DESCIFRANDO TUS ACCIONES.

38. ¡CUIDADO!

5:30 pm

- Buenas tardes - saludó Minjeong parada en el último escalón, frente a Bona que fue quien le abrió la puerta.

- ¿Minjeong? Entra - le dio paso para entrar. Bona cerró la puerta detrás de si y se encaminó de regreso a su cuarto - Jimin llegó hace un rato, debe estar en su cuarto. Adelante, estás en tu casa -Sabía cual era el cuarto de Jimin, había estado antes en esa casa, pero como a la madre de Jimin no le gustaban las visitas, Minjeong iba poco a visitar.

- ¿Minjeong? - Yeonjung la vio pasar, Minjeong regresó dos pasos y saludó con una sonrisa, Yeoreum estaba dormida y Yeonjung veía televisión - Que gusto que visites -

Después del pequeño saludo con Yeonjung siguió hasta la habitación de Jimin. ¿Debía tocar la puerta o entrar y ya? Aúnque la puerta estaba entre abierta de todas formas. Tocó dos veces pero no hubo respuesta, empujó con cuidado y se asomó al cuarto. Jimin estaba dormida, se veía tierna y además, dormía en la misma posición que Yeoreum. La habitación estaba iluminada en color morado y azul oscuro. Se veía tan relajada que daba pesar despertarla.

Fue despacio hasta la cama y se sentó, al ver de cerca el rostro de Jimin notó las lágrimas que caían, ¿Jimin llorando? Eso le pesó, ¿Qué pasaba por la mente de Jimin? ¿Con qué soñaba que la hacía llorar? Acarició con delicadeza su rostro, trazando las líneas que marcaban las lágrimas. Jimin reaccionaba a su tacto. Pasó al menos 15 minutos allí, acariciando suavemente el rostro y el cabello de Jimin que estaba desordenado, hasta que dejó de llorar y una sonrisa pequeña se formó.

- Win... - balbuceaba Jimin intentando despertar - ¿Winter...? -

- Hola, Rina -

- ¿Que sucede? -

- Quería verte - Jimin seguía más allá que acá.

- ¿Ya no estás molesta conmigo? - Minjeong podía morir de culpa allí mismo. Jimin creyó que estaba molesta todo este tiempo, además, su voz recién levantada era muy tierna.

- Nunca estuve molesta contigo -

- ¿Puedo abrazarte? - Jimin terminó jalando a Minjeong hasta quedar tumbadas en la cama.

- ¿Porqué llorabas? - preguntó en un susurro, Jimin no respondió, en su lugar, se apegó más a Minjeong - ¿Que te está molestando? ¿Que te hace sentir mal? - seguía preguntando en voz baja, y mientras, jugaba con el cabello revoltoso de Jimin - ¿Que soñabas? -

- Algo no muy bonito -

- ¿No quieres contarme? - se quedaron en silencio un rato hasta que Jimin volvió a tomar la palabra.

- Aeri está enojada conmigo, muy enojada -

- ¿Porqué? -

- Dice que no me cuido, se empeña en seguir y seguir con el mismo tema cuándo yo lo quiero dejar de lado -

- ¿Eres consciente de que parte de eso es verdad? -

- ¿Que parte? -

- No te cuidas -

- ¿Tu también? - Jimin tomó el impulso de separarse pero Minjeong fue más rápida, rodeó a Jimin con sus piernas evitando que se fuera. La atrajo de nuevo a cómo estaban.

- Jimin, te adoro - la expresión confusa en el rostro de la azabache hizo que Minjeong soltara una risita - ¿Sabes que te quiero? ¿Entiendes que te adoro? ¿Sientes mi cariño y preocupación por tí? -

- No tienen que preocuparse por mí -

- El único inconveniente es ese; no tenemos, pero queremos. Preocuparnos por ti no es una obligación, es algo que nos nace, es un sentimiento natural. Se sincera contigo misma ¿Consideras que estás realmente bien? -