Ghoul.

XXXIX

El delicioso aroma de la naturaleza al estar expuesta a la humedad y la neblina hacen que Soo sonría con los ojos cerrados.

—Extrañaba esto, extrañaba este lugar

Los meses han pasado considerablemente, Suni Soo ha salido por cuarta vez al exterior, Justo al lago que solían llevarlos sus padres a darse un chapuzón o quizás a pescar, cualquiera de las dos actividades era divertida cuando estaban juntos. Soo sonríe, lleva sus manos dentro de los bolsillos de su chaqueta. 

—Si, que buenos recuerdos ¿no es así?, sabía que iba a gustarte volver a estar aquí
—Sí, me parece algo sanador...me recuerda mucho a mi mamá

Jong in baja la mirada y sonríe. Aún no sabe de qué manera actuar con situaciones que están fuera de su control.

—Bueno, es hora de meternos un chapuzón. Ve a cambiarte primero dentro de la van
—De acuerdo —Soo sonríe haciendo que sus ojos se hagan pequeños y sus mejillas se hagan regordetas.

Soo parece estar mejorando, cómo dándose a la idea de que su mundo es este y que lo que realmente vivió no fue algo que quisiera recordar, pero...¿será real?
Cuando entra a la van y cierra la puerta tras de ella, comienza a buscar en su mochila su bikini de manga larga para poder usar aunque su mirada cae sobre una de sus muñecas...

¿Los vampiros y los Ghoul son reales?,  ¿Taehyung y JungKook fueron reales?, no ha tenido noticias desde que todo terminó y eso está concomiéndola por dentro.

—JungKook...fuiste real...—acaricia sus cicatrices. Su mirada se centra en su muñeca, pero poco a poco su mirada cambia y sacude su cabeza para seguir buscando su bikini en la mochila. —que tonta soy, al fin estoy donde quería estar, ¿qué carajo me pasa?, esto es patético

Soobin observa con detenimiento la mirada perdida de su admirable Hyung Jeon JungKook quien no dice ninguna palabra, no parpadea y no se lleva carne de animal fresco a la boca como sus dos compañeros.

—Soobin, gracias por habernos dado hospedaje los últimos tres meses —comenta Taehyung— pero creo que es hora de partir a otro lado
—¿Ya se van?, ¿porqué?, ¿no sientes que estén seguros aquí?
—No estamos seguros en ningún lado honestamente. Y teniendo en cuenta de la condición de Jeon supongo que es mejor irnos de aquí antes de que te maten
—Pero no hubo problema por su caza, no han dado con ustedes
—No, pero lo harán si no nos movemos y te recomiendo que tú también te muevas de lugar, pronto sabrán que nos has ayudado al percibir nuestro olor si llegan a venir

Soobin parece preocuparse, mira nuevamente a Jeon quien parece perdido en la nada.

—Yo...yo no soy de mucha ayuda quizás Hyung, pero ¿crees que pueda ir con ustedes?

—-
Narra Soo:

—¡El agua está helada! —Digo después de darme un chapuzón en el lago mientras me cubro con mis brazos.
—Espero no enfermar, el clima también está muy helado

Jong In está frente de mí con su torso desnudo, tiene su cabello mojado y raramente se ve lindo. Jugamos un rato a lanzarnos agua, nadamos un poco y contemplamos un rato el cielo mientras flotábamos.
Nos salimos como a las cuatro y cuarto, mientras me secaba el cabello Jong In me pasa un sándwich y le doy un mordisco.

—Te veo mejor Laka —la sonrisa de mi amigo parece honesta. —Me gusta verte así
—Gracias —sonrío y bajo la mirada mientras mastico.
—Sé que no sueles recibir mucho este tipo de comentarios y que te incomodan hasta lo más mínimo. Es la última vez que lo hago, lo prometo —sonríe más grande. —No sabes lo feliz que me hace tenerte aquí, conmigo

Mis mejillas se ponen coloradas al instante, siento mi cara calurosa a pensar del frío; supongo que ya me di a notar, pero en algo tiene razón. No sé qué decir ante esto.

—Oh...yo igual —intento sonreír, bajo la mirada y dejo de comer mi delicioso sándwich. De alguna forma se me ha quitado el apetito.

Veo como su expresión cambia, se me ha partido el corazón al ver cómo sus ojos se tornan tristes y su sonrisa disminuye, quizá esa no es la respuesta o el entusiasmo que esperaba. Claro que me encuentro feliz, no cabe duda. Tanto tiempo sin verle y cuando volví a saber de él una parte de mi vida volvió a cobrar sentido, luego me separan de él y de mi padre y todo cambia, todo se vuelve un caótico cuento de terror, amor y suspenso del cual he perdido completamente la noción. Y heme aquí, en un entorno que es conocido para mí, frente a la persona que siempre quise; mi felicidad es infinita, es solo que...está incómoda sensación de no sentirme completa me hace trizas por dentro y lo reconozco, ahora lo reconozco. Jeon Jungkook me abandonó, me dejó en el bosque y eso me mata, me tortura cada noche aunque por las mañanas lo oculte con una sonrisa. Estoy cansada.

—Jong In...perdón, he actuado como una estúpida últimamente, pero no tengo control de esta situación y te juro que esta acabándome —mis ojos se cristalizan.
—¿Qué?, no ¿de qué hablas?, simplemente quiero ayudarte, pero no sé cómo y eso me frustra—toma mis manos heladas con sus manos cálidas y suaves.
—No me siento en mi lugar...
—¿Extrañas tu casa?

¿Estoy segura que es el momento de decirle lo que siento?, ¿será correcto mencionar a Jeon?
Supongo que no. Me verá como a una loca, una tonta que se enamoró de la persona que la raptó y torturó, eso no es sano y no está bien. Ni siquiera yo sé lo que se supone que debo sentir, solo sé que está doliéndome.

—Extraño a papá, quisiera tenerlo como antes...—es lo único que se me ocurre, aunque si lo extraño, pero tampoco es que papá me tenga abandonada. —extraño mi habitación...mis cosas.
—Ven aquí

Me lleva a sus brazos mientras sollozo un poco. Su calor me hace sentir de alguna forma protegida, pero no son sus brazos los que busco.

—Quisiera llevarte a tu casa, Soo, debes estar sintiéndote extraña últimamente. No has pasado por una buena situación y ahora estás viviendo las consecuencias del daño que te han hecho. Si tan solo pudiera vengarte...pero prefiero quedarme a cuidarte.

Sus palabras me hacen sentir...extraña, mi ansiedad se tranquiliza.

—Todo va a estar bien, te lo aseguro —me afirma.