~Capítulo 47~

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Estando arriba, descubrí algo que no sabía que padecía. Las paredes de la ventilación se hacían cada vez más estrechas. Lucho por regular mi respiración y seguir los pasos de Connor quien nos guía.

Hace un frío insoportable e ir lento no ayuda para nada, las paradas están congeladas por lo que nuestras extremidades no podían permanecer dos segundos en ellas.

—Acabamos de pasar por los laboratorios. — Señal Connor.

Observo por las rejillas hacia abajo, se podía ver una parte de los laboratorios porque habíamos dejado atrás la gran parte.

—Entonces, ¿Cuánto falta?, El decir que soy claustrofóbico, no era mentira. —Escucho susurrar a Alexander.

Espero que responda Connor, la verdad no estoy familiarizada con el mapa de los conductos.

— Avisaré, cuando deban mantener el aire, deberán hacerlo para poder llegar al otro lado.

—Bien, las armas me servirán para matar a cada uno de esos hijos de puta.

— Vocabulario. —digo negando.

— Perdón, ellos sacan lo peor de mí.

— No me había dado cuenta... — Susurra Connor. — Te necesito concentrado.

— Si jefe.

Pasamos los conductos en silencio, podía ver qué alas estábamos dejando atrás a través de las rejillas, por suerte, no había muchos guardias en las salas, los pocos no se percataron de nuestra presencia, sin duda, Diosito está de nuestro lado, o bueno, cualquier ser omnipotente que esté allá arriba.

— Es aquí. —Anuncia Connor. — Voy a ir primero, abriré la rejilla y los espero abajo. Apenas lo haga, llegará un poco de aire, no el cien por ciento, pero algo llegará.

— ¿Tú podrás hacerlo? ¿No es peligroso?

— Alguien tiene que hacerlo... — Es su respuesta.

— Ten cuidado.

— Lo tendré, no te preocupes. Los veo del otro lado.

— Lo mismo dije yo... Debe ser de alguna película... — Divaga Alex.

— Atentos. Escuchen mi señal.

Vuelve a arrastrarse hacia adelante. Abre una compuerta entre nuestro lugar y el otro. Su cuerpo apenas cae por él.

Toma aire y se pierde entre la oscuridad de las ventilas. A esta altura todos estamos sudando en exceso, no es nada bonita la escena.

Después de unos largos segundos, escucho el silbido de Connor. Los exploradores tenían esa forma de comunicarse en el búnker.

— Había olvidado el sonido. — Niega Alex con nostalgia. — Vas tu Emma.

— ¿Seguro? Puedo ir detrás de ti.

— Ve tú... Seguiré tu línea de baba.

— Idiota. — golpeó su hombro.

— Apúrate, Connor debe estar muriéndose allá abajo

Tomo aire para relajarme y me preparo para entrar a ese pequeño orificio. Al entrar, me arrastró lo más rápido posible, veo un poco de luz adelante, paso por el orificio de salida con la respiración sumamente agitada. Siento que respiro tierra del poco oxígeno que hay en el lugar.

Llegó a la ventila, hay mucho más oxígeno, visualizo a Connor abajo, su cara de alivio es notaría al verme, posicionó mis piernas y salto. Mi pierna duele por la herida de bala a punto de sanar provocada por la desquiciada de Margaret. No demuestro mi incomodidad no quería preocuparlo.

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