Escuchar y ver a Ricky de ese modo me hizo sentir muy mal ¿A caso había cometido un grave error al hacerle una fiesta sorpresa? ¿Había estado tan distraído que no noté que él hablaba enserio cuando dijo que no quería hacer nada para su cumpleaños? ¿Qué clase de amigo era?
- Lo siento - Lo abrazo - Lo arruiné todo. Cuando supe que Hao vendría, se me ocurrió que podría organizarte una fiesta sorpresa, pero fui demasiado imprudente.
Ricky: Eso no fue lo que dije - Suspiró - Gracias por la fiesta.
- ¿Por qué me agradeces? Está claro que no te gustó - Lo tomo de los hombros - Si quieres puedo... - Pienso - Puedo decirles a todos que te sientes mal y cancelamos la fiesta.
Ricky: Reservaste este lugar ¿No es así? No quiero que se desperdicie.
Odiaba cuando Ricky lloraba, porque se veía demasiado indefenso y yo sentía que no tenía las herramientas para hacer que se sienta mejor.
- Eso no importa - Limpio sus lágrimas - Espera aquí.
Ricky: ¿Qué harás?
- Les diré a todos que te sientes mal y que quieres regresar al campus.
Ricky: No tienes que llevarme al campus.
- Piensas que no te escuché bien - Me giro - No te llevaré al campus, iremos a otro sitio solo los dos, espera aquí.
Ricky: No, no tienes que hacer eso.
- ¿Por qué no? Es tu deseo de cumpleaños - Me giro para verlo - ¿No es así? - Sonrío - Además, te dije que por el día de hoy sería tu sirviente.
Antes de que Ricky pudiera decir algo para detenerme, salí del baño y me acerqué hasta la sala donde estaban todos nuestros amigos reunidos.
Zhang Hao: ¿Dónde está Ricky?
- Él... él no se encuentra muy bien - Toco mi cabello - Creo que se enfermó y será mejor que lo lleve de regreso al campus.
Zhang Hao: Entonces lo mejor es que nos vayamos.
- No, ustedes pueden quedarse - Muevo mis manos.
Hanbin: De todas formas, Hao y yo debíamos irnos temprano.
Jongwoo: Esperen ¿Entonces que haremos? ¿Ya no celebraremos nada?
Ricky: No, nada de eso - Se acercó a mi - La fiesta no se cancela.
- ¿Qué?
Ricky: Ya me siento mejor - Me sonrió - Ahora ¿Dónde están mis obsequios? - Les preguntó a todos.
De esa forma la cena de la fiesta comenzó y Ricky se veía genuinamente feliz abriendo todos sus obsequios. Sin embargo, no dejaba de pensar en sus palabras, las cuales me habían dejado algo confundido
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