Taehyung sonreía mientras regresaba del super, viendo como su hija jugaba con un peluche que le había comprado hace menos de quince minutos, pues la pequeña había comenzado a llorar cuando lo vio y aunque el omega sabía que no podía consentirla ni aceptar sus berrinches, por estar vez cedió, pues era un buen día y sabía que nada de lo que sucediera podría arruinarlo.
Una vez que dejó las compras en la maleta del auto, pasó a su hija a su pequeño asiento de bebé y se adentró en el auto, recibiendo al instante una llamada de SeokJin, quien pensaba acompañarlo ese día para preparar todo lo relacionado a la sorpresa que pensaba llevar a cabo.
— Estoy conduciendo, SeokJin. — dijo apenas colocó la llamada en altavoz
— No lo creo. — contestó de inmediato su amigo. — de lo contrario no hubieras contestado.
Taehyung sonrió, mirando por el pequeño espejo retrovisor a su hija ser feliz con el nuevo juguete que había agregado a su colección.
— Está bien, me descubriste. — prosiguió el pelicastaño. — pero estoy a punto de salir del estacionamiento y dirigirme para allá.
— ¿Es enserio? — contestó un poco indignado el omega mayor. — pensé que ya estarías en el centro comercial. — y ya se podía imaginar el puchero aniñado de SeokJin. Taehyung realmente imaginaba a su amigo a punto de entrar en una crisis o en una de sus tantas escenas dramáticas. — ¡El bebé no me dejó dormir anoche y...— y ahí iba. SeokJin era así. Taehyung lo conocía bien por la cantidad de años que NamJoon había sido mejor amigo de su esposo. — ¡Y los niños! ¡Los niños me hicieron un desastre la cocina creyendo que podrían prepararme el desayuno! ¡Tuve que cambiarme dos veces de ropa y alimentar a MinSeok antes de salir, sin contar que realmente esta situación me está matando! ¡No debí tener un tercer hijo, no cuando los niños aún...
— SeokJin, nos vemos allá, por favor. — tuvo que gritar para que su mejor amigo lo escuchara, pues sabía que cuando SeokJin entraba en una crisis absolutamente nadie lo podía detener, y sin despedirse colgó, viendo como su hija reía cuando mencionaba el nombre del tío Jinnie y lo exagerado que era. — Ahora sí, vámonos, preciosa. — le habló a su hija, recibiendo un asentimiento con la cabeza, lo cual indicaba que la pequeña estaba lista para su viaje hasta uno de los centros comerciales más concurrido de la ciudad.
Taehyung no dejó de cantar durante todo el camino, mientras observaba a su hija por el espejo retrovisor, quien al parecer estaba muy concentrada en uno de los dibujos animados que le había colocado en la pequeña TV que habían comprado específicamente para ella en momentos como esos, donde la pequeña se transportaba junto a sus padres.
El omega llegó al centro comercial muy rápido, pues aquel lunes de diciembre, faltando tan solo una semana y media para navidad, había decidido salir en busca del regalo para su esposo, uno muy especial, pues ya había comprado casi todos sino fuera por aquella noticia que le tomó por sorpresa hace tan solo unos días antes de realizarse la sesión de fotos navideñas. Taehyung jamás creyó que volvería a sentirse con la ilusión y la felicidad que una vez se le fue arrebatada, pero ahí se encontraba, de camino a encontrarse con su amigo, a quién ya podía visualizar a lo lejos con el pequeño MinSeok dentro de un coche, al parecer había decidido no traer a sus pequeños terremotos, como él solía llamar a los primeros hijos de SeokJin.
— Pensé en quizás comprar en una tienda cara. — comenzó el pelinegro, mientras empujaba el coche de su bebé dormido y miraba a su amigo. SeokJin parecía el más emocionado por la noticia. — Tal vez Gucci, ya que esa marca es de las que más te veo usar.
Taehyung lo pensó por un momento, también lo había tomado como una opción, pues Hani también había tenido una de sus primeras prendas de nacida de aquella tienda.
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Bullet to the heart ➳ HopeV
FanficHoseok es un alfa que había tenido una vida difícil, sí, definitivamente podía catalogarla de difícil cada vez que pensaba en su matrimonio, su trabajo, su juventud, su pasado e incluso su futuro. Taehyung, en cambio, creía que su familia era lo má...