Aunque no quería sentir presión por parte de mi entorno, era cierto que no tenía razones para seguir estando separado de Matthew. Sin embargo, era consciente de que eso dependía más de él que de mí.
- ¿Podemos hablar un poco en el cuarto? - Le pregunto con discreción.
Él simplemente caminó hacia el cuarto sin decir nada y después yo lo seguí, pretendiendo que el resto de nuestros amigos no nos prestarían atención.
- Esto es incómodo ¿Verdad?
Matthew: Se supone que hablaríamos después de la fiesta, pero está claro que no sabemos como comportarnos frente a los demás y eso lo hace todo más incómodo.
- No esperaba que Yujin dijera esas palabras hoy - Me apoyo en el armario - Lamento mucho si eso te hizo sentir más presionado.
Matthew: Hace un par de meses te dije que me preguntaras de nuevo si regresaría contigo - Se sentó en la cama - ¿Planeabas hacerlo?
- Primero quería pasar algo de tiempo contigo. Te lo iba a preguntar antes de regresar.
Matthew: ¿Por qué?
- Porque si me rechazabas, al menos me podría llevar un buen recuerdo de los días que pasamos juntos.
Matthew: ¿Piensas que te puedo rechazar?
- Ya lo hiciste una vez y lo entiendo - Acomodo mi cabello - Te lastimé y no algo sencillo de olvidar.
Matthew: Si me pongo a pensar, son más los momentos donde me demostraste que me amabas - Miró sus pies - No me gusta recordar los malos momentos, pero creo que los uso más como una excusa.
- ¿Excusa? - Me acerco - ¿De qué hablas?
Matthew: Es una excusa para verte como un ser humano ordinario - Me miró a los ojos - Eres tan perfecto que es difícil encontrarte defectos y por eso me aferré demasiado a tus pocos errores.
- ¿Estás seguro que es solo eso? No fueron simples errores y soy consciente de eso.
Matthew: Es lo que estoy trabajando con la psicóloga.
- ¿Sigues yendo a terapia?
Matthew: Nunca dejé de ir - Tomó aire - Aunque no voy tan seguido, porque no tengo mucho tiempo.
- No soy perfecto y lo sabes - Me siento a su lado - Nunca logro que las personas se queden a mi lado y siempre termino siendo rechazado.
Matthew: No digas eso - Tomó mi mano.
- Pero es cierto, nunca permanezco mucho en un sitio, porque siempre termino siendo un estorbo para los demás - Derramo lágrimas - No quería ser un estorbo para ti también, pero no puede hacer nada para evitarlo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Mientras luchaba para no derramar más lágrimas, Matthew me abrazó y comenzó a acariciar mi espalda.
