FUERA DE JUEGO

MAL MOMENTO

Vinicius se despertó temprano en la mañana y miró hacia Laia, que todavía dormía plácidamente a su lado. Con una sonrisa, se levantó de la cama y se dirigió a la cocina para preparar el desayuno.

Después de unos minutos, Vinicius volvió a la habitación con una bandeja de desayuno. Colocó la bandeja en la cama y despertó a Laia suavemente. Ella abrió los ojos lentamente y le dio las gracias por el desayuno.

Mientras desayunaban, Vinicius le contó a Laia que ya no tenía que ir a entrenar hasta septiembre, ya que la temporada había terminado. Laia se puso muy feliz y lo abrazó fuerte, agradecida de tener a Vinicius en casa durante más tiempo.

Vinicius también le dijo a Laia que quería hacer algunos planes para el verano juntos. Laia estaba emocionada de pasar más tiempo con Vinicius y juntos planificaron las vacaciones.

Después del desayuno, Vinicius y Laia se acurrucaron en la cama y disfrutaron de un momento de tranquilidad juntos.

Laia estaba disfrutando de su momento en la cama con Vinicius cuando sonó su teléfono móvil. Era su supervisora del hospital donde trabajaba.

- Hola, Laia, lo siento por llamarte tan temprano, pero necesito hablar contigo - dijo la supervisora con voz seria.

- ¿Pasa algo malo? - preguntó Laia, preocupada.

- No, no es nada malo - dijo la supervisora. Solo quería hablar contigo sobre tu situación laboral. Entiendo que tener un prometido famoso puede hacer que sea complicado trabajar en el hospital.

Laia se sintió un poco incómoda por la conversación. Sabía que su trabajo podía ser difícil de conciliar con la agenda de Vinicius, pero había logrado organizarse hasta ahora.

- ¿A qué se refiere exactamente? - preguntó Laia, tratando de ocultar su incomodidad.

- Lo que quiero decir es que podemos ser flexibles y encontrar una solución que funcione para ambas partes. ¿Has pensado en trabajar como enfermera de emergencias? Tendrías más flexibilidad con tus horarios es decir, solo vendrías si una enfermera coger el alta por ejemplo - explicó la supervisora.

Laia pensó en la propuesta. Trabajar en emergencias sonaba interesante, y la flexibilidad horaria podría permitirle estar con Vinicius en momentos importantes.

- Creo que podría ser una buena opción - dijo Laia.

- Perfecto, me alegra que estés abierta a la idea - respondió la supervisora.

Laia agradeció a la supervisora por la oportunidad y colgó el teléfono. Se volvió hacia Vinicius, quien la estaba mirando con curiosidad.

- ¿Todo bien? - preguntó Vinicius.

- Si, solo era mi supervisora. Me ofreció un puesto de enfermera de emergencias - dijo Laia con una sonrisa. Creo que puede ser una buena opción para nosotros.

Vinicius se sintió aliviado al escuchar que Laia estaba bien. Sabía lo mucho que ella amaba su trabajo y no quería que renunciara a él por él.

- Me alegra que puedas encontrar un equilibrio entre tu trabajo y nuestra vida juntos - dijo

Vinicius mientras le daba un beso en la frente.
Laia sonrió y se recostó en la cama. Estaba emocionada por lo que vendría a continuación.

Vinicius recibió una llamada de un representante del Real Madrid. Le informaron que habían diseñado una nueva equipación y que querían hacer una sesión de fotos con Vinicius y su prometida Laia. Los dos aceptaron inmediatamente y se pusieron en marcha para el estudio.

Vinicius estaba emocionado de estar en la sesión de fotos para la nueva campaña publicitaria del Real Madrid. A pesar de que las sesiones de fotos no eran su actividad favorita, siempre disfrutaba de la oportunidad de representar al club y de trabajar con Laia, su prometida