DESCIFRANDO TUS ACCIONES.

84. EN LAS PROFUNDIDADES

Yizhou fue la primera en levantarse, saltó de la cama para ir a ver a Beomgyu. Pero Jimin ya no estaba, el espacio junto a Minjeong estaba vacío, lo que era extraño ya que habían tomado la rutina de despertar y desayunar juntas ¿Adónde iría? El reloj le hizo saber que todavía era muy temprano y que Beomgyu probablemente debía estar dormido, antes de agarrar el pomo de la puerta del baño esta se abrió dejando ver a Jimin con un estilo particular. Antes de poder decir algo, Jimin le tapó la boca y la llevó afuera en silencio.

- ¿Qué sucede? -

- No quiero que se despierten - se refería a Aeri y Minjeong - Ning, voy a estar ausente por unos días. Jhonny y el resto del equipo de seguridad se quedará aquí con ustedes y Jieun vendrá aquí en tres días -

- Jimin, ¿Es peligroso? -

- ¿Qué? -

- El lugar adónde vas, no pareces vestida para ir a jugar en el jardín y no quieres que ellas despierten. Imagino que es peligroso y difícil de explicar - la voz de Ning sonaba apagsds y sin ánimos. Jimin levantó su rostro y le dió una sonrisa gentil.

- Voy a estar bien, serán solo dos días y volveré -

- Prométeme que te cuidarás ¿Si? Eres terca y demasiado impredecible a veces, si la situación se complica entonces huye, corre rápido y escapa, no te quedes a hacerle frente a todo ¿Entendido? -

- Entendido, si es necesario correré - Abrazó a Ning para despedirse, cuida mucho a Beomgyu y le das mis disculpas por no visitarlo ayer -

- Jimin, vamos... - Yeonjung se quedó en silencio cuando vió a Ning.

- ¿Tú también...? - Ning las miró a una y luego a otra - Ustedes.... a ustedes les encanta hacerme sufrir. Ven acá - Yizhou le dió un fuerte abrazo a Yeonjung - Jimin prometió que volvería sana y salva, tu también debes prometerlo -

- Yizhou... Son solo dos días -

- Cosas horribles pueden pasar en cuestión de segundos, te ruego que regreses, de lo contrario no me perdonaré nunca haberlas dejado ir tan fácil ¿Entendido? Te veré en dos días -

Yizhou cerró la puerta detrás de ella con cuidado para no despertar a sus hermanas. Luego se dejó caer, su espalda recostada contra la puerta, sentada en el frío suelo. Con las lágrimas al borde de sus ojos porque su corazón temblaba de miedo al imaginar lo peor. Tenía que ser optimista y positiva.

Ellas volverían.

Tenían que volver. Suplicaba por eso, cada una de sus lágrimas eran el tributo perfecto para su petición. Le rogó a quién quiera que oyera sus ruegos y estuviera dispuesto a cumplirlos, rogó que en el momento dado la cobardía se apoderara de Jimin y Yeonjung para obligarlas a huir del peligro en lugar de lanzarse a el.

- Yu Jimin, Yu Yeonjung... Ustedes tienen que regresar aquí. Daría mi vida por ello, tienen que hacerlo - susurró Yizhou con sumo anhelo.

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El corazón de Yeonjung se sentía tibio y lleno de una extraña calidez, la preocupación de Yizhou le hizo sentir así, era lindo saber que había alguien esperando por su regreso, aún si aquellas palabras hubieran sido falsas seguirían calentando su frío corazón.

Partieron antes de las seis de la mañana, y llegaron al lugar de partida pasadas las tres de la tarde. El viaje habría tardado más de no ser porque Eunseo iba a todo lo que la ley le permitió. Hyuk era el más emocionado por la velocidad. Se dividieron en dos grupos. Aunque originalmente ella no estaba incluida en el grupo dónde estaba Jimin, Yeri aconsejó que era bueno tenerlas juntas, así que hicieron un cambio con Jae. Yeonjung no recordaba mucho en realidad, pues ella solo hizo tal recorrido una sola vez.