Cap. 22

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Li, ha llegado esto para ti —Li dejo de lado lo que hacía, para tomar la carta que le era entregada, al ver el sello real, se sintió nerviosa, aunque todo nerviosismo desapareció, siendo sustituido por una ligera ira, al leer lo allí escrito

Han aceptado que represente a Guepardos en la próxima reunión en Nir, sus palabras no son para nada corteses, pero claramente no les importa lo que pase con nuestro reino, no tienen ningún interés en saber a quienes nos enfrentamos ni participar de los enfrentamientos.

No vale la pena malgastar energía en ellos. Tienes la oportunidad de cambiar el panorama para Guepardos, eres nuestra princesa, y estoy segura de que en un futuro serás nuestra reina.

Yunie, no digas eso, si llega a oídos de nuestros reyes, nos enfrentaremos a la horca.

Eres querida por el pueblo, y siempre has demostrado ser digna de la corona de Guepardos.

No lo soy, ¿Recuerdas que mi titulo de heredera ha sido removido y entregado a mi hermana? Solo me queda cumplir con mis deberes como miembro de la realeza, y un futuro servir a mi hermana. Ahora ayúdame a escoger una vestimenta acorde con la futura reunión.

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El animo de este palacio se siente deprimente

—¿Qué esperabas? No nos estamos reuniendo para celebrar, los ataques continúan, cada vez con más frecuencia.

Te oyes como alguien que necesita un descanso urgente

Para mi mala suerte eso no será pronto —Shenta dejo caer su cabeza en el respaldo de su silla, cerrando los ojos un momento, como deseaba que todo acabara pronto.

Quien sabe y las cosas cambien para nosotros, vengo con buenas noticias —las palabras de Kun hicieron que Shenta volviera a tomar una postura recta.

¿Y qué esperas para decirlas?

Kun se sentó frente a Shenta —al norte encontramos un muy bien escondido campamento, aunque fueron tomados por sorpresa no fueron fáciles de doblegar, una mala noticia es que algunos escaparon, una buena por no decir excelente noticia, es que logramos atrapar algunos, junto con algunos objetos y libros relacionados con magia negra.

¿Y estas seguro que están relacionados con nuestros enemigos?

Lo estoy, porque estaban siendo protegidos por un par de hienas, así que a menos que supieran como domesticar estas fieras, tienen que tener relación con el grupo que buscamos.

Shenta no quería hacerse de ilusiones, pero esperaba que por fin tuvieran suerte, y estas personas pudieran iluminarlos un poco.

¿Y dónde están los prisioneros?

Me encargue de que fueran encerrados domo subterráneo, eso evitaría que se suicidaran.

En Nir, debajo del palacio, existía una estructura que llamaban el domo subterráneo, dentro de este la movilidad estaba muy restringida, al igual que la energía espiritual bloqueada. Era una buena pero también peligrosa idea, no sabían bien las intenciones.

Iré ahora mismo a verles, no puedo perder el tiempo

Dentro de algunas horas dará comienzo la reunión, se que muchos ya han llegado y son pocos los que faltan, ¿no querrás esperar a que estén todos?

Me conoces Kun, no quiero perder ni un segundo, si puedo ofrecer buenas noticias en la reunión esto serviría como motivante. Debido a los continuos ataques y nuestra casi completa ignorancia sobre nuestros enemigos, los ánimos bajan mucho.

Kun acompaño a Shenta fuera de su despacho, al domo había dos entradas, una era por la biblioteca privada, que era a donde se dirigían; la otra en la parte trasera del palacio, donde se encontraba el área ancestral de Nir, allí donde los miembros importantes de la familia real eran enterrados, y por donde Kun ingreso a los cautivos.

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Li acababa de llegar a Nir, Cheng estaba con ella, junto a otros compañeros. Fueron guiados por el lugar, ellos nunca habían estado allí, de ello lo más cerca de Li había estado de la capital imperial, fue cuando estuvo en la frontera, pero no quería recordar nada de ese día, pues seguía siendo tan doloroso como al principio.

Como se esperaba de un palacio imperial este era muy glamuroso sin llegar a lo ridículo, el rojo era el color predominante, en las paredes estaban talladas con dragones, fénix, y otras criaturas mágicas afines al fuego, raíz espiritual de los Nerida; había muchos arboles plantados de forma desordenada pero que se veían bien a la vista, también habían muchos pequeños arbustos que por la temporada no estaban florecidos; y claramente no podían faltar las estatuas de animales místicos y de antiguos emperadores Nerida, que Li estaba segura no solo estaban ahí con fines decorativos.

Princesa Zen, que sorpresa verla —Yara Zuli, princesa de Lotos, saludo un poco alegre a Li, quien se sorprendió de verla aquí.

Princesa de Lotos, Segundo Príncipe —el tono de Li fue menos eufórico, pero mantuvo una sonrisa amable, que era correspondida por Zuli, quien vestía en tonos pastel, con su cabello suelto, con trenzas salteadas decoradas por horquillas plateadas.

Quien no se veía contento con ver a Li era Yara Uxier, segundo príncipe de Lotos, y con quien Li había tenido obvias diferencias —Que Guepardos envié a alguien sin importancia a esta reunión demuestra su compromiso, no sé porque el Emperador se molesto en invitar a unos monjes arcaicos y avariciosos.

Que le invitaran a usted debe de darle la respuesta —Li no podía entender el odio de este príncipe para con ella y el Reino de Lotos, pero estaba acostumbrada a ser odiada y atacada sin razón.

Princesa Zen, no tome enserio las palabras de mi hermano, solo esta cansado y estresado, no pretende ofenderla

No mientas Zu, para esta supuesta princesa no es secreto cuanto la estimo, no soporto a las personas aprovechadas como ella.

¿Y como ha logrado sobrevivir consigo mismo?

Por que no cuento con las desfavorables cualidades tuya y de los tuyos.

Con todo respecto Segundo Príncipe —Cheng decidió intervenir— usted no conoce a Guepardos y a su gente, solo puede hacer suposiciones. Así que ahórrese sus malintencionadas palabras, que no tengamos una relación activa con otros reinos quiere decir que nos dejaremos humillar, y que le falte al respecto a nuestra princesa.

¿Y dónde está su dichosa princesa?

Hermano ya basta, la Princesa Zen está aquí por invitación de Shenta, faltarle al respecto a sus invitados es faltarle el respecto a él. Por favor ya deja de meterte con la Princesa Zen.

La forma familiar de Zuli referirse a Shenta, hizo que Li la mirara y sintiera un pinchazo doloroso. Ya sabia que la comitiva de Lotos había pasado hace días, por lo que la princesa tenía su par de días en Nir, días que al parecer sirvieron para crear una buena relación entre ella y Shenta.

Y pensado en el susodicho, este hizo acto de presencia, sorprendiéndose un poco, no de ver a Li allí sino de ver como lucia, para él siempre seria extraño verla luciendo atuendos típicos de la realeza.

Su vestimenta era turquesa, sus botas altas de color blanco, y su larga cabellera recogida en una cola, atada por una serpiente de plata, al ver esta serpiente Shenta llevo su vista a las manos de Li, donde faltaba el delgado anillo que era su alma espiritual.

Princesa Zen, ya ha llegado

Su Majestad

Ya que ha llegado a buen momento ¿Me acompañaría a un lugar?

El Diario de una Reina AmadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora