Cap.48 Por todos lados.

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La mañana había comenzado temprano en la ciudad de Musutafu. Toshinori Yagi y su amado Izuku Midoriya se preparaban para una misión especial. Aquel día tenían que encargarse de recolectar comida y suministros necesarios para abastecer la ciudad.

Si lo mismo de siempre pero en esta ocasión ya hacía mucha falta, la gente estaba a falta de fin de mes.

Toshinori: Izuku despierta, hoy nos toca una tarea importante.

Dijo Toshinori mientras se coloca su inconfundible sonrisa. Aquella sonrisa que a Izuku tanto le encantaba y motivaba.

El chico apenas abrió los ojos vio al amor de su vida con aquella sonrisa y se motivó.

Izuku asintió emocionado, aún maravillado por el hecho de estar trabajando junto a su novio, Ambos se colocaron sus ropajes y se dirigieron hacia las afueras de la ciudad con bolsas vacías para llenarlas con alimentos. Sin embargo, no sabían que su excursión no sería tan simple como pensaban.

Al llegar a las afueras, se vieron sorprendidos por la aparición de esas criaturas.

Sin tiempo que perder, Toshinori y Izuku se lanzaron al combate Toshinori desató su poder a máximo rendimiento. Golpeó a los Nomus con su impresionante fuerza y velocidad, derribando a varios de ellos en el proceso. Por otro lado, Izuku usó sus piernas lanzar potentes ataques.

A pesar de que los Nomus eran peligrosos y numerosos, el dúo sabía cómo complementarse. Toshinori protegía a Izuku de los ataques más fuertes, mientras que Izuku buscaba debilitar a los enemigos para que Toshinori pudiera eliminarlos con mayor facilidad.

La intensa batalla duró un buen rato, hasta que finalmente lograron derrotar a todos los Nomus. Ambos estaban agotados, pero satisfechos de haber cumplido su misión. Llenaron sus bolsas con alimentos y suministros sobrantes de los Nomus, asegurándose de no dejar nada desaprovechado.

Una vez terminada la batalla, Toshinori y Izuku regresaron a la ciudad. Al llegar a casa, se quitaron sus ropajes y se dejaron caer exhaustos en la cama.

Toshinori: Hoy si fue una misión muy intensa, ¿verdad, Izuku?

Dijo Toshinori, tratando de recuperar el aliento.

Izuku: Claro que si pero lo importante es que conseguimos todo como correspondía, estoy agotado por ahora...

Ambos se quedaron un rato descansando y recuperándose del combate. Se sentían orgullosos de haber enfrentado a los Nomus y protegido la ciudad. Sabían que su trabajo no era fácil, pero estaban dispuestos a enfrentar cualquier desafío que se les presentara.

Después de una merecida siesta, Toshinori e Izuku se prepararon para distribuir la comida recolectada por toda la ciudad, asegurándose de que cada persona estuviera bien alimentada.

Juntos, caminaron por las calles con una sonrisa en sus rostros, listos para volver a casa.

En cuanto volvieron esta vez fueron a bañarse juntos.

Izuku: ¿Te gusta bañarte conmigo por ahorrar agua? Jajaja.
Toshinori: Basta de decir eso siempre, no ves que me es entretenido y romántico el ayudarte, tu cabello se vuelve muy liso con el agua pero después seco ya vuelve a ser esa mata verde que tanto amo.
Izuku: ¿Soy como tú arbusto?
Toshinori: El arbusto que buscó cuidar siempre y podar cuando tenga malos pensamientos.
Izuku: Owww, eso suena tierno.

Izuku jugaba con las burbujas mientras que Toshinori lavaba suavemente todo, desde su pecho, hasta su espalda.

Ya después de estar enjabonados comenzó a distribuir el agua, Izuku estaba más que relajado, era uno de los momentos más románticos para él, el fortalecer la relación mediante un baño de calidad.

Hasta en el fin del mundo. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora