Bullet to the heart ➳ HopeV

➷ cuadragésimo tercer capítulo

Hoseok jamás imaginó llegar tarde aquel día y todo por culpa de Jennie, con quien había tenido una discusión aquella mañana, ya que la mujer deseaba celebrar otro mes de casados que llevaban juntos, a ella siempre le había gustado hacer ese tipo de "tonterías", teniendo una cena romántica esa noche, especialmente esa noche en la que tendría que quedarse más tiempo en el trabajo para ver un caso que estaban llevando en su área, que era el que se encargaba de defender a millonarios o niños ricachones que incumplian las leyes y que creían que no deberían ir a la cárcel por hacerlo; él ya le había informado con mucha antelación a su esposa que aquel día no estaría disponible, pues necesitaban ganar el juicio, pero la mujer se habia empeñado en hacerle problema, a pesar de que le aseguró que podrían ir al día siguiente. Hoseok no sabe cuántos minutos perdió ni mucho menos cómo llegó a tiempo, casi rebasando el límite de velocidad, incluso agradeció que ningún policía lo detuviera, pues por su manera de conducir estaba seguro que en cualquier momento tendría problemas con la ley. Finalmente al llegar a recepción saludó a Jazmín, quien de inmediato lo mandó a la sala de descanso, en donde estaban todos reunidos, el alfa asintió, más ensimismado en no recibir una reprimenda que en preguntarse la razón por la que todos sus colegas estaban ahí.

— Taehyung. — susurró el pelinegro apenas se dio de frente con el omega que hace dos años atrás era su esposo. Jamás imaginó que lo volvería a ver, pues siempre habían tenido intermediarios e incluso por un momento llegó a creer que tendría que vivir de esa forma y solo viendo a Hani por una pantalla.

Taehyung pareció haberlo escuchado, al igual que él sintió que también pronunció su nombre, muy a pesar de todo el barullo a su alrededor. Cuando los aplausos se detuvieron y JongIn continuó hablando, más bien dando las últimas indicaciones antes de retirarse, Hoseok finalmente decidió irse del lugar, no tenía nada más que hacer y tampoco había razón para quedarse a seguir viendo a su ex esposo. El alfa salió de aquel lugar con el corazón acelerado, su lobo despertando después de mucho tiempo, estando alegre y moviendo la cola como si hubiera esperado mucho tiempo para ver de nuevo a la persona que más le importaba en todo ese mundo.

Hoseok solo detuvo al estar en la pequeña cocina que tenían en la oficina, con la mano temblorosa se sirvió un poco de café y sin pensarlo mucho lo tomó, importándole muy poco que estuviera algo caliente. Él no sabía cuánto tiempo había esperado por ese encuentro hasta que finalmente sucedió, tampoco sabía que iba a volver a sentir mucho de lo que en algún momento sintió, años atrás, cuando conoció a Taehyung y cuando se casaron. El pelinegro lo había extrañado tanto.

— ¿Qué te parece el nuevo? — la voz un tanto lejana logró sacar de sus pensamientos a Hoseok. El alfa ni se había dado cuenta en qué momento Chanyeol había ingresado a la cocina y al parecer no era el único pues había otro alfa más, que también estaba preparándose una taza de café, pero un tanto alejado de ellos. Al parecer la reunión había terminado.

— ¿Qué? — susurró apenas Hoseok, recuperándose del pequeño shock en el que había entrado minutos antes.

— Hablo del omega que JongIn acaba de contratar. — aclaró Chanyeol. — No es de mi tipo, en realidad, no me gusta y tampoco me agrada tenerlo en mi área. — continuó el alfa, dándole un sorbo a su café. — Odio decirlo, pero espero que su condición no se interponga con mi visión.

Hoseok frunció el ceño y miró finalmente a Chanyeol, el hombre estaba de lo más tranquilo, aunque pareciera que realmente odiaba tener a Taehyung en su área, el cual consistía en casos que solo incluían en vulnerabilidad de omegas, es decir, tenían clientes omegas, en su mayoría millonarios, que deseaban denunciar por sentirse vulnerados o atacados.

— Creo que JongIn solo lo puso en mi área porque la mayor parte de mi trabajo consiste en hablar con omegas. — continuó el hombre. — El único provecho que le puedo sacar es mandarlo a comprar al Starbucks, ya que este café apesta y hacer el papeleo, además de que también podría hablar con nuestros clientes, ya que al ser un omega los entiende mejor.