Bullet to the heart ➳ HopeV

➷ primer capítulo

Taehyung estaba perdidamente enamorado de su esposo, lo estuvo desde que lo vio por primera vez, cuando ingresó a su bufete como practicante. El alfa denotaba la elegancia y el porte que cualquier omega deseaba que su pareja tuviera y él no era la excepción, pues el pelicastaño creía en los ficticios pero muy esperanzadores cuentos de hadas que su madre solía contarle cuando apenas tenía cinco años, de esos en los cuales los alfas solían ser grandes, protectores, fuertes y muy recelosos con sus omegas y que al casarse con ellos los cuidaban como si de un tesoro se tratara. Taehyung realmente creía que eso existía en la vida real o que algún alfa podría ser tan caballeroso como los pintaban en las novelas y creía firmemente que Hoseok lo era, pues este al saludarlo le dedicó una sonrisa coqueta y por sobre todo, no lo hizo menos al saber que era un omega, lo cual también era algo muy extraño en el mundo laboral en el que se encontraban.

El omega se sintió bien recibido y muy protegido por Hoseok, pues este siempre lo ayudo y guió en todo momento, incluso habían compartido algunas copas a pedido del mayor en su cumpleaños número veintiocho. Taehyung se había sorprendido mucho por la edad, pues él apenas tenía veinticuatro y aunque sabía que el alfa debía contar con una edad superior, jamás creyó que sería más de los tres años.

Esa noche se conocieron más de lo debido y a partir de ese día no dejaron de tener encuentros sexuales después del trabajo o incluso en alguna fiesta realizada por sus compañeros.

No pasó mucho para que Taehyung se graduará y pasara a ser un colega más del alfa, claro que siempre manteniéndose al margen y la imagen que ambos tenían o eso creían pues ya todos en la oficina sabían que había algo entre ellos, especialmente porque habían escuchado muchos rumores que involucraban al jefe y al "nuevo", como solían llamarlo, e incluso muchos se habían percatado del recelo de Hoseok con Taehyung, ya hasta algunos lo comparaban con un perro alrededor de un hueso, pues siempre andaba tocándolo indirectamente cada vez que otro alfa se encontraba cerca de ellos, y aunque un pequeño grupo quiso negarse a creer en todas las señales terminaron confirmando todos los rumores en el cumpleaños número treinta de Hoseok, cuando este anunció su compromiso con Taehyung.

La boda no fue la gran cosa, pues la pareja parecía muy apresurada en cuanto al papeleo y la ceremonia, todo se dio en menos de un mes y aunque muchos especulaban que se debía a un embarazo prematuro muchos otros solían disimular y asegurar que solo estaban enamorados. No obstante nuevamente los rumores fueron confirmados cuando Taehyung decidió subir fotos de su baby shower, uno íntimo en el cual solo estaban presentes sus familiares y los de su esposo. Ya todos lo supieron, pues no había pasado más de siete meses desde la ceremonia.

El omega estuvo feliz cuando descubrió su embarazo y aunque Hoseok en un inicio parecía reacio a la idea, incluso al matrimonio terminó cediendo cuando la pequeña Hani nació, incluso él estuvo feliz de conocerla, pues jamás creyó que se convertiría en un padre omega, menos en "ama de casa", pues desde que se casó había dejado de trabajar comenzó a dedicarse enteramente a todas las labores de su casa y hacer feliz al alfa. Taehyung era feliz con esa vida, era lo que siempre había querido y anhelado, y finalmente lo tenía.

Realmente el omega había idealizado a su esposo y la familia que ahora tenían. No se podía quejar, tenía todo lo que necesitaba, además de un segundo bebé en camino y un alfa que estaba feliz con la noticia. No había nada más qué pedir.

— ¿Cómo lo llamarán? — preguntó su suegra, mientras junto a su madre buscaban ropitas blancas y amarillas entre los tantos colgadores de aquella tienda para bebés.

— Aún no hemos pensado en un nombre. — susurró el pelicastaño, mientras empujaba el coche de su hija, ya dormida, dirigiéndose a un aparador exclusivo para bebés de 0 a 3 meses.

— ¡Ya tienes que ir pensando en uno! — gritó JiWoo, su cuñada, mientras caminaba en dirección suya, después de haber estado desaparecida un buen rato y Taehyung ya veía el porqué. JiWoo traía en ambas manos muchas prendas de bebé, entre blanco, amarillo, rosado y azul.

— Aún faltan seis meses para que nazca, dudo que tenga que pensar en un nombre ahora o incluso estar buscando ropa. — rió el omega, mientras apreciaba los pequeños conjuntos de tono blanco, que tanto había extrañado hace ya un año atrás, cuando su pequeña dejó todas sus prendas de bebé y comenzó otra etapa, lo cual lo dejó muy triste y con ganas de ampliar su "nido", razón por la cual ahora contaba con tres meses de embarazo. — Ni siquiera se lo he comentado a mis conocidos, solo ustedes y Hoseok lo saben. — continuó, esta vez tomando entre sus manos una prenda que le había llamado la atención y es que se trataba de un mameluco blanco que al parecer de cualquiera sería muy simple, pero para él era un encanto, pues claramente esto era lo que extrañaba.

— Yo pienso que deberían hacer una fiesta de revelación de sexo, algo así como los americanas. — dijo esta vez su suegra, quien seguía viendo los tantos trajecitos junto a su madre.

Taehyung negó, dejando a un lado el traje que había agarrado minutos antes y viendo al instante como una persona más lo sujetaba. El omega volteó y se dio con la cara angelical de otra omega, que parecía un poco incómoda al verlo.

— ¡Oh, lo siento! ¿Pensabas llevarlo? — susurró apenas la omega, parecía muy apenada. Taehyung sonrió y negó, alejándose de ella y dirigiéndose a su madre y suegra, quienes no dejaban de reír y cuchichear en que tendrían un nieto precioso, al igual que lo fue Hani.

La vida de Taehyung era la soñada, era feliz en ese momento, mientras discutía con su madre, quién ya se dirigía a la caja para pagar los conjuntos y mamelucos que había comprado para su nuevo nieto, y detrás de ella iba JiWoo, quién también aseguraba ir a una tienda Gucci para comprarle su primer conjunto a su nuevo sobrino, al igual que lo hizo con Hani.

Por otro lado, se encontraba la omega, quien sujetaba con algo de fuerza el mameluco que Taehyung había dejado atrás. Ella lo veía tan radiante y feliz, mientras lo único que creía y pensaba era en lo difícil que había sido su vida a comparación de la de él. Definitivamente todo era su culpa, tal y como Hoseok lo repetía una y otra vez.

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¡Y así inicia esta historia! :')

Les juro que me encanta la historia, tanto escribirla como ver el desarrollo de cada personaje.

Nos vemos en otro capítulo ♡