DESCIFRANDO TUS ACCIONES.

76. NEGOCIACIONES

La lentitud de los días era exasperante, pese a todo el revuelo que había en las ciudades grandes y sobre todo en la capital, Krystal mantuvo la escuela activa y, en el pueblo las cosas continuaron con agilidad. Excepto para algunas personas, entre esas Jessica y la misma Krystal.

Jungeun, Jinsoul, Yizhou, Aeri y Minjeong estaban desaparecidas. A Beomgyu, los medios de comunicación lo dieron por muerto, en la escuela las especulaciones, teorías, rumores y chismes variaban y cambiaban con los días. Los amigos cercanos a las chicas estaban seriamente afectados; lo cuál era de esperarse pero, aunque Jimin sabía la realidad de los hechos, también acumulaba un poco de la amargura y desánimo de sus amigos. Y es que, sin las chicas, se sentía sola, ¿Así se sentían ellas cuando Jimin desaparecía por días repentinamente?

Su rutina escolar sin sus amigas al lado era aterradora, era asfixiante y muy solitaria. El puesto a su lado estaba vacío nuevamente. Aeri ya no estaba con ella en clases, Minjeong y Yizhou no estaban con ella para el desayuno. Comenzaba a deprimirse sin siquiera notarlo. El resto de sus compañeros le dedicaban miradas de compasión y lastima, pero nadie se atrevió a decir una palabra al respecto. Ni uno de ellos fue capaz de expresar lo que sentían, al menos no delante de Jimin.

Heejin, siendo el tipo de persona amable, ocupaba algún tiempo de sus horas antes del entrenamiento con el equipo de natación para sentarse en el borde de la piscina junto a Jimin, en silencio. A veces daba palmaditas en su espalda para hacerle saber que seguía allí.

Un día solo pudo decirle, "aparecerán pronto".

Sin embargo, hay personas amables y otras que simplemente no aprenden a callar sus estúpidos pensamientos. Los malos comentarios surgieron después de que el aire de pena se disipó. Otro descanso de clases. Yeoreum le regañó por volver a bajar de peso pero, su apetito era inconsistente debido a tanta presión, hambre era lo último que tenía. Además, su cuerpo estaba acostumbrado a tal irregularidad.

Estaba sentada en una banca del jardín interno.

- Entonces los rumores eran falsos ¿Ah? - la molesta y detestable voz de algún fastidioso al que Jimin no recordaba la sacó de sus pensamientos - Decían que ustedes eran súper soldados o algo así... Pero es mentira -

- ¿Y? -

- De ser verdad habrías ido a rescatar a tu mujercita y a las bastardas de Uchinaga -

Jimin puso toda su fuerza de voluntad esa mañana para no golpearlo en cuanto abrió la boca. Todavía había gente así de insoportable. ¿Qué debería hacer? Minjeong habría agachado la cabeza y buscado una escapatoria. Aeri lo habría ignorado como al ser más insignificante. Y Yizhou le habría dedicado una mirada de arriba a abajo para decidir si valía la pena prestarle atención

¿Karina Yu? Ella le habría cortado la lengua por insolente. Pero se recordó a sí misma que habían ciertos pensamientos que debía erradicar de su mente. Entre esos el de usar la violencia para todo. En verdad era molesto tener que controlarse tanto, últimamente su sentido de autocontrol se veía tentado con severidad y era una verdadera molestia no poder retomar su antiguo y habitual temperamento.

Jimin siguió el ejemplo correcto, después de un vistazo decidió que no valía la pena prestarle atención así que se marchó. Vió a Hyunjin solo, sentado en las bancas frente a la tienda escolar. El pobre estaba todavía más deprimido que Jimin - ¿Has sabido algo de ellas? - preguntó decaído.

- No, aún no sabemos nada -

Jimin lo vió encogerse en su lugar, hecho bolita sobre la banca. Hyunjin apareció en sus vidas cómo una tremenda molestia, se ganó la apatía de muchos y tuvo conflictos con varios, sin embargo, fue sorprendente para Jimin ver el progreso de Hyunjin, quién pasó de enemigo a compañero. Claro, seguía teniendo esa actitud de diva incomprendida, pero Yizhou supo ganarse la atención y el afecto del chico por encima de cualquiera.