-ᴘʀᴏᴛᴇᴄᴛɪᴠᴇ ᴀʟᴘʜᴀ-

Capítulo 1

Luffy era arrastrado por su abuelo hacia un lugar que no conocía.

Hizo un puchero inconforme, ¡Él quería quedarse con Makino! Además, extrañaba mucho a Shanks.

Gimió derrotado, dejándose llevar como un bulto de papas.

—¡Ji-chan! ¡No quiero ir a donde quiera que me lleves!—Exclamo pataleando, haciendo un puchero triste.

Su abuelo desvió la mirada torciendo sus ojos, ignorando su rabieta por completo.

—¡Esta Villa te ha corrompido!—Gruñó Garp. Luffy se exaltó un poco por el gruñido, frunciendo el ceño.

Los gruñidos alfas son temerarios cuando no sabes controlarlos.

Garp soltó un suspiro cansado, y pidió una pequeña disculpa a su nieto. Luffy sonrió brillantemente, sin importarle.

Para Garp, Luffy era como un pequeño rayo de sol andante. El niño era la definición de sonrisas y risas soleadas a pesar de ser un alfa protector.

Era todo lo contrario a un alfa.

Por ese motivo, cuando se entero que el pirata pelirojo estaba aquí, sintió a su lado alfa amenazado.

Amenazado de que quisieran quitarle a su nieto.

Ahora que vuelve a la Villa, se encuentra que el mocoso había comido una fruta del diablo, y que había heredado el sombrero del pelirojo. Increíble para su salud.

Se había enterado que Luffy había soltado su primer gruñido, que había sido tan amenazante como dominante, y Garp ya sabía por dónde iba esto.

Pero también supo que Luffy se sentía triste al dejar que su naturaleza lo hiciera gruñir (aunque no sabía que fue él mismo quien lo hizo). Había soltado un suspiro por lo bajo.

—Oye, Ji-chan—Murmuró el niño, como si fuera un secreto que solo los dos debían saber. Sonrió un poco—¿Sabías que ahora mis puños son como los de una pistola?—

La energía rebosante hizo reír a Garp, su pecho se sentía liviano ante las ocurrencias de menor.

El niño hizo un puchero indignado, queriendo verse enojado pero fue todo lo contrario. 

—¿Sí? ¿Y como sabes eso?—Susurro, totalmente divertido.

Luffy sonrió, y ahí estaba de nuevo.

—¡Porque lo sé, Ji-chan!—Le saco la lengua juguetonamente, soltando una pequeña risa. 

Garp volteo los ojos, y se rió.

—Tonto niño—Murmuro.

Al ver que ya iban llegando hacia el lugar acordado, paro su andar.

Luffy lo miro confundido al ver que lo bajaban y quedaban uno frente a otro.

Su abuelo lo miro fijamente, y él ladeo la cabeza confundido.

—¿Ji-chan?—Parpadeo confundido.

—¡Escucha, Luffy!—Su abuelo exclamo—De ahora en adelante, vivirás aquí. Ese maldito de Akagami te ha corrompido, ¡Así que quedaras aquí hasta que te vuelvas un buen marine!—Sonrió.

Luffy jadeo, mirándolo boca abierto.

—¡¿Qué?!—Grito—¡No, Ji-chan! ¡Yo quiero estar con Makino! ¡Y seré el Rey Pirata!—Se cruzo de brazos con un ceño fruncido.

Su abuelo negó, cruzándose de brazos y conectando miradas. Sus miradas tercas chocaron hasta que Garp suspiro.

Una idea cruzo en su mente.