Mi nombre es Zetaree. Soy la princesa Imperial de Nirvania de Norte. Y me acabo de casar.
Me he casado con La Muerte. El hombre más temido y despiadado de este continente. Este matrimonio se suponía que sería mi ruina. Pero no estoy dispuesta a acep...
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Él la abraza entre sus fuertes brazos mientras ella está en el suelo acurrucada a su pecho. Su rostro delicado lleno de lágrimas está hundido en su torso, él la trata de consolar, trata de que su llanto cese. Pero es como si hubiera pasado los peores momentos de su vida y solo puede recibir consuelo bajo su calor.
—¿Qué ha pasado?
Pregunta luego de que nadie haya dicho nada después de él acusarme de causar problemas. No miró a nadie en específico cuando lanzó la pregunta. Pero ahora que no recibe respuesta alza sus ojos hasta el grupo de damas de compañía. Veo cómo Mars disimuladamente hazla sus ojos también hasta ellas.
— Su Alteza.— Una de las chicas hace una reverencia y mira a Cedric.— Fue Lady Zetaree, estábamos muy tranquilas tomando el té cuando ella llegó a molestar a la pobre Lady Mars restregándole en la cara que la capa que ella portaba era suya.
—¡Eso no es cierto!¡No fue así!—Mi hermana se exalta molesta tratando de defenderme. — ¡Ellas empezaron a insultar a mi hermana sin razón, incluso Mars la golpeó y le exigió la capa!
Las mujeres exclaman indignadas, Mars llora mucho más en el pecho de Cedric.
—¡No es cierto su Alteza!¡Mars solo se intentaba defender!— Otra interviene en la discusión.
— Si, es verdad Alteza. Mars es la víctima. Esta salvaje la agarró a golpes.
—¡Eso no es verdad!¡ Mi hermana solo se defendía!
De un momento a otro todas empiezan a gritar y a tratar de cambiar la historia para defender a Mars. Agatha les grita de regreso oprobios por sus mentiras.
—¡Basta!— La voz de Cedric hace que se callen todas.
Cedric ayuda a Mars a levantarse del suelo y limpia sus lágrimas. Mira al resto de las mujeres serio.
— Retírense todas.
Las mujeres no discuten la orden. Veo cómo poco a poco se van dispersando y pasan por mi lado para salir del pasillo. Siento el codo de una de ellas que me empuja. Pero no puedo saber con certeza cuál fue pues están todas juntas. Tomo a mi hermana por el brazo para irme.
— Zetaree.—Escucho su voz como me llama. Me volteo un poco.— Tú te quedas.
Siento un escalofrío recorrer mi cuerpo. Cuando él me habla así no puedo evitar sentirme nerviosa. Miro a mi hermana y asiento con mi cabeza para que sepa que estoy bien. Agatha se marcha quedándonos en el pasillo, Mars, él y yo. Cedric se voltea hacia Mars y le sonríe un poco. Toca su rostro.
— Tú también deberías irte.
¿Qué?¿Por qué quiere quedarse a solas conmigo?
Mars hunde sus cejas sin entender.
— Acabas de llegar Cedric. No te he visto en semanas.
Cedric humedece sus labios.
— Sé que te debo explicaciones. Pero ahora necesito hablar algo con ella en privado.
