En la habitación de Ho Seok una alarma perturba el escaso sueño tanto de él como de Yoon Gi. Ambos gimotean ante su desgracia y cuando se quieren revolver son conscientes de que Ho Seok sigue teniendo entre sus brazos a Yoon Gi.
Yoon Gi siente latir su corazón con fuerza, apaga la alarma y agarra el lazo de Ho Seok, se gira levemente y cree morir cuando su mirada se cruza con la del otro. ¿Por qué? Siente la mayor de las torturas estando tan cerca de sus labios. Tiene toda la intención de separarse, pero Ho Seok le toma del rostro y antes de que pueda ser consciente está saboreando ese aroma a chocolate. Pierde la cabeza, le corresponde el beso con ansias, se revuelve escurridizamente entre los brazos de Ho Seok y se acaba subiendo sobre su cadera.
Ho Seok siente el hambre que tiene de Yoon Gi quemarle dentro de sí, más cuando lleva sus manos a las caderas que se empiezan a mover despacio sobre él.
El debate interno de Yoon Gi cree provocarle un tremendo dolor de cabeza, ¿debería exponerse? Le duele el alma de pensar en seguir resistiéndose, él es la única persona con la que no quiere tener que aguantarse.
Yoon Gi detiene el beso, aprieta los dientes y une su frente a la de Ho Seok, respira hondo y espera no cometer un error.
La respiración de Ho Seok se agita cuando el olor a café es opacado por el de los frutos del bosque, ¿es esto posible? ¿De verdad está pasando? Ho Seok vuelve a besarle con más hambre que antes, Yoon Gi le corresponde el beso de la misma forma. El chocolate se mezcla con los frutos del bosque mientras ninguno de los dos quiere ponerle fin a este momento, pero Yoon Gi acaba cortándolo, obvio tenía que ser él.
—Tengo que irme a trabajar y tú tienes que ir a por Jung Kook, —susurra volviendo a unir su frente a la de Ho Seok—, no hagamos esto más difícil.
Ho Seok no es capaz de decir nada, Yoon Gi vuelve a escabullirse antes de que Ho Seok pueda retenerlo y sale de la habitación. Ho Seok quiere llorar de la frustración. Se queda unos minutos en la cama hasta que decide empezar a prepararse. Mientras coge la ropa del armario, piensa en desayunar unas tostadas con mermelada, automáticamente el estómago le da un vuelco mientras una sonrisa se dibuja inconsciente en su rostro. ¿Qué probabilidades había?
Ho Seok hace por no pensarlo demasiado, se viste rápido y va a la cocina a mirar si hay café hecho, por suerte Yoon Gi no deja que la cafetería se quede vacía. Por más que le apetezca comerse esas tostadas, prefiere no demorarse para ir cuanto antes a por Jung Kook.
—¿Sólo desayunas eso? —le sorprende Yoon Gi.
Ho Seok se le queda mirando, lleva puesto el jersey que le regaló Jung Kook, le queda terriblemente bien.
—Estás muy guapo, —se limita a decir Ho Seok por no decir que está putamente precioso.
—Gracias, —dice algo avergonzado mientras coge una taza para servirse su café.
—¿Quieres que te acerque al instituto? —pregunta Ho Seok.
—No hace falta, voy andando, ¿trabajas hoy? —pregunta Yoon Gi ahora.
—Sí, pero voy a pedir el día, —responde tranquilo—, estoy demasiado cansado.
—¿Vas a pedir justificante en el hospital? —pregunta Yoon Gi ahora preocupado porque le puedan decir algo en el trabajo—, no sé si te lo vayan a dar al no haberlo pedido anoche.
—Se lo explicaré a la jefa, quiero pensar que me va a creer, siempre me da los días cuando Jung Kook entra en celo, si se lo explico seguro que no tiene problema.
—Muy bien, si pasa lo que sea me avisas, —termina diciendo Yoon Gi mientras se termina su café.
Ho Seok ve como termina de recoger sus cosas y como se pone los zapatos. Se despide con un simple "luego nos vemos" y se queda solo en la casa. Resopla con pesadez y se termina el café para salir de una vez a por Jung Kook, recoge las cosas que se dejó por la noche en casa y se baja con todo al coche.
ESTÁS LEYENDO
☘️TARDE DE OTOÑO☘️ -SOPEKOOK-
FanfictionNadie dijo que ser alfa, omega o beta fuera fácil, menos cuando todo parece complicarse repentinamente a causa de los periodos de celo, un poco extremos, que encauzarán el destino de nuestros protagonistas en una historia compleja. Jung Kook, un ome...