Elementos: Guardianes De El Mundo

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"Desastre"

Max

Corríamos por los pasillos de mi antigua casa, la sirena de invasión sonaba tan estrenduosamente que sentía que mis tímpanos explotarían.

Llegamos a la puerta principal, todos salíamos, Vic el guardia nos esperaba afuera, no tenía buena cara.

—En segundos estarán aqui— avisó serio— Salgan por atrás.

Aurela soltó una maldición muy alto, le quitó a Kevin a Ivy y corrió de regreso, le seguí a su misma velocidad, no sabía si los demás lo hacían pero yo sí.

Por la parte de atrás el muro era más alta, entonces Aura en un solo movimiento hizo que grandes raíces crecieran hasta llegar arriba.

—¡Vamos!

Con una sola mano subió, ayudé a Javier con la chica casi muerta y ya nos encontrabamos al otro lado del muro, corriendo como locos.

Mientras dábamos la maratón de nuestras vidas, los disparos de la guardia no se hicieron esperar, oí gruñidos a mi lado pero no me detuve, hasta que una bala me rozo la mano, ahí si agarré energía, mis manos calientes, les lancé bolas de fuego que se que fueron lo suficientemente peligrosas para quemarlos vivos.

Derek devolvía los disparos, no era suficiente, ya que los demás iban a pasos adelantados.

—¡Anda!— le dije pero seguía a mi lado disparando, las bolas de fuego salían más grandes cada vez.

—Estas loco si piensas que serás el héroe de la noche.

Giré los ojos, no estaba para esto.

—Vete a la mierda — insulté siguiendo mi camino.

Alcancé a los chicos unas cuadras después, atrás de mi Derek.

No teníamos mucho tiempo.

—¿Quién está herido?— pregunto la pelinegra con una mueca.

Todos levantamos las manos, cada quien tenía un roce o una bala en su cuerpo.

—¿Ahora que?— Ivy estaba en colapso.

—Vic debe de venir por nosotros, sin él no podemos salir de aquí— contestó Aurela mirando hacia los lados.

Vi el momento exacto en el que Daniel tensaba la mandíbula, rápidamente le quité a Kevin a la ojo verde.

—¿¡Te has confiado!?— se le acercó tanto que Aurela dió un paso atrás— es capaz que nos traicionó... ¡Tenías un plan! ¡Que mierda es lo que hiciste!

Ella se mantuvo con el mentón en alto, es que nadie era capaz de meterse ahí, sabíamos cómo era Daniel.

—Segundos, dame solo segundos y veo que hago— la chica tragó grueso. Primera vez que la veia tan intimidada por alguien.

Daniel le tomó el cuello del traje que llevaba y la zarandeo, estaba furioso.
Quise meterme pero Nolán puso una mano en mi hombro para darme un mirada confiada.

—Si no haces algo, te juro que te dejo aquí— afirmó, nadie hablaba, pero Derek tuvo que meterse.

—Es una mujer, dejala.

—Es un soldado.

—Es una mujer y merece respeto...

—No— cortó Aurela— Que me trate como un hombre mas, no hay problema.

—Pero..— Derek si que era insistente ¡Dios!

—¡Que soy un hombre mas!— bramó mirándolo fijamente, haciendo que este retroceda.