "coquetearle" a los demás hombres, y me lanza una mirada de muerte.
Cambiando de tema, mi pierna aún duele, por milagro la herida está tapada por un parche color piel.
Ignorando eso, me paso las manos por mi cabello, sintiendo la música recorrer por mi cuerpo, y desconectándome un poco del mundo, no del todo.
Todavía no encontramos al individuo, por lo que debo pasar la mirada por todos los hombres que están atentos a mí.
Cuando por fin veo al objetivo, que está en plena oscuridad, me concentró en él.
Empiezo a bailar en una sola dirección, sin dejar de hacer contacto visual, le regalo una sonrisa antes de bajar del escenario moviendo las caderas.
Tengo una grabadora en mis aretes. Por lo que si me toca hablar con el objetivo, todo será grabado y tendremos pruebas contundentes contra él.
Cuando estoy a punto de marcharme, el objetivo se me acerca.
Adam.
Me levanto más celoso que nunca, ella bajó del escenario, y puedo ver como un tipo se le acercó, le dijo algo, a lo que ella respondio que si con la cabeza, luego el tipo la lleva a los asientos, veo como el le indica que se siente en su regazo.
Y ella lo hace.
No puedo quedarme aquí.
Estoy votando humo por las orejas.
Cuando quiero caminar hacia donde están tocando a mi Isabella mi hermano me frena.
—No—se interpone en mi camino—No le puedes robar la chica al jefe.
¿Qué mierda?
—Deja tu mierda—lo intento apartar— A ver, a mí me vale mierda que sea el jefe o el dueño de este maldito país, así que ahora mueve tu culo y déjame ir a buscar a mi chica.
Él no se mueve.
—Él no será tu jefe, pero si es el mío, y me puedes meter en problemas si te dejo ir.—Habla con determinación.
Jodida mierda.
¿En qué te has metido hermano?
Tomando la "más sabia decisión" me vuelvo a sentar, sin dejar de mirar en esa dirección.
Ella debe sentir mi mirada, porque en un momento me ve, y sonríe, seguido de eso acerca su cabeza peligrosamente a la de él.
Y cuando pienso que se van a besar.
Ella se para y camina para detrás del escenario, donde supongo que deben encontrarse los camerinos.
Mi puño golpea la mesa cuando ese hombre la sigue.
Mierda.
No puedo intervenir, por el bien de mi hermano.
Pero tampoco puedo quedarme sin hacer nada.
Ya sé, quizás si armo un escándalo, podrán obligar a todos a evacuar.
Tengo que meditar, de qué manera llevaré al cabo mi plan, no puedo dejar que la toquen.
Ya sé...
Tendré que llamar a unas cuantas personas para que me ayuden.
Nota: hai sjdjd sin editar, actualize "CAPTADORES" por si quieren ir a leer.
ESTÁS LEYENDO
𝓶𝓪𝓵𝓭𝓲𝓽𝓸 𝓵𝓪𝓭𝓻𝓸𝓷 |Editando|
FantasyPRIMER LIBRO. Todo empezó con una noche que ninguno de los dos planeamos, yo quería deshacerme de unas pruebas que perjudicaría a mi hermano, y ahí estaba ella, cachonda y asustada, nunca pensé que la follaría esa noche, y lo hice, me dejó enredado...