➷ vigésimo octavo capítulo

464 75 28
                                    

— ¡Papá! ¡Papá! — gritaba la pequeña Hani, mientras era sujetada por SeoJoon, quien trataba de calmar el llanto de su pequeña sobrina.

Taehyung solo miraba a su hermano y a su pequeña botando muchas lágrimas mientras exigía ver a su otro padre. El omega deseaba tanto cumplirle ese último sueño, pero no podía, la orden de alejamiento era por un año y se tenía que respetar. Cuánto había querido tener que explicarle a su hija lo que estaba ocurriendo, pero la pequeña Hani apenas y sabia hablar algunos monosílabos, no lo entendería y solamente le ocasionaría un daño, uno que ya creía que le estaba haciendo al separarla de esa forma de su padre.

— ¡Oh, vamos, Hani! — le pidió SeoJoon, elevándola con ambas manos. — Te compraré un juguete pero deja de llorar.

La pequeña se tranquilizó un poco ante la mención de un juguete, pues aunque todavía tuviera unos tres años y supiera solo unas cuantas palabras, sí que entendía muy bien cuando le hablaban de regalos o juguetes.

— ¡Juguete! ¡Juguete! — chilló emocionada la niña, ahora sí mostrando una sonrisa ante su tío.

Taehyung sonrió un poco y continuó guardando todos sus últimos electrodomésticos faltantes de la cocina en sus respectivas cajas. Había decidido mudarse luego de que finalmente Hoseok firmara el divorcio, por lo que sin dudarlo sacó la visa de Hani y el suyo, con toda la intención de irse del país, esa era su primera idea, sino fuera que sus padres lo convencieron de mudarse a Daegu, cerca a la casa de su abuela materna, con quien cabe resaltar tenía una buena relación, por lo que tras pensarlo unos días, terminó aceptando.

— ¿Dónde coloco esto? — preguntó MinHo, con una gran caja, la cual contenía algunos de sus libros.

— Llévalos al camión, por favor, los trabajadores te dirán dónde colocarlo para que no haya problemas en el viaje. — contestó Taehyung, guardando la licuadora en su caja y viendo por fin su cocina vacía, la cocina en la cual había aprendido a preparar los platillos favoritos de Hoseok y también en donde había alimentado a su pequeña en sus primeros meses de vida.

Aunque no quisiera admitirlo, el omega iba a extrañar todo ese lugar, porque aunque ahora no lo fuera, al inicio sí pudo considerarlo como un hogar, el comienzo de algo bueno, como también de quizás, algo malo. No sabía a ciencia cierta cuándo fue que empezaron los engaños y mentiras, no sabe tampoco si realmente Hoseok lo amó de una forma sincera en algún momento, lo único que sabe y que tiene entendido es que lo más bonito y verdadero que provenía de su ex esposo eran sus hijos, Hani y el nuevo bebé eran lo más puro y bueno que le pudo entregar.

— ¿Estás listo para el viaje? — le pregunto SeokJin, quien tenía cargado a Seokmin en sus brazos, el bebé durmiendo plácidamente y babeando el hombro de su amigo.

Taehyung no tenía cara para ver a SeokJin, ni siquiera supo cómo explicarle por el dinero que le fue depositado a su cuenta después del juicio de su divorcio. El omega no sabía qué hacer, pues a pesar de todo, SeokJin siempre había sido bueno con él y lo había apoyado en todo, incluso cuando le pidió que no le contara nada a NamJoon sobre la infidelidad de Hoseok, siendo el primero su esposo.

— SeokJin, tú... — no sabía si hacerlo, pero sabía que una vez que llegara a Daegu, una nueva vida empezaría, por lo que quizás SeokJin y su familia tendrían muy poco contacto, por no decir nulo.

— ¿Qué sucede? ¿Estás bien? — pregunto un poco preocupado el omega mayor, buscando con la mirada a uno de los hermanos alfas de Taehyung.

— No, no es nada, solo que... — Taehyung sabía que si soltaba aquella bomba antes de irse, probablemente destruiría muchas cosas, empezando por la estabilidad emocional de su amigo y la de sus hijos.

— ¿Solo qué...? — continuó el omega, ya un poco más tranquilo al ver que no ocurría nada malo entorno al embarazo del menor.

— SeokJin, te considero un gran amigo, así que tengo que decírtelo. No sé qué clase de persona sería si me voy y no te digo absolutamente nada sobre NamJoon. — dijo tan rápido Taehyung que por un momento temió que SeokJin realmente no le entendiera. Sin embargo y al parecer el otro omega parecía haberlo entendido muy bien, pues se quedó en silencio y frunció su ceño. — Yo... yo no sé cómo decirte esto, sé que será algo difícil, pero-

— Lo sé. — interrumpió SeokJin, brindándole una cálida sonrisa a Taehyung.

— No, no lo sabes. — dijo de inmediato el pelicastaño.

SeokJin asintió lentamente con la cabeza. — Sí lo sé, Taehyung. Sé todo sobre NamJoon.

Taehyung de inmediato entreabrio los labios, con toda la intención de decir que no sabía nada de su esposo, pero SeokJin continuó y entonces lo supo... supo que su mejor amigo siempre estuvo al tanto de las acciones de NamJoon.

— Sé que NamJoon no es el esposo perfecto, tiene sus errores como todos, incluso sé que muchos de esos errores tienen nombre y apellido, pero...

— Pero debes divorciarte. — se atrevió a decir Taehyung, sabiendo que era el mejor consejo que le podía dar a SeokJin. Sin embargo este se negó rotundamente con un movimiento de cabeza.

— No puedo, Taehyung. NamJoon es un buen padre, mis hijos están pequeños y creo que siempre lo supe. ¿sabes? Él no es muy perfecto para mentir. — una risa un tanto melancólica salió de los labios del mayor. — Los niños lo aman y no creo ser capaz de tener la fuerza que tienes tú para enfrentar todo un proceso de divorcio.

Taehyung suspiró, queriendo decir algo más, pero tras ver la seguridad en SeokJin finalmente desistió y solo le dio un abrazo, esperando que en algún momento fuera capaz de llenarse de ese valor, que sabía, tenía muy en el fondo pero del cual no quería usar.

Esa misma tarde el omega se estaba yendo al aeropuerto en compañía de sus padres y sus hermanos, quienes iban manejando y asegurándose de ir con calma, pues finalmente Hani había logrado dormirse, totalmente aferrada a la nueva muñeca que le había comprado SeoJoon aquel día.

Taehyung solo supo que ya todo estaba hecho y no había vuelta atrás cuando subió al avión junto a su hija, esta aún preguntando por su otro padre, pero con una gran sonrisa que iba acompañada de la muñeca que sujetaba.

Tenían una nueva oportunidad.

[➷]

El siguiente capítulo tratará de Hoseok, es el único spoiler que les puedo dar :)

Y sí, SeokJin sí sabía sobre los engaños de NamJoon, pero decidió quedarse con él por sus hijos, lo cual no debería ser juzgado, ya que todos tienen razones para actuar de una forma o aguantar ciertas cosas.

Bullet to the heart ➳ HopeVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora